CAPITULO 29

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—Yo no juzgo a nadie sin antes escuchar ambas versiones de la historia. —sus palabras suenan sinceras y firmes —Yo le mentí a mi hermana y le dije que mamá fue la que dijo que no tenia familia porque ella sentía admiración por mamá, ella quería saber más de la familia de mamá pero ella no quería hablarlo. Sandy es muy curiosa así que no dejaría el tema en paz a menos que le diera una justificación que le hiciera olvidar el tema así que le dije que mamá había dicho que su familia había muerto y solo quedaba ella.

—¿Por qué?

—Eso fue lo que dijo papá.

"¡¡Ese bastardo..."

—Hablar del pasado no tiene caso. Sídney no esta pero ustedes si, no las obligaré a irse pero tampoco a quedarse, será su decisión si quieren continuar con sus vidas humanas. —guardo silencio por un breve momento —Si no tienes nada mas que decir puedes irte.

Dejo de verla y escucho sus pasos alejarse, nuevamente mi doncella se encontraba en las sombras esperando una orden mía.

—Puedes irte Rosa.

—Mi señora, sé que no es de mi incumbencia los asuntos de su familia, pero estoy segura de que si le dice lo que su padre hizo, ella lo entenderá.

—Rosa, Keith es una chica que admira a su padre. Lo pude notar con solo escuchar por la forma de llamarlo papá, pude sentir el afecto que le tiene.

—Pero ese humano merece que sus hijas lo odien. Le arrebató a lady Sídney por poder.

—Eso me hará la villana Rosa. Viste la reacción de Sandy cuando supo que era su abuela, me culpó de todo cuando en realidad fue su padre quien me alejó de su madre por no cederle mi puesto a ella y así tener el dominio de todo lo que poseo. sabía perfectamente que jamás podría ocupar mi lugar y por ello quería que se diera mi lugar a mi hija y así usarla como su marioneta para poder gobernar a su antojo. Como le digo todo eso. Eso, solo hará que me odien más.

—Mi señora, debe haber alguna forma de que ellas...

—Basta Rosa —termino el tema cansada —Es algo del pasado, ya no importa, lo importante es protegerlas para que mi linaje siga latente.

—Mi señora, la conozco perfectamente, estoy a su lado desde el año 500, y sé que no lo hace solo por proteger su linaje. Yo estuve a su lado también cuando sufrió por la muerte de su hija, fui la única testigo que la vio llorar con dolor por su pedida.

—Tienes razón —admito con tristeza —Y agradezco que nunca lo mencionaras, hasta ahora —ella se disculpa conmigo —Pero con ellas no quiero cometer el mismo error. No las detendré si desean irse lejos de aquí. Aunque eso me afecte a mi. —admiro las rosas rojas que adornan la tumba de mi hija —Puedes retirarte, daré mi paseo matutino.

—Si, mi señora.

Me retiré a mi único lugar de paz, la tumba de mi querida hija, es lo único que pude hacer por ella, alejarla de ese bastardo y de la putrefacción empecé para que al menos en la muerte tuviera descanso.

—Al final, cada ser terminamos así si caemos en cualquier basura con parásitos en su cabeza, ¿no es así, hija? Creí que te había entrenado para todo, pero me equivoqué, olvidé entrenarte para escapar de las garras de bastardos como lo fue tu padre y tu marido. —puedo sentir la esencia de ambas cerca. —Seguir a un vampiro es lo más estúpido que pueden hacer.

Ambas hermanas salen de los arbustos, Sandy aún seguía indiferente pero el enojo en ella parecía haber desaparecido en cambio Keith siempre posee esa sonrisa cálida, la misma de mi hija Sídney.

—Lo siento, —dice Keith. —Sin querer escuché la conversación que tuvo con su sirvienta.

Frunzo el ceño molesta conmigo misma porque no la sentí. Ellas se acercan a mí sin ser invitadas y lo permití.

—¿Entonces... es la tumba real de mamá? —pregunta Sandy curiosa.

—Era un riesgo que los humanos vieran el cuerpo de su madre así que la traje donde debió permanecer siempre, cerca de mí.

—Ahora entiendo porque sentía aquella tumba vacía como si fuera una intrusa.

—Me sorprende que aun siendo una humana heredaras la perspicacia de mi hija —miro a Sandy de reojo —Supongo que estaría orgullosa de ambas.

—¿Usted cree? —al verlas de reojo nuevamente, veo que se sienten felices así que asiento moviendo mi cabeza —Mamá... —murmura Sandy con nostalgia —Te extraño mucho. —Keith pone sus manos sobre su hombro sonriéndole y ella la sujeta —Aun sigo esforzándome en mis estudios como lo hacia antes en el kínder cuando me decías que era la mejor. Que era digna de ser tu hija.

Sus palabras me trajeron viejos recuerdos.

—Eres la mejor hija, digna de una Arwockle.

—Soy hija de la mejor madre del mundo —me abraza tomándome por sorpresa —¿Verdad que soy digna de ser tu hija?

—Siempre.

Ladeo una sonrisa nostálgica, es como si hubiese pasado ayer.

—Mamá... al fin encontramos a tu madre. —Keith sonríe emocionada haciéndome reaccionar y que las vea disimuladamente —Recuerdas cuando me hablaste de ella.

"¿Ella le habló de mí?"

—¿Mamá te hablo de... su madre?

—Si lo hizo. —asegura —Ella me dijo que era muy hermosa y elegante, una mujer fuerte que no le temía ni a la propia muerte, jamás demostró debilidad o dolor antes nadie, nunca derramó una sola lagrima por alguien, era una mujer digna de admirar y difícil de estar a su altura, ¿lo recuerdas mamá?. Dijiste que habría una oportunidad de conocerla y que ella se emocionaría de vernos. Aunque tú te fuiste antes... pero al final, el destino nos trajo a ella. Sabes, ella no dudó en ir por Sandy y salvarla, ella fue y se enfrentó al rey, tenías razón, ella es muy fuerte, el novio de Sandy nos contó todo, ella lo enfrentó como una fiera; iba a la par en la pelea contra el rey, te imaginas ver una batalla así mamá, —ella se veía emocionada hablándole de mi —Seria épico, verdad. Me hubiera gustado estar ahí para verlo y así decirte todos los detalles es una lástima. —carraspeó mi garganta porque eso fue lindo sentir que te admiraban —Mamá... no tienes que preocuparte por nosotras, ahora ella nos protege. Aunque parezca fría y malvada, pero tiene un corazón grande porque a pesar de que ignorábamos de que somos familia, ella fue de inmediato por nosotras, desde que llegamos aquí, ella estuvo cuidándonos.

—No es así —replico.

—No sea modesta —ella me toma de la mano. Me quedo petrificada por su atrevimiento —Ya todos nos dijeron que usted ideó todo el plan para salvarnos. Mamá, estamos felices porque ahora ya no estamos solas Sandy y yo, ahora tenemos a la abuela Verónica. —ella guarda silencio —Espere... al verse tan joven seria raro que le llamemos abuela, ¡Ah! Ya sé, mamá, la diremos madre como tú lo hacías, verdad que es genial mamá.

—¡Qué! —dije al mismo tiempo que Sandy —Oye espera...

—No me dirá que quiere que le diga abuela. —se cruza de brazos —Sabe bien que se sonará extraño que le diga abuela a alguien que se ve tan joven. —no pude replicarlo porque tenía razón, se vería extraño. —Mamá, te prometemos visitarte mas seguido, haré un espacio para visitarte, ah si, no te lo dicho, gracias a mis buenas calificaciones, me gradué en Cambridge y ahora soy una doctora, estoy empezando, pero he ayudado a muchos con mi trabajo.

"Así que ella quería que fuera doctora"

Al final se quedaron aquí y al siguiente día Rosa me dijo que continuarían viviendo como hasta ahora y lo acepté porque no tengo ningún derecho en negarles o en intervenir en sus vidas, pero me preocupa porque estoy segura de que Francisco no dejará pasa fácilmente lo sucedido anoche.

LinajesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora