En la Capilla

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La mañana ha llegado.

Estoy en la cocina, tomando un café fuerte mientras intento sacudirme el cansancio de otra noche de mal dormir.

Desde mi posición, puedo ver a Ayala y Luciel sentados en la mesa del comedor, concentrados en un conjunto de papeles, antiguos planos de la mansión, extendidos frente a ellos.

Intentan descifrar detalles cruciales en ellos, como memorizar cada entrada, salida y pasillo.

― Son de al menos unos quince años de antigüedad. ― escucho decir a Luciel. ― Espero que no hayan hecho remodelaciones drásticas al diseño inicial.

― Aún así, son un buen punto de partida. ― le responde Ayala. ― Con ellos puedo trazar un punto de entrada y salida, apoyándome con la información que nos envía el equipo de vigilancia.

Es verdad.

Tenemos un equipo discretamente posicionado a las afueras de la mansión, Han sido nuestros ojos y oídos, proporcionando información crucial sobre los patrones de movimiento dentro de la propiedad.

La mayoría de las personas con túnicas raramente salen a los jardines, excepto unos pocos. Los informes indican que Rika suele pasear en las tardes por los jardines del ala oeste, los más hermosos, donde también hay un huerto.

Sin embargo, lo que más me preocupa es el anexo de la mansión, donde la seguridad es extraordinariamente alta. Todos los indicios apuntan a que ahí podría estar Danny, retenida y vigilada de cerca.

A pesar de toda la vigilancia, no hemos visto a Saeran ni a V en ningún momento.

Taeyang vuelve al salón.

Se ve visiblemente estresado, y sé que ha ido a mi despacho porque recibió una llamada de sus padres.

― ¿Cómo te fue con la llamada?

― Hablé con mi madre. ― dice con pesades. ― Mi padre apenas puede manejar la angustia, así que no pude hablar mucho con él.

Pienso en el padre de Danny, un hombre que confió en mí para cuidar de su hija. Siento que lo he defraudado terriblemente. No solo no he podido proteger a Danny, sino que tampoco he tenido el valor de ir a explicarle la situación personalmente.

¿Podrá ese hombre tenerme la confianza para entregarme a su hija después de esto?

― ¿Y qué te dijo tu madre?

― Ella... no está tan afectada como mi padre. Sabes cómo es. Para ella, Danny nunca fue una prioridad.

Siento una punzada de irritación, aunque trato de mantener mi expresión neutral. Siempre supe que la madre de Taeyang no se preocupaba mucho por Danny, pero escucharle confirmarlo en este momento lo hace aún más desquiciante.

Lo que me recuerda:

― ¿Ava lo sabe?

― ¿Confías en la discreción de una adicta apostadora?

― No. ― concluí al instante.

― Como sea... Mamá dijo que padre no está muy convencido de que no hayamos llamado a la policía y estemos actuando por nuestra cuenta.

― Entiendo su preocupación, pero la situación es mucho más compleja de lo que ellos piensan.

― Piensan que es el típico caso en el que se pide una recompensa por un rehén.

― Esto va más allá de un simple caso de secuestro por recompensa.

― Lo sé. ― suspira. ― Ella confía en que con tus recursos no habrá problema en pagar cualquier cantidad que te pidieran por Danny.

En los brazos de Jumin HanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora