Al final... creo que Yinghua tiene razón, no quiero que esto termine, así que es hora de escuchar lo que tiene que decir.
Llegué a donde me había indicado la carta del maestro Jinshi y vi que él ya estaba ahí.
—Lamento mucho si lo hice esperar demasiado —dije.
—Está bien, estaba tan ansioso que decidieras no venir que llegué un poco antes —respondió—. ¿Podrías venir aquí por favor?
Asentí y me senté a una distancia considerable de él.
No se ve que esta habitación sea usada por alguien, está limpia, pero no hay pertenencias personales de alguien aquí.
El maestro Jinshi al ver la distancia que seguía poniendo agachó un poco la cabeza, y aun así, se acercó hasta quedar al lado mío.
Hay un aroma dulce... es té.
Desde que había llegado, había evitado mirarlo a los ojos, enfrente de Gaoshun tenía que hacerlo, pero ahora que estábamos a solas no tenía que ocultar el hecho de que estaba triste y decepcionada por la situación.
—Por favor Mei... no soporto estar lejos de ti, no quiero que me dejes —suplicó—. Sé que cometí un error, y no sabes cuánto lo siento, pero no sigas aumentando más el tamaño de la brecha que nos separa.
Apreté mis manos y suspiré hondo.
—¿Cree que a mí no me duele? —le pregunté—. ¿Cómo cree que me sentí en el momento en el que supe que se tomaba esa medicina?
Revivía ese momento una y otra vez.
—No me importa la razón por la que se esté tomando la medicina, si no quiere hijos... por mi está bien, es un deseo personal del que puedo prescindir sin problemas —continué—. ¿Porque no decirme que lo estaba haciendo? ¿Tan poca confianza le inspiro? ¿No soy lo suficientemente confiable?
—¡No! —respondió seguro—. Confío en ti más que en nadie Mei...
—Pues no lo parece, maestro Jinshi —espeté.
Ambos nos sumimos en un largo y oscuro silencio.
—Es tan difícil poder estar contigo enfrente de todos los demás, no puedo tomarte de la mano, no puedo abrazarte, no puedo besarte... no puedo tocarte —me dijo—. Que mi momento favorito del día era cuando iba a tu habitación o te mandaba llamar para poder verte y hacer todas las cosas que no podemos hacer en público.
Acercó con mucho cuidado sus manos a las mías y dejé que las tomara.
—Sé que me lo merezco, merezco tu desprecio y que ahora sientas que no confío en ti, pero te juro que eso no es así —continuó—. No soporto estar separado de ti, por favor... déjame estar a tu lado, aunque me odies... no volveré a ocultarte algo jamás.
No quería que me dijera la razón, sabía que era muy importante de otro modo no me lo hubiera ocultado, quería que me lo dijera cuando sintiera que fuera el momento adecuado, yo lo único que quería que me dijera era que tomaba esa medicina.
—¿Me vas a mirar? —preguntó—. No me has mirado en todo este tiempo...
Suspiré y decidí que iba a aceptar sus disculpas.
Esto... también ha sido muy difícil para mí.
—Si lo miro, maestro Jinshi.
De inmediato alzó la mirada y nuestros ojos se encontraron.
—Gracias por contármelo —le dije—. Y yo no lo odio... no podría.
Abrió un poco más sus ojos y llevó mis manos a sus labios para besarlas suavemente.
![](https://img.wattpad.com/cover/371284138-288-k726105.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Noches efímeras | Jinshi
FanficNo había noche de Mei-yin no trabajara en el barrio rojo, tener muchos clientes en una sola noche y al día siguiente atender a sus pacientes era un estilo de vida agotador, pero que la había llevado a tener mucho más que la mayoría de las personas e...