Capítulo 85

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Se determinó que volveré a visitar esa habitación mañana, se necesitará el permiso del emperador, pero... si la emperatriz viuda se lo pide no creo que haya problemas con que se lo permita.

Además, esta vez el maestro Jinshi también vendrá a esta visita, por lo que es muy probable que la señora Suiren esté involucrada en la discusión... ha pasado un poco de tiempo desde nos vimos, pero estaremos en presencia de la emperatriz viuda así que no podemos hacer movimientos arriesgados.

Hongniang entiende muy bien que soy muy solicitada para otras tareas que no tienen nada que ver con mi servicio a la señorita Gyokuyo, principalmente porque está muy segura de que mi lealtad está con ella y el maestro Jinshi.

Aunque... si me gustaría tener una posición definitiva, hacer muchos encargos privados para varias personas siento que me pone en situaciones complicadas, quisiera... tener una estabilidad aquí en el palacio interior, eso no estaba mal en el barrio rojo...

—¿Has terminado de cambiarte?

Me giré y vi a la señora Suiren.

—Si.

—Por favor, descansa cómodamente.

La habitación que suelo usar está ocupada por otra persona, así que me estoy quedando en una de las habitaciones contiguas a la señora Suiren... conozco muy bien este lado de la residencia del maestro Jinshi.

—Por favor Mei, duerme aquí esta noche.

—Sabe que no era necesario tomarse tantas molestias —me excusé.

—Y tú sabes que no hubiera podido dormir tranquila —objetó.

Meneé la cabeza y vi que se sentó a leer al lado de una vela.

—Puedes encontrar algunos libros en el interior —me dijo—. Estoy segura de que habrá algo que te guste.

—Muchas gracias.

Mientras veía alguno que me llamara la atención, vi una caja decorada con oro, tenía delicados adornos en las orillas y se veía un trabajo muy fino.

—¿Te despertó el interés? —intervino la señora Suiren.

—Lo siento mucho, no planeaba ser entrometida —le dije.

—Lo sé, no te preocupes.

Y tomó la caja y me mostró su interior, revelando algunos juguetes para niños.

—Estos eran los favoritos del amo Jinshi —explicó—. Tenía muchos juguetes, pero como solo jugaba con sus juguetes favoritos, escondí algunos en secreto.

—¿Porque lo hizo?

—Las personas comienzan a ignorar las cosas una vez que se obsesionar con algo, y dado que él nació en una posición en la que eso no estaba permitido, tuvimos que empujarlo para que creciera, aunque fuera doloroso —respondió—. Ese era el deseo de su madre, pero al hacer eso, comenzaba a llorar incontrolablemente, Gaoshun a quién se le encomendó la tarea de traer juguetes nuevos para reemplazarlos también lo tuvo difícil.

Vaya... una muñeca de madera ligeramente manchada con huellas de manos, ¿cuánto tuvo que jugar con él para llegar a este punto, dado que sus manos nunca habían conocido la suciedad?

Cuando alguien se cría en un ambiente reprimido, naturalmente tendrá un efecto en esa persona, el comportamiento infantil que a veces muestra podría ser su verdadera naturaleza... al final, él solo es un año mayor que yo, debió ser muy duro para él tener que crecer en un ambiente como este, sin poder ser un niño normal.

Noches efímeras | JinshiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora