Capítulo 93.

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  -¿Eso es lo que pretendes? -gritó Louis a sus espaldas-. ¿Crees que así las cosas serán mejor? Pues, adivina qué, ¡te equivocas!

Apreté los puños a mis costados. ¿Qué se creía este? ¡No sabía cómo era realmente la situación!

Me detuve, pero no voltee a verlo. Me encontraba entre la espada y la pared. Podía voltear, y seguir con una conversación a la que no quería pertenecer, pero si salía corriendo... Quedaría como cobarde, y además, tendría que ir a mi casa, donde Harry me estaba esperando. Sabía que debía hablar con él después de esto, pero...

-No sé a quién tratas de proteger -continuó-. No entiendo si no quieres herirlo a él, o a mí. Aunque sería muy afortunado si ese fuera yo, ¿no lo crees? Porque ya sé por qué me rechazas.

Giré sobre mis talones. ¿Qué era lo que sabía? Lo cierto es que, no sabía ni yo por qué lo rechazaba. No había la razón, solo lo hacía porque sabía que era lo correcto. Lo peor de todo era que yo también lo quería de la misma forma en la que él a mí.

-Tú no sabes nada -espeté.

-¿Ah, no? -renegó, relamiéndose los labios-. Ahora resulta ser que no sé nada sobre ''tú y él''.

Mi corazón se detuvo.

(Narra Harry)

Terminé de enviarle un mensaje a Logan explicándole que yo había vuelto a casa mientras que __________ había ido a la farmacia a comprar unas pastillas. Claro que, estos dos destinos a los que íbamos ella y yo, eran falsos. El primer punto era que, por supuesto, yo no volvería a casa. Y ella tampoco estaba en una farmacia. Estaba con aquel inútil.
Por mi parte, me encontraba junto a Zayn, en su mugriento deportivo. Me lo había encontrado en el parque, y él insistió en ir a por el café que no terminé por tomar. Mi compañero se había encargado de mantener una conversación a pesar de mi mal humor, lo cual agradecía. Yo solo continuaba con algunas palabras cortas y simples, mientras calentaba mis manos en mis bolsillos.

-Oye, ¿qué te pasa? -preguntó al cabo.

-¿Eh? -comenté, distraído.

-Andas perdido por tu mundo particular -explicó, moviendo su mano indicando a mi cabeza-. ¿Está allí todo el tiempo?

Sí, _________ está en mi cabeza todo el tiempo.

-No, claro que no, no es ella -susurré.

Zayn se encogió de hombros. No quiso decírmelo, pero sabía que los había visto juntos unas calles atrás. Me había encontrado con él unas calles después de dejarla a ella y a Louis juntos.

-Con esta lluvia, creo que será mejor pasar a buscar a Liam y hacer unos cafés en mi casa... ¿Te parece?

-Claro.

Liam no vivía relativamente lejos. Se montó en el coche rápidamente, intentando no mojar mucho. Aunque eso era imposible, ya que él mismo era una cascada de agua fría. Se había dejado crecer la barba, pero se mostraba prolijo. No lo había visto hace muchos días atrás, pero era un cambio fuerte en todo su rostro. Parecía otra persona, por eso me shockeaba.

-Hola -saludó alegremente-. ¡Harry! Qué raro, esperaba a _________, ¿cómo estás, amigo?

-Bien, ¿tú?

(...)

El calor de la casa de Zayn era lo mejor de todo. Había ido unos días atrás, pero estaba llena de gente, sudor, paquetes vacíos -sin especificar qué habían contenido antes, y para qué habían sido utilizados-, cigarrillos... Un descontrol.
El calor de aquel día era sofocante, pero la casa ahora se encontraba cálida y reconfortante. Todo estaba ordenado, limpio e impecable. Pero estaba desierto. Había un sofá rojo frente a una TV de no sé cuántas pulgadas. La cocina era moderna, mucho negro, plata y rojo. Zayn insistió en que vayamos a ver el piso de arriba. A pesar de que Liam ya conocía la ''mansión'' como a la palma de su mano, me acompañó mientras el otro preparaba los cafés. No tendría tiempo para explicar cuántas habitaciones había, y mucho menos para decir cómo estaban decoradas. Al cabo de unos minutos, bajamos. Los cafés ya estaban servidos sobre la extensa mesa de madera oscura.

-Hey, ¿y aquella chica? -pregunté, tomando un poco de mi líquido agrio-. Esa alta de cabello miel -expliqué.

Zayn suspiró, revolviendo su café, y Liam solo hizo sonar los dedos de sus manos. ¿Había tocado un tema delicado?

-E... Está ella bien, ¿cierto?

-Sí -afirmó Liam-. Es solo que no está más con nosotros.

Asentí, sabiendo que no podía tocar más aquel tema frágil.  

My Trouble (Harry,Louis&Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora