En mi corazón (Robert Downey Jr.)

CAPÍTULO 34: DESPEDIDAS Y BIENVENIDAS

¡Por fin es viernes!

A Robert no solo le emocionaba el fin de semana, sino porque en la noche volvería a ver a su doctora favorita.

Le había hecho mucha falta, y aunque habían hablado por teléfono no era lo mismo.

Le había contado que su familia vio un par de sus películas y les gustaron. Eso le tranquilizó un poco, sin embargo, un par de ocasiones escuchó en su voz algo de tristeza.

¿Sera que no se tomaron del todo bien la noticia del noviazgo?

Aquello le había cruzado la mente en incontables ocasiones y esperaba preguntárselo esa misma noche. No quería ser motivo de pelea o disgustos con su familia. Sabía que la relación que tienen era muy escasa, pero también sabía lo mucho que le importaban.

***

COLOMBIA

El vuelo salía a las doce del mediodía, así que, haciendo cuentas, a eso de las ocho de la noche estaría en L.A. de nuevo y volvería a ver a Robert.

Ya quería estar allá, pero también me dolía dejar de nuevo a mi familia. No sabía cuándo iba a regresar. Fuimos a despedir a Kevin que tenía que regresar a la base militar en la que lo tienen asignado a unas horas de la ciudad, y luego fuimos al aeropuerto, donde almorzamos antes del vuelo.

Cuando llegó la hora de abordar, también llegó la hora de despedirme. Primero me despedí de papá y de mamá, ambos me dieron su bendición y prometieron llamar más seguido. Mamá prometió hablar con papá acerca de ir a visitarme en algún momento, luego me despedí de Andrés un poco más efusivamente. Aunque chocamos mucho debido a nuestra incompatibilidad, esta es directamente proporcional al cariño de hermanos que nos tenemos.

—Hermanita me harás falta —dijo mientras me ayudaba con mi maleta—. Pero no será por mucho que nos dejemos de ver...

—¿No? ¿Por qué? No creo que pueda venir pronto —afirmé.

—Cata, Kevin y yo tenemos planeado ir a L.A. cuando a él le den receso de la base, quiere conocer dónde vives, y ahora que eres novia del actor con más ganas queremos ir. Lo vamos a conocer.

Estuve a punto de responder algo a su noticia, pero ya era tarde, tenía que abordar. Durante el vuelo pensé un poco en eso que me dijo, no me dijo cuándo seria ese día y no quiero que me tome por sorpresa. Mucho menos a Robert. No quise pensar más en eso, así que dormí el resto del vuelo pensando en que Robert había prometido que estaría esperándome al llegar.

LOS ÁNGELES - 7:30 PM

Robert llevaba todo el día mirando el reloj, esperando la hora para verla de nuevo.

Sabía que solo habían sido tres días, pero fueron suficientes para extrañarla.

Llegó desde las siete al aeropuerto, un poco camuflado obviamente. Ya no tenía la barba y estaba ansioso por ver cuál sería su reacción. También quería saber si le iba a reconocer con la misma facilidad, algún día le dijo que le reconocería por mas camuflado que estuviera. Hoy lo probaría.

También le compró un ramo de girasoles el cual estaba en la silla de al lado. Estaba aún pensando en ella cuando le vino un recuerdo del reencuentro que había tenido con Susan, su exesposa, el día anterior en la mañana.

~ ~ ~

—Me imagine que terminarían de novios, a ti no te gusta perder el tiempo —había dicho Susan.