Capítulo 34: Trescientos

1K 35 4
                                    

-¡Ay, Félix, que no! ¡No seas pesado!

-¡Venga, bah, Dani! Es la macarena. Es de nuestra generación.

-¡Es de la generación de nuestros padres, Félix! Menudo DJ has contratado. Seguro que la vieja-bruja-mal-follada no para de criticar la fiesta.

-¡Y dale! Que pesada que estás esta noche con Leonor.- Replicó el hombre de cabellos voluminosos.- Que si Leonor va a decir que la música es un coñazo, que sí Leonor va a decir que deberíamos de haber vigilado los disfraces que se ponían los alumnos, que si Leonor me tiene envidia porque tiene al marido más sexy del universo, que si Leonor…

-¡Primero! Yo en ningún momento me he referido a Leonor como Leonor sino como vieja-bruja-mal-follada y segundo, yo no pienso que Leonor te vea como el hombre más sexy del universo.

-¿Pero para ti lo soy, verdad?

-Con esa pajarita me recuerdas un poco a un payaso con cara de amargado, pero bueno, sigues siendo sexy.- Félix soltó una carcajada por la broma de su mujer y al momento la rodeó con sus brazos para atraerla más a él.- Hoy estás muy empalagoso ¿no te habrás portado mal, verdad?

-Yo no soy empalagoso, soy cariñoso con la rubia más perfecta del mundo entero.

-¡Oh, oh! ¿Qué has hecho, Félix?

-¿Por qué siempre que te digo cosas bonitas dices que me porto mal?

-Porqué soy yo la que siempre te pica para que me abraces y me digas cosas bonitas. No es algo que salga muy espontáneo de ti que digamos. Y menos en público.

-Mentira. Yo mi amor por ti lo grito a los cuatro vientos des de siempre.

-¿Así?- Félix asintió su cabeza muy seguro de sí mismo, pero Daniela no las tenía todas.- ¿Te tengo que recordar que cuando me besaste por primera vez, al día siguiente, cuando me viniste a ver al partido de voleibol te rodee con mis brazos y me dijiste: ¿Qué haces? En público no.- Daniela había puesto una voz de camionero mientras se ponía bizca, haciendo que Félix recordase el pasado y riera por ello.

-Bueno, eso es otro cuento. Por entonces no te soportaba.

-¿Y ahora sí?

-Bueno… al final uno se acostumbra a todo.

-Te recuerdo que fuiste tú quién me pidió que me casará contigo.

-Era muy joven, Dani. No sabía de la vida.- La directora al escuchar esas palabras estiró su mano hasta llegar al pezón de su marido y se lo retorció con fuerza, haciendo que el joven desprendiera un grito ahogado e intentará apartar a Daniela de su cuerpo.- ¡La virgen…!

-Eso te pasa por ser un graciosillo sin gracia.

-Sí ¿pero soy gracioso, eh?- Félix volvió acercarse a Daniela, dónde ambos estaban sentados en uno de los sofás de cuero mientras los demás bailaban en la pista de baile.- Y tengo más gracia que tú, que está noche estás amargada y paranoica pensado en Leonor y en esa panda de marujas sin vida propia.

-Eso no es cierto. Me lo estoy pasando estupendamente en la fiesta tan increíble que ha hecho mi marido tan sexy.

-¿Ahora quién hace la pelota a quién?- Daniela hizo el ademán de intentar volverle a pellizcarle un pezón a Félix, pero él se hizo a un lado y la chica se retiró con resignación.- Y déjame decirte, que es imposible que te lo estés pasando bien en esta fiesta.

-¿Y eso por qué, Señor inteligente?

-Porqué todavía no lo hemos hecho en toda la noche. Así que es imposible que te estés divirtiendo.

Perdona pero, me he encaprichado de ti (Segunda Temporada de PPTVDM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora