Duerme, mi pequeño ángel... de tu lado no me iré...
Si te hallas inmerso en la tristeza, ven a mí... mis brazos estarán siempre abiertos para que te refugies entre ellos cuando te sientas herido o asustado...
Cuando te sientas solo y la oscuridad te envuelva en un gélido abrazo... llámame y contigo me quedaré...
Cuando el silencio cubra tus oídos, y no te permita escuchar sonido alguno... pronuncia mi nombre, y cantaré cada melodía dulce sólo para ti...
Deja fluir toda la amargura de tu corazón... déjame ser partícipe de tu libertad... y déjame formar parte de tu locura...
Déjame quedarme a tu lado, sin decir una palabra... atesoro la soledad que compartimos juntos...
Déjame sentir tu dolor... déjame escuchar tu silencio...
Déjame tocar el espacio vacío que hay entre tu piel y la mía...
Déjame percibir tu esencia... déjame extrañarte a la distancia...
Déjame ser cómplice de tu inocente malicia...
Déjame soñar tus besos... déjame imaginar tus caricias...
Déjame amarte en secreto...
Déjame ser todo lo que pueda ser...
Oh, ángel mío... no importa lo que hagas... no importa a dónde vayas...
Contigo siempre estaré...
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Pequeños poemas en prosa
RandomUna recopilación de textos que escribí hace muchos años... antes de que mis letras me abandonaran. Está dividida por Arcos. Cada Arco corresponde a una persona, salvo EGO I y II que son míos, antes y después del paso de esas personas en mi vida. He...