Fondo musical:
Cuando por fin me sentí curada de mis heridas...
Cuando finalmente me dije a mí misma que había cambiado...
Que me había fortalecido...
Que había madurado...
Cuando, decidida, me había prometido no volver a ser la de antes...
Simplemente todo mi esfuerzo se fue al carajo...
Al principio pretendí negarme...
Hacerme la indiferente, la impasible...
Quise reprimir todo pensamiento que tuviera algo que ver con lo que ya había enfrentado...
Realmente me creí el cuento de que me había superado...
Pero, sin darme cuenta... otra vez volvió el fantasma del pasado...
Más sutil... más sigiloso...
Más cruel... más doloroso...
Y cuando abrí los ojos... era tarde...
Ya no podía remediarlo...
Apareciste desde hacía tiempo, pero lentamente no me eras el mismo de ayer...
Quizá creí encontrar en ti lo que desesperadamente buscaba...
Me sentí como la protagonista de una novela romántica...
Quise hacerme la valiente... quise ser la obstinada...
Me dije a mí misma que esta vez, si realmente lo intentaba, podría funcionar...
Pero no fue nada más que mi ilusión desmedida...
Fue solamente mi esperanza infundada...
Quise creer en la posibilidad... de que esta vez... quizá...
Resultaría...
Quise pensar que podía lograrlo...
Que esta vez sería diferente...
Pero me dejé engañar...
Mi imaginación nuevamente me jugó una mala pasada...
Y mi corazón, al que creí gélido y enterrado, empezó a sentir sin que lo quisiera...
No pude controlarlo...
Las señales que quise ver no me dejaban defenderme...
Pretendí no hacerles caso...
Pero en realidad me eran más importantes de lo que aparenté...
Vivía con la incertidumbre... alimentando utopías que creí olvidadas...
Me emocionaba la falsa certeza de que ésta vez sería correspondida...
No tuve el valor de preguntarte...
No tuve el valor de que me respondieras de frente, porque quise creer que la respuesta ya la sabía...
Pero no... no era la respuesta que esperaba...
Era la respuesta que temía...
La respuesta que odiaba... la que siempre dolía...
La fría certeza de que lo mismo no sentías...
La triste realidad de que fue de nuevo mi estúpida fantasía...
La única diferencia es que ya gasté mis lágrimas por tantas negativas del pasado...
Ya no tengo lágrimas qué llorar...
Ni sollozos qué dejar escapar...
Vuelve de nuevo la incauta, la inocente, la desvalida...
Retorna la niña ingenua a la que creí matar...
Regresa el dolor, la pena y la melancolía...
Me pregunto cuánto se tardarán en marchar...
Me dispuse a sentir... a volver a confiar...
Pero salí herida una vez más...
Ahora lloro lágrimas secas en silencio...
Suspiro sin respirar...
No debí despertar de mi letargo y mi agonía...
No quería volver a amar...
Pero la dicha no me conoce...
Y la felicidad aún se niega a llegar...
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Pequeños poemas en prosa
RandomUna recopilación de textos que escribí hace muchos años... antes de que mis letras me abandonaran. Está dividida por Arcos. Cada Arco corresponde a una persona, salvo EGO I y II que son míos, antes y después del paso de esas personas en mi vida. He...