~Su Muñeca~ AyA

~Capítulo 101~

Un sábado por la noche prometedor. Puede que no me hable con mi familia, que este de ocupa en casa de mi novio y que si me descubren pierda a mi mejor amiga. Pero ¿quién piensa en eso teniéndolo desnudo en la ducha?. Se suponía iba a ser una ducha rápida, de eso hace una hora! Y aun no me he enjabonado! Tengo que conseguir que se salga o nunca acabaré de arreglarme. Además, ya me arrugué! Parece que no le bastó con el tour que me dio por toda la casa! Que cochinos somos! Ahora si que cada rincón de esta casa tiene un recuerdo mío. Pero ya se va a hacer tarde y ni cenamos! Casi es la hora en la que he quedado con Dulce y yo aquí metida en la bañera con mi guapisimo novio. Cada día está más bueno! Ok! Mal plan! Besarlo apasionadamente no es efectivo para que se vaya. No, definitivamente no.

Se obtiene el efecto contrario. Que raro ¿no? Ay ya! Tengo que dejar de jugar con él! Me salgo, me arreglo y nos vamos! Vamos Any! Esa fuerza de voluntad! Que no se diga que no puedes! Lo conseguí! Me separé de él y no se acabó el mundo! Uy! Que frío! Voy a que me caliente! No! Nada de volver! Ve a vestirte!

Me alejé de la bañera buscando una toalla. Poncho, aun en remojo, me observaba como caminaba desnuda por la habitación. Cogí una toalla y tras secarme rápidamente todo el cuerpo me la coloqué sujetándome el pelo. Sin nada más que la toalla enrollada en mi cabeza salí al dormitorio. Poquisimos segundos después Poncho estaba en el marco de la puerta mirando como me vestía. Cuando ya me había puesto el único vestido que eché en la maleta, tiré la toalla a la cama. Y colocada frente al espejo comencé a alborotar mi cabello, colocar bien mi sostén y enloquecer a mi novio de deseo. Eso último es lo más fácil de hacer.

Poncho- ¿Estás segura de que quieres salir? (abrazándome por detrás frente al espejo y besándome el cuello)

Any- Me estás mojando! (colocándome el pelo con fingida indiferencia) Coge una toalla!

Poncho- Es verdad! Te mojé el vestido! (girándome hacía él) Será mejor que te lo quites! (con una sonrisa pícara)

Any- Ya te gustaría! Visteté! Que llegamos tarde y no comimos nada!

Poncho- Ok! (separándose) Me visto y hago algo de comer mientras tú terminas! (abriendo el armario)

Any- Pos date prisa porque yo casi estoy (maquillándome)

Poncho- Imposible! Una mujer necesita mínimo una hora (poniéndose unos pantalones)

Any- No si no te peinas como yo! (poniéndome brillitos)

Poncho- Ya! Como que me creo eso! (colocándose una camisa ajustada)

Any- Tú mismo! (mirándome al espejo) Ya estoy! Tienes secador para no salir con el pelo mojado!

Poncho- Es imposible! No te tardaste ni cinco minutos!

Any- ¿Tienes o no?

Poncho- Sí,claro!

Me dio el secador y se quedó observando como el aparato alborotaba mi pelo mientras yo solo enredaba mis dedos en ellos. Cuando ya estuvo seco unos dos o tres minutos después me pasé un cepillo por el pelo, el cual se me quedó completamente lacio con grandes ondas en las puntas. Poncho me miraba como si estuviese viendo algo sorprendente. Tan chistoso mi niño! Seguro nunca vio a una mujer alistarse. Yo sé que soy muy rápida y que a veces ni me miro al espejo mientras me maquillo. Ya lo hago como en automático y eso que apenas me arreglo. Pero yo tambien me demoro a veces, sobre todo cuando estoy con Dulce que con tanta charla tardamos horas!

Poncho- Te ves hermosa! (con una dulce sonrisa) Yo pensaba que te ponías algo para que se te pusiese el pelo así. Como mi mamá

Any- ¿Rulos? (riéndome) No! Mi pelo es así! No necesito ponerme nada! Es lo único bueno que tengo! No necesito peinarme! (bromeando)