Clan de Lobos [BkDk]

Luces de Goa

La sorpresa invadió completamente su ser, nunca hubiera esperado reencontrarse con aquella mujer de mirada serena más un aura poderosa desprendía, reprochando espacio, cosa qué, Bakugou asombró... Ibara no era la misma joven y tímida que siempre fue.

A pesar de la mirada de advertencia, condujo sus pasos dando un salto hacia la cama, quedando de cuclillas recargando sus brazos en sus rodillas, era realmente interesante percibir ese temerario poder que ella desprendía.

—¿Dónde mierdas has estado todo este tiempo? —Preguntó con interés —¿Conoces a Deku?

—¿Deku? —La chica enarcó una ceja confundida a lo dicho.

—Ah... Se refiere a mí —se señaló a sí mismo de manera tímida  —Kacchan, ¿dónde te habías metido? No estuviste por el castillo toda la noche.

Hablarse con tal familiaridad entre ambos solo proporcionaba preguntas en la mente de Shiozaki, ¿cómo era que el presunto heredero del castillo conocía un lobo? Es más, ni siquiera sabía que ellos seguían convida. Se levantó estrepitosamente de su asiento para encarar al rubio, manteniendo un margen entre ambos de por lo menos dos metros, también lo presentía, Bakugou había cambiado, tenía un aire más omnipotente del que recordaba.

—Bakugou... ¿no me digas que tu...? —Llamó con dificultad buscando la mejor forma de preguntarlo, aunque llegó a ser interrumpida.

—Lo que notaste —respondió con un aire indiferente —me volví el alfa del clan —Ibara se sobresaltó a eso llevando una de sus manos a cubrir su boca. — Igual estoy sorprendido de ti, así que responde lo que te pedí... ¿Qué demonios has hecho todo este tiempo para desprender ese mismo aire que yo?

Los orbes esmeraldas de Izuku estaban fijos en Shiozaki a lo mencionado por Katsuki, ya que después de analizarlo por breves momentos, desde que ella fue presentada frente a él, siempre le pareció un aire imperioso y augusto el que soltaba la chica, logrando intimidar sin que fuese su intención. ¿Estar bajo el ala de un rey todos estos años le hizo desarrollar ese mismo instinto que emanaba Bakugou? No lo tenía certero pero era una buena hipótesis.

Shiozaki bajó su mano de su rostro para reír entre dientes a lo mencionado por Katsuki, le resultaba gracioso la forma en que lo insinuaba.

—No te preocupes Bakugou, no pretendo arrebatarte el mando del clan —complementó en una tonalidad frívola. —Yo también nací con calaña de alfa.

Izuku apretó sus dientes al escucharla, aunque fuese en broma sabía que el rubio no lo tomaría con humor.

—¡¿Qué acabas de decir, maldita...?! —Se levantó estrepitosamente de un salto encaminándose hacia Ibara, que ésta sólo puso sus brazos delante como advertencia de que no se acercara más.

—Pero me alegra que los tengas a salvo a todos —sonrió satisfecha apaciguando las rudas intenciones del chico.

El lobo hizo una mueca amarga descendiendo su brazo al son que daba media vuelta más tranquilo.

—Ten cuidado con tus palabras, si bien al bastardo mitad-mitad ya se lo dejé pasar, debería hacerlo contigo también —recordó cruzando sus brazos.

La chica repetía el mote acabado de decir por Bakugou entre susurros tratando de darse una idea a quién se refería.

—Hablas de Todoroki-kun, ¿verdad? —Comentó curiosa, ya que recordaba mal trato que tuvo entre familia él —¿Ocurrió algo entre ustedes?

Un trago hondo de saliva dio Midoriya a lo dicho, Ibara se estaba tomando muchos comentarios deliberados hacia Bakugou, propiamente ella no se daba cuenta que estaba haciendo perderse entre rabietas a las memorias que tenía con la fracción, ya que ella se consideraba al nivel del mismo rubio.