La caverna de cristal

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En cierto lugar del norte tras aquella contusión en su cabeza se encontraba aturdido y somnoliento, aun así estaba recobrando el conocimiento sintiendo el viento rozar con su piel y meneando su cabello mientras era guiado sin opción entre garras.

Por fin aterrizó aquel ser en una cueva que estaba oculta entre una zona montañosa con un clima frio y agobiante sin llegar al extremo de lo que es Kinluh.

El heterocromatico fue arrojado sin piedad hacia el fondo de la cueva siendo arrastrado en el suelo proporcionándole algunos rasguños. Tosió hastiado mientras tomaba asiento mirando a su raptor que se trataba de esa bestia con cuerpo de león y cabeza de águila con unas gran plumas en su lomo.

A pesar de la pobre y débil situación que poseía el lobo tenía ese mirar efímero y brusco que amenazaba con cada paso que venía su raptor. El cual observaba sin parpadeo esos ojos bicolores íntegros y llenos de soberbia.

—Un bastardo que mira por debajo a los demás, un mini Enji tal cual —escupió la bestia.

Shouto sólo dignó en levantar una ceja con sorpresa tras escuchas eso, momentos después el ser frente a él transformó en una silueta humana. Lucía un hombre joven, de cabello rubio y alborotado, unos ojos los cuales parecían adormecidos, con unas marcas de color negro en el lagrimal de sus ojos similares a las aves rapaces.

—¿Qué sabes de mi.... de mi viejo? —preguntó dudando por un momento como mencionar a aquel lobo.

El hombre jovial con sus manos dentro de una chaqueta que portaba se puso de cuclillas a un par de metros del inofensivo rey observándolo con detenimiento, hasta que elevó sus hombros como signo de indiferencia.

—¿No crees que debería de conocer a cada líder de los 7 clanes? Después de todo, yo soy uno de ellos —mencionó con satisfacción al ver que propició una intranquilidad por la faceta turbia del lobo.

—Los siete clanes...

—Yep, como Los lobos dirigidos por Enji o la Emperatriz de los Dragones que comandaba Ryukyu, yo manejo a Los grifos, Hawks... —presentó tranquilo mientras desplegaba unas enormes alas escarlatas de su espalda haciendo poner en alerta a Shouto.

Ahora comprendía el por qué oscilaba en ese lugar, no era por parte de su linaje con su madre o eso creía, esto comprendía únicamente a ese lado bestial por su padre.

El bicolor enarcó una sonrisa de lado con un disimulado cansancio.

—Lamento informarte que mi viejo murió hace años.

Hawk llevó sus manos a la nuca con una fingida y afligida sorpresa a lo confesado sin mucho dolor por el rey.

—Esa es noticia vieja, me sorprende que haya muerto en manos de humanos —burló. —Siempre esperé matarlo por mí mismo.

Ahora era más simple de entender a donde se dirigía esto, ese grifo buscaba alguna especie de venganza que enlazaba a los lobos, algo que ni debería intervenir con esta nueva generación.

—Yo ni estoy enlazado al clan de lobos desde hace tiempo, buscaste a la persona equivocada. —dijo sin pudor—, pero no te permitiré ir a por ellos. 

El rubio llevó una mano acariciando su mentón pensativo.

—No me interesa, esos lobos pueden vivir ignorantes con su líder. A mí sólo me interesa tu nombre —llamó poniéndose de pie —eres un lobo pero te alejaste de su cultura y no llevas el nombre propio que suelen tener, ¿no es así, chico híbrido?

A pesar de que Shouto le observaba desde una menor altura por permanecer sentado seguía con ese mirar de superioridad.

—Ya entiendo, así que fuiste el que manipuló al moderador a ese desastre, en el fondo de su mirar logré ver el encantamiento que le controló.

Clan de Lobos [BkDk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora