Capítulo 62

127 17 2
                                    


Me quede tan quieta que pensé que había sido un sueño, un sueño del que pronto despertaría, solo podía escuchar mi nombre a lo lejos, como algo totalmente distante.

"Soy libre... "– Ese pensamiento invadía cada parte de mi mente, de mi cuerpo, de mi alma, de mi espíritu, lo invadía todo.

-Soy libre – Dije soltando a reír.

-¡Si libre! – Dijo Edward sacudiéndome ligeramente por los hombros, me abrazo fuertemente y yo correspondí, si era un sueño, no quería ser despertada... Pero allí en sus brazos sabía que no era un sueño, él era real, mi amor por él era real, su amor era real, todo él era real y era mío y yo siempre seria suya, a partir de ahora nada se interponía entre él y yo, y aunque suene egoísta y frió, no importaría, porque nos amábamos y sobre todo ambos luchábamos por estar juntos y así seria, a menos que él no lo quisiera.

-Zorra maldita... - Escuche a Jacob pronunciar, Edward me soltó e intento golpearlo.

-¡Basta ya! – Dijo Jasper empujando a Edward hacia mí, yo lo retuve sosteniéndolo del brazo, su mano estaba hecha en un puño fuerte – Vete ya... - Dijo mirando a Jacob – Te recuerdo que van a embargar la hacienda y si no quieres quedarte verdaderamente sin nada, te recomiendo que te largues – Aquellas palabras sonaban escupidas y llenas de rencor.

-Si piensas Bella que te has librado de mí... Olvídalo, siempre serás mi mujer, eres y serás mía siempre – Dijo aquellas palabras directamente hacia mí, no lo pudimos detener, había sido demasiado tarde cuando Edward ya le había dado un puñetazo en toda la cara.

-¡Imbécil! – Grito fuertemente – Te alejaras de ella... Porque si no lo haces te mataré como el cerdo que eres – Vamos – Susurro Edward alejándose de Jacob sin dar la espalda, tomo mi mano y me guió fuera del salón del juicio, Jasper venía detrás de nosotros.

-¿Qué demonios te pasa? – Dijo Jasper adelantándose - ¿Quieres que esto se complique más de lo complicado que ya es? – Dijo Jasper deteniéndonos, Edward solo le dedico un silencio, Jasper soltó un suspiro – Buen ángulo para el puñetazo – Dijo sonriendo y yéndose por algún lado, ya estaba perdida en aquella conversación.

-Edward... - Comencé.

-Vámonos de aquí primeramente – Dijo volteando a verme, una sonrisa apareció en sus labios, ascendí, salimos del lugar con nuestras manos unidas, Esme y Alice nos miraron – Es momento de irnos – Dijo Edward mirando hacia atrás, de pronto él se puso frente a nosotras, alcance a verlo, llevaba sangre en su nariz, me aferre al brazo de Edward, este estaba tenso bajo mis manos.

-Vamos hijo – Dijo Esme jalándolo y yo hice lo mismo, pude sentir su mirada penetrante sobre mí, Edward paso su brazo por mi cintura y partimos sin más de aquel lugar, primero hubo un gran silencio, hasta que la inquieta Alice comenzó a hablar.

-¿Y bien?, ¿Qué paso? – Su voz se escuchaba ansiosa, Edward y yo nos miramos, discutiendo con miradas quien hablaría.

-Alguien hable por favor – Dijo Esme con aquella misma ansiedad de Alice, apreté la mano de Edward señalándolo a él para hablar, este ascendió.

-Bueno... El juez dictamino que... - Él me miro a mí, sonreí.

-Que mi divorcio estará lo más antes posible – Escuche un par de grititos por parte de Alice y una sonrisa sincera y conciliadora por parte de Esme.

-¡Qué bien! – Dijo Alice aplaudiendo - ¿Cuándo se casaran? – Pregunto de pronto haciendo que Edward y yo nos miráramos, no pude evitar sonrojarme y apartar mi mirada.

Claro... Cuándo...

Deseos CompartidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora