Capítulo 60

106 16 1
                                    


-Fui... Adoptada por los padres de Jacob, Tía Grace y tío Billy, me adoptaron desde muy pequeña, al principio todo era como lo imaginaba, era un sueño, una niña huérfana al fin teniendo familia, mamá, papá... Hermanos, podía conocer lo dulce, de lo que es tener una familia – Sonreí – El tiempo pasa y te das cuenta que no todo es color de rosa... Que no es tu familia, que no es tu sangre y que sobre todo... La estima que tienen hacia ti no puede ser mayor a... Lástima – Susurre – No de todos por supuesto, tía Grace y otras personas me consideraban parte de su pequeña familia, para mí lo eran todo... Jacob y yo siempre fuimos unidos, hasta que él cumplió 16, después de eso... Creo que todo fue empeorando... - Sonreí – No era mis planes casarme con él, pero... Sentía algo por él, era especial, siempre estaba allí para mí, siempre, termine aceptando, aunque no había muchas... - Me quede en silencio un par de segundo y luego corregí - Ninguna opción... - Solté a reír – El día de mi boda a pesar de lo íntimo que fue... Lo considere en aquel momento el mejor día de mi vida, pero como se equivoca uno... Resulto ser el inicio del infierno... - Dije dirigiendo mi mirada a Jacob, este soltó un bufido y golpeteo con sus dedos la mesa.

-Continúe... - Pidió el juez, haciendo que lo mirara, ascendí.

-Sucedieron muchas cosas – Dije apretando mis manos en un puño intentando dispersar esas imágenes de la noche de bodas, me estremecí – Cosas que... - Solté un gruñido de dolor.

-Tranquila... No es necesario, si usted considera que debe ser en privado, en privado será... - Ascendí.

-Me ha humillado como ha podido hacerlo – Susurre aguantando las lágrimas que querían salir apresuradas por mis mejillas – Me ha herido de mil formas posibles, pase mi mano por la cicatriz que tenía atrás de mi oreja, había sido un golpe con su mano y descuidadamente me había dado con el anillo de bodas, partiéndome la piel.

-¡Como te atreves! – Grito Jacob – ¡Lo único que he hecho es amarte! – Grito Jacob, me estremecí, me di cuenta que el abogado y el señor Swan lo detenían.

-¡Cállese! – Grito el juez, el silencio se sembró en todos, su voz hacía eco en mi cabeza, quizá en la de cualquiera, me miro invitándome a seguir, yo solo cerré mis ojos y solté un suspiro – Está bien... Descuide – Soltó un suspiro – Me permites ver – Dijo poniéndose de pie – Haga hincapié en que la solicitud de tocar a la dama es solicitada por mí y expedida por mí – Me quede estática – ¿Podrías venir aquí? – Dijo señalando a Alice, ella se puso de pie dudosa y camino hacia nosotros – Alice... ¿Verdad? – Alice ascendió confundida – Levanta el pelo de tu prima y deja al descubierto su oreja derecha – Pidió mirándome, Alice hizo lo que el juez le pidió, Alice soltó un sollozo.

-B-Bella... - Susurro torpemente.

-Gracias... -Dijo el juez – Vuelve a tu lugar, por favor – Alice soltó mi cabello de nuevo, me encogí, aquella cicatriz era invisible para todo el mundo, de hecho había hecho mi esfuerzo por ocultarla, pero aquí había acabado mi suerte - ¿Podría tratarla de tu? - Pregunto parado a un lado de mí, ascendí – Bien Bella... ¿Cómo te hiciste esa cicatriz? – Pregunto, mire a Edward de reojo, estaba tenso en su lugar, hubo un silencio largo – Por favor Bella... Si quieres librarte de un hombre como este... Tienes que ser sincera y directa – Ascendí.

-Intente escapar y recibí una bofetada... - Dije con los ojos cerrados recordando aquella tarde, el dolor.

-Gracias por tu declaración Bella... - Lo mire – Descuida, vuelve con tu abogado – Él se sentó de nuevo en el estrado – Es una cicatriz de gran tamaño, ¿Tiene una excusa para eso? – Dijo preguntándole a Jacob directamente, el juez se enderezo en su asiento y colocando los codos en la mesa.

***********************************************

-Nunca dijiste nada de esa cicatriz – Susurro Jasper solo para que nosotros lo escucháramos.

-Exacto – Susurro Edward mirándome directamente.

-No creí que fuera necesario... - Edward soltó un gruñido contradiciéndome totalmente.

-¿Cómo puedes decir eso? – Susurro con disgusto.

-Edward... -Llamo Esme intentando retenerlo.

-Les recuerdo... -Susurro Jasper – Estamos en un juicio de divorcio... Este es un receso de unos cuantos minutos... Cualquier escándalo... - Edward soltó un suspiro y se fue, intente ir tras él, pero Jasper me tomo del brazo – Te recuerdo que es tu divorcio... - Me susurro mirándome directo a los ojos.

-Lo sé – Susurre zafando mi brazo de su agarre y caminando tras Edward, salí en su búsqueda, estaba dándome la espalda, estaba inquieto, me coloque a su lado.

-¿Por qué no me dijiste? – Susurro sin mirarme.

-Por qué... No mire necesidad, es algo que paso hacia mucho tiempo, de hecho... Desde antes que Jacob decidiera que viviríamos en la hacienda, desde antes que te dijera y... - Me coloque frente a él – No quiero que guardes rencor por algo tan insignificante como esto – Dije acariciando mi cicatriz.

-Bella... - Susurro mirándome directo a los ojos, no estaba conforme, eso lo sabía – Eso... - Dijo mirando mi mano acariciar mi oreja – No es algo insignificante, es algo que provoca en mi un dolor profundo, porque nadie se merece que lo traten de esa manera, absolutamente nadie, y que me digas que no era necesidad... Me duele... - Susurro, sus palabras se reflejaban en sus ojos – Sé que no tengo derecho a pedírtelo, lo se... Pero... Yo... Yo quiero ayudarte, yo...

-Es hora – Llamo Jasper interrumpiéndonos, Edward ascendió y volvió a desaparecer adentrándose en el aquel lúgubre lugar. 

Deseos CompartidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora