Me había quedado leyéndole a Alice toda la tarde, esta estaba muy enferma, la fiebre y la gripe no parecían querer ceder, pero seguía teniendo los mismos ánimos endiablados, Esme había salido hacia la casa grande, algo había sucedido que necesitaban de ella.
-¿Qué pasa al final? – Pregunto Alice con su voz ronca, cansada y adormilada, pronto caería dormida.
-No... No jovencita, los finales no se revelan, es pecado revelarlos – Alice rio y de pronto cayo dormida, toque su frente, ya tenía menos fiebre, eso era muy buena señal, salí de su habitación, cerrando la puerta con mucha delicadeza.
-Madre, ¿Cómo esta Alice? – Pregunto Edward de pronto, reí al verlo, este leía un libro dándome la espalda, creo que no había sido tan delicada al cerrar la puerta.
-Está mucho mejor – Dije con diversión, el volteo a verme repentinamente, parecía muy sorprendido – Perdón si te asuste – Me disculpe, cerro el libro y se puso de pie.
-No te preocupes – Dijo mientras aclaraba su garganta - ¿Quieres tomar asiento? – Pregunto señalándome el sofá, sonreí y ascendí, tome asiento y él igual – No, no sabía que estabas aquí... ¿Quieres algo de beber? – Pregunto evitando mi mirada, ojeaba el libro con rapidez.
-No... Gracias – Dije en murmullo, los silencios incomodos eran muy comunes entre nosotros, era demasiado serio – Ah Alice le bajo la fiebre – Dije intentando romper el silencio, sonrió.
-Eso es bueno... Al fin está reaccionando al tratamiento – Dijo dejando el libro en la mesita de al lado.
-¿Qué medico la vio? – Pregunte curiosa, él negó con la cabeza y desvió la mirada, pareció recordar algo.
-Mi padre era médico.... Mi madre aprendió mucho de él... Todos – Corrigió, su sonrisa me supo amarga.
-¿Qué sucedió con... - Me miro de pronto, prácticamente me había atravesado con la mirada.
-Murió hace mucho tiempo – Su amargura acaricio mis oídos y la nostalgia invadió mi pecho.
-Lo siento – Dije mirándolo con tristeza, él se puso de pie y comenzó a deambular por la habitación.
-No te preocupes – Dijo secamente - ¿Quieres que te acompañe a la casa grande? – Pregunto evitando mirarme, mire por la ventana, había obscuridad – De paso iré por mi madre – Dijo apretando su mandíbula.
-¿Por qué siento que intentas decirme algo? – Pregunte buscando su mirada, negó con la cabeza - ¿Estás seguro? – Insiste, me miro.
-Yo... Yo... - Dio un paso dudoso hacia mí.
-Discúlpame – Dijo Esme entrando sin previo aviso – Hubo un accidente en la despensa – Dijo en tono tranquilo.
-¿Necesitaste ayuda? – Pregunte mirándola, ella negó con la cabeza, quitando su chaqueta y guantes.
-No te preocupes... - Sonreí
-Debería irme, ya es tarde... - Dije tomando mi abrigo y mis demás cosas.
-¿Te iras sola? – Pregunto Edward.
-¿Iras? – Pregunto Esme confundida, Edward evito la mirada escrutadora de su madre.
-Si – Dijo restándole importancia al comentario.
-No esta tan lejos... - Susurre encaminándome a la puerta – Nos vemos mañana, Buena noche – Me despedí apresuradamente y comencé a caminar directo a la casa grande, al menos la familia Cullen ya no era tanto un misterio, pero aun rondaban preguntas en mi mente.
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Deseos Compartidos
Fanfiction¿Vivir o morir?, decisiones, decisiones... Decisiones y más decisiones, solo una podría cambiar por completo el curso de tu vida, cambiar todo tu mundo, quisiera yo poder tomar una decisión y poder cambiar el calvario que es mi vida. Cuando escogí...