ST. 9

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Narra Diana.
Claro que no podía dejar las cosas así, técnicamente me estaba corriendo de su casa, no entendía muy bien el motivo por el cuál me dejó. Pero después de ver a Tn vomitar dos veces mis dudas se aclararon, Tn está embarazada de Sebastián pero ésto no se queda así. Sebastián es sólo mío y los que es mío nadie me lo quita y menos esta zorra de cuarta.

Por lo pronto tenía que hacer algo, llevarme mis cosas a mi casa, debe calarle a Sebastián, estoy segura que nadie lo hace mejor que yo en la cama. Y eso Sebastián lo verá, jamás Tn se podrá igualar a mí, jamás.

Recogí mis cosas en la maleta y salí de aquella casa, llegué aquí gracias a Sebastián y volverá a ser lo mismo, sé que él no puede vivir sin mí.

Narra Tn.
No entendía por qué Sebastián me llevaba al hospital o sólo lo hizo nomas porque sí. No le entendía pero sí se le veía un tanto preocupado, yo no sé qué habló con Diana y tal vez ése sea el motivo por el cuál está así.

-¿De verdad vamos al doctor? -Pregunté cuando vi que tomó un camino diferente al de casa.

- Sí.

-Pero estoy bien, los doctores me dan miedo por si no lo sabes. -Empecé a sudar.

Y no era broma, toda mi vida le tuve miedo a los doctores.

-Guarda silencio.

-No puedo, en serio les tengo miedo.

Sería una muy estúpida idea saltar a la calle, podría terminar más lastimada de lo que ya estoy ahora. Pero de verdad no quería ir al doctor, yo me sentía bien, de lo mejor.

-Dije que te calles. -Sebastián estaba empezando a perder la paciencia y yo junto con él.

-Y yo dije que no quiero ir al doctor. -Sólo me ignoró. -Si no paras voy a saltar hacía afuera. -Le advertí.

-En serio, Tn. Cállate.

Yo te advertí. Tomé valor y en cuanto abrí la puerta de la camioneta salté haciéndome unos cuantos rapones en la cara, no necesitaba a fuerzas un espejo para verlo. Un poco más fuerte y me rompo la cintura. Creo que había sido una caída muy fuerte, estaba aún en el suelo, ni siquiera puedo voltear a ver si Sebastián se detuvo o me dejó aquí tirada.

-Mierda, Tn, ¿estás bien? -Preguntó Sebastián.

-No, creo que me rompí la cintura. -Fruncí el ceño ya que el sol me calaba en la cara.

-Pudiste haber muerto.

-No exageres, una simple caída no ocasiona eso. Ahora ayúdame a levantarme.

Sebastián me cargó con cuidado y me subió de nuevo a la camioneta, siempre que estaba a lado de él hacía cosas muy estúpidas.

Narra Sebastián.
Tenía que llevar a Tn al doctor, no podía dejar que ese bebé creciera cada vez más. Yo no estoy listo para eso y nunca lo estaré, eso está más que claro. Tn estaba empezando a colmar mi paciencia, ella más que nadie debe saber que tenemos que ir a hacerle una prueba de embarazo, estoy segura que ella igual que yo no quiere a ese feto.

-Dije que te calles. -No podía más, no me podía concentrar en otra cosa que no fuera a Tn embarazada.

-Y yo dije que no quiero ir al doctor. -Sólo la ignoré. -Si no paras voy a saltar hacía afuera. -Tn no es capaz de eso.

-En serio, Tn. Cállate.

Abrió la puerta tan rápido y se aventó hacía afuera, yo enfrené lo más rápido que pude, ¿cómo se le ocurre? Está embarazada y puede morir si esa cosa muere dentro de ella, maldita sea. Me estacioné rápido y corrí hasta dónde estaba ella. Me asusté cuando la vi ya que me la imaginaba corriendo tratando de escapar pero no fue así, ella estaba tirada en el piso. Estaba loca, siempre hacía cosas que no tenían sentido, incluso a veces me pone a pensar si de verdad no está mal de la cabeza o tiene algunos problemas mentales.

Narra Tn.
Llegamos al hospital, aún no aceptaba venir pero sabía que no podía hacer ninguna lucha contra Sebastián, él siempre va a ganar a como de lugar. Entramos y Sebastián fue a hablar con una persona, supongo la secretaria que da las consultas y yo mientras fui a sentarme a las bancas. No tenía nada, todo estaba bien. No sé por qué me trae, si cuando me pasa algo más grave me deja sola en casa.

Después de al menos unos 15 minutos salió un doctor y mencionó mi nombre. Sebastián y yo caminamos hasta el consultorio.

Sebastián pidió que me hicieran una prueba de embarazo, no entendía muy bien lo que pasaba, yo había estado vomitando y ya eran tres semanas después de que habíamos tenido relaciones él y yo. Joder, nunca me puse a pensar en eso. Sebastián es un completo idiota. Yo no estoy lista para tener un bebé, y menos con él, aparte sé que él no me dejaría tenerlo, aunque fuera mío y de otra persona, tal vez Luke.

El doctor preparó un inyección y me sacó algo de sangre, las inyecciones me daban demasiado miedo pero creo que me daba más miedo la idea de que podría estar embarazada de Sebastián. Llevó la inyección a otro cuarto y regresó.

-Esperen afuera, en 10 minutos estarán sus resultados.

-Gracias. -Dijo Sebastián y salimos.

Ahora más que nunca tenía demasiadas ansias, simplemente yo no podía estar embarazada, tengo apenas casi 18 años por Dios, sé que ya en un par de días seré mayor de edad pero eso no tiene nada qué ver. Ni siquiera sé los cuidados que necesita un bebé, simplemente no estoy preparada.

Narra Sebastián.
No tenía miedo, claro estaba que sólo eran ansias, aparte aunque estuviera embarazada yo mismo le iba a pagar el aborto, simplemente ninguno de los dos puede ser papá. No estoy listo y jamás estaré, y pues ella es más obvio que no. Aparte es muy chica, ni siquieracuántos años tiene.

El doctor nombró a Tn haciéndome sacar de mis pensamientos. Llegó la hora. Le dió a Tn el papel con los resultados pero la cara de ella no era nada buena.

-¿Qué? No me digas qué...

-Toma. -Dijo seria.

-Oh mierda... -Suspiré.

Ya salí de vacaciones, ahora sí les trataré de publicar diario, bueno sólo me falta pasar unos cuántos exámenes y todo listo. Gracias por el apoyo, las quiero.

Oigaan y aprovechando el momento.

¿Alguna serie que me recomienden?

Secuestrada •S.V.•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora