S.T. 28

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Caminamos hasta donde se encuentra una cabaña. Es muy bonita. Sebastián abre la puerta y todo parece de película, es genial. Está super bonita.

-¿Te gusta? -Dice Sebastián atrás de mí.

-Claro que sí, me encanta, es fabulosa. -Digo con una sonrisa.

- La compré para ti.

¿Para mí? Esto es demasiado, debió costar millones, aparte de que es única y está a la orilla del mar y enfrente está una tipo jungla. Esto es maravilloso. Pero creo que Sebastián esta vez exageró un poquito.

-Esto es demasiado Sebastián.

-Te lo mereces. -Besa mi mejilla.

Volteo para quedar frente a frente con él y tiene una sonrisa bien formada. Esa sonrisa que desde que la vi me gustó, a pesar de que yo estaba muerta del miedo. Besa mis labios y yo no puedo resistir, le sigo el beso y puedo notar como sonríe en medio de este.

-Eso no es todo, falta la última sorpresa. -Besa mis labios por última vez y se inca frente a mí.

Oh no, ésto no puede estar pasando, mi corazón está a mil por segundo y Sebastián no habla pronto. Quiero morir ahora mismo. No puedo procesar bien la información. Estoy mal. O tal vez enamorada.

-¡Habla ya! -Dije desesperada.

-¿Tn Ta, te quieres casar conmigo?

Oh mi Dios, sabía que me pediría esto pero no sé qué decirle. Sebastián ahora es parte de mi vida quiera o no pero es muy rápido, ¿no? Yo sé que llevo vario tiempo junto a él, casi dos años ya pero es rápido. Aparte no sé si Sebastián sea la persona correcta para mi vida, la vida de él es muy difícil y complicada de entender. Ni siquiera sé de su vida. No sé nada. Si acaso sólo me ha platicado de su madre pero solamente. Eso es algo muy sin chiste. Sebastián tal vez no sea la persona para mi vida. Y si quiero estar con él debo pensarlo.

-Sebastián, esto es muy rápido, me da mucho gusto saber que quieres ser parte de mi vida aunque pues técnicamente ya lo eres pero... No sé si sea lo correcto, sólo déjame pensarlo, ¿está bien? -Le sonrío y él también lo hace.

Sebastián se para y toma mis dos manos.

-No importa si tengo que esperar meses porque años no, serás mía antes. Pero quiero que sepas que yo te estaré esperando, pero recuerda que siempre serás mía. No significa que aunque me digas que aún no estás preparada para casarte conmigo significa que dejamos de ser novios, eso siempre será así. -Besa mi frente y me da un abrazo.

-Gracias por entender. -Miro hacia arriba y le sonrío.

Sebastián besa mis labios despacio y me dirige a la cama, me recuesto en ella y él sube arriba de mí.

-¿Te gustó tu sorpresa? -Pregunta Sebastián separándose de mis labios.

- Me encantó, jamás me pasó por la mente que hicieras ésto. -Ahora fui yo la que besó sus labios.

-Te amo, Tn.

No le respondería con lo mismo, claro que siento algo hacía Sebastián pero no creo que sea buena idea decirle un Te amo cuando en realidad no estoy segura de si lo siento o no. Yo creo que es muy rápido todo esto. Te quiero es la palabra adecuada hasta ahora. Sebastián y yo apenas llevamos unos días llevándonos bien. Todo el tiempo que estuvimos juntos sólo eran pelas, ahora que estamos solos las cosas han cambiado pero nada asegura que Sebastián también lo haya hecho. Cada persona tiene su carácter y conozco perfectamente el de Sebastián, si él sigue así como ahora todo es perfecto, pero hay que darle tiempo al tiempo.

Despierto y veo a Sebastián a mi lado, aún sigue dormido. Me levanto y voy al baño, lavo mi cara ya que el maquillaje estropeado hace que parezca un payaso asesino. Seco mi cara y me hago una dona en el cabello.

Vuelvo a ponerme el vestido ya qué me lo quité para dormir mejor. La confianza con Sebastián cada vez se va recuperando más, creo que me ha mostrado que sí puede cambiar y eso me gusta mucho. Siento un poco de pena estar en ropa interior a lado de él pero es lo mismo que trajera un bikini.

-Sebastián, ya despierta. -hizo casi omiso.

Mi celular comenzó a sonar y fui hasta él.

¿Quién podría llamarme?

-¿Sí?

-Tn, empezaba a extrañar tu voz, cuéntame; ¿cómo te va con tu queridísimo Villalobos?

Los pelos se me pusieron de punta, ¿qué quería? ¿por qué nunca podía estar bien al menos un día? Siemore había algo que tenía que estropearlo todo. La mala suerte siemore iba tras de mí.

-¿Qué mierda quieres, Luke?

Sebastián estaba despierto, cuando dije el nombre de Luke, él hizo un movimiento. Obviamente estaba escuchando lo que decía.

-¿En serio preguntas? Preciosa, no se te olvide que tú eres de mi propiedad.

¿Propiedad? Parece que estoy en una película de narcotraficantes y soy la única mujer. Todos me toman de su propiedad, estoy harta.

-Yo no soy tuya, y ya déjame en...

No terminé de decir la palabra ya que Sebastián me quitó el teléfono y colgó.

-¿Qué mierda quiere? ¿Por qué sigue de fastidioso? Pensé que ya le había quedado claro que tú sólo eres mía. Ahora veo que no, tengo que tomar medidas drásticas.

-Solo quiere joder, no deberías hacerle caso. -Dije sin molestia.

-No, tú no sabes lo que él es capaz de hacer con tal de conseguir lo que quiere.

¿Conseguir lo que quiere? ¿Y yo para qué podría servirle? Soy una inútil apenas asusté 18 años y prácticamente no sé hacer nada.

-Tal vez sólo eres tú un exagerado.

-¿Nos vamos a poner a pelear por él?

-No. -Rodee los ojos.

Narra Luke.
Tengo que averiguar un plan, Tn no puede estar con ese imbécil, y menos ahora por todo lo que pasó con Tyler. Yo confiaba en Tyler, sin embargo dijo todo lo que estaba entre él y yo a todos. Tn es la única que no debe enterarse de eso o sino me odiará para siempre, cosa que no quiero.

Tn debe ser mía a como de lugar.

Secuestrada •S.V.•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora