Y aquí esta el capítulo de esta semana ^^
Cuadragésimo segundo capítulo
Llamas
Kagura estaba feliz pues había podido comer algo delicioso y dormir en una cómoda cama, lo cual había recargado nuevamente sus energías. Pero no era la única, Mutsu parecía haber recuperado su buen humor también y no paraba de hablar con Ikumatsu, probablemente se habían hecho buenas amigas mientras la menor dormía.
Cuando Mutsu vio entrar a Kagura a la cocina, decidió comunicarle sus planes.
- Buenos días dormilona - dijo la mayor
- Tengo hambre - se quejó Kagura mientras veía las maravillas que estaba preparando Ikumatsu para el desayuno
- Después de desayunar debemos ir a la ciudad vecina, no tenemos tiempo que perder - informó Mutsu
- No es justo, yo quiero seguir comiendo la comida de Ikumatsu, es la mejor cocinera que conozco - se quejó la menor
Mientras tanto en una mansión bastante alejada de allí se encontraba un joven de cabellos rebeldes que no pudo evitar estornudar.
- Me reemplazaron - gritó el joven mientras unos escalofríos recorrían su cuerpo - Acaban de superar mi única habilidad, ya no serviré para nada -
- Siento recordarte que nunca serviste para nada - dijo Sougo sin dudar de sus palabras
- No seas cruel y ayúdame a buscar algo en lo que pueda ser útil - pidió Sakamoto perdiendo la paciencia
- Puedes ser un ejemplo para todos de lo que sucede si tu vida no tiene sentido y para ser un madao ya tienes las gafas - propuso el menor
- Cruel - se quejó Sakamoto mientras se deprimía cada vez más
Ignorando aquella extraña conversación, las protagonistas de la historia estaban disfrutando del maravilloso desayuno de Ikumatsu.
- ¿Podemos llevarnos algo de comida para el viaje? - preguntó Kagura mientras ponía ojos de cachorro para convencer a la mujer
- Por mi no hay problema alguno, pero hay un par de ingredientes que necesito, si pudieseis comprarlos en el mercado yo - quiso pedir la mujer pero las jóvenes se levantaron con violencia de la mesa y la miraron horrorizadas
- Nada de recados - gritaron las jóvenes al unísono
Ikumatsu no comprendía la situación pero sabía que dijo algo que no debía.
- Lo siento yo no quería asustaros -
- No es eso, es solo que tenemos un pequeño trauma al respecto - explicó Mutsu
- Brócoli - murmuró Kagura con cara de asco
- ¿Acaso vuestros padres os abandonaron en un mercado? - preguntó Ikumatsu asombrada
- Peor - añadió Mutsu mientras recordaba el comienzo de sus aventuras - De alguna manera acabamos siendo secuestradas -
Ikumatsu estaba preguntándose seriamente si era posible que las jóvenes tuviesen tan mala suerte, pero parecían ser buenas personas, así que decidió ayudarlas.
- Cómo habréis visto, no tengo clientes así que podemos ir a comprar las tres juntas ¿Suena eso mejor para vosotras? - preguntó la mujer con amabilidad
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Perlas del mar
FanfictionKagura y Mutsu son sirenas bastante curiosas ¿Lograran ver todas las maravillas de la superficie? ¿Que tienen que ver Sakamoto y Sougo en todo esto? ¿Es solo una versión cutre de la sirenita? Todo esto y mas en la historia.