Capítulo 40

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Regresaron al Templo a partir de la magia de Wong. Tony atravesó el portal apretando los dientes, furioso de rendirse y no perseguir la impetuosa mancha rojiza que desapareció rápidamente entre los edificios de Nueva York apenas se dio la vuelta. Le resultaba irritante que a nadie más le importara que esa chiquilla pudiera ser objetivo de otro ataque. Y lo peor es que no había podido ponerle un localizador ni nada parecido. Ya no usaba el traje que le había fabricado, sino ese estúpido chándal de licra que bien podría haberse comprado en cualquier mísera tienda deportiva.

Al traspasar Wong el portal, cerrando la fila, la magia desapareció y con ella la brisa y el ruidoso sonido de la calle. Solo quedó un silencio incómodo.

—Es momento de que abras el portal hacia Wakanda —dijo Loki, haciendo caso omiso de la tensión que había en el ambiente y que nacía de la incomodidad que generaba Tony, quien fingía mantenerse imperturbable aunque era obvio que estaba molesto. La emisión de sus hormonas era suficiente para poner a todos sobre aviso—. No debemos perder el tiempo.

—Hay que llevarle a un lugar seguro —afirmó Brynhildr.

Strange entreabrió los labios, dispuesto a decir algo, pero Tony lo interrumpió.

—Ella es un objetivo —dijo Tony, con la mirada clavada en el suelo.

Al no recibir respuesta, levantó la mirada y clavó sus ojos azules en Brynhildr.

—Ella es un objetivo —repitió —, ¿no es cierto?

Permanecieron unos segundos desafiándose con la mirada. Tony se mostraba irritado, pero Brynhildr apenas pestañeaba.

—Sí, lo es —admitió al fin.

—¿Por qué? —preguntó Wong—. Si esa era un miembro de las valquirias renegadas, solo deberían estar atacando a miembros prime.

—Al menos, si está completa la información que nos comunicaste sobre los posibles ataques que recibiría la Tierra por su causa —añadió Strange.

—¿Y qué importa lo que le pase a esa cría? —discutió Loki.

—¡LOKI! —le reprendió Tony.

—¡No! Lo importante es ponerte a salvo. Y me importa poco quien tenga que caer para que tú y ese bebé estén a salvo y la ira de Freyja no se desate.

—¿Y crees que si SpiderWoman cae no tendremos problemas? ¡Sabes lo que ella es! ¡SÉ QUE LO SABES!

—¡Y QUÉ IMPORTA! Ahora mismo, la atención de Asgard está centrada en ti y tu embarazo. Las pérdidas no empañar la dicha de Freyja cuando ese bebé nazca.

—¡No puedes estar hablando en serio! —gritó Tony, conteniendo los deseos de acercarse a grandes zancadas a él. Sabía que si se acercaba y Loki tenía la oportunidad de mirarle con superioridad, parte de la batalla estaría perdida. Algo a tener en cuenta con alguien tan egocéntrico como él—. No puedes ser tan insensato como para pensar que podemos dejarla sola, ¡que no pasará nada si a ella le ocurre algo!

—¿Y se puede saber qué es lo que puede ocurrir? —preguntó Strange, siendo completamente ignorado.

—Oh, créeme. Me conozco Asgard lo suficiente como para saber cómo van las cosas. No importará.

—Claro que lo hará, ¡tenemos que protegerla!

—¡No estás en condiciones de proteger a nadie, entiéndelo de una vez! ¿Debo recordarte lo que te pasó hoy en esta misma habitación?

—¿Y debo decirte lo que pasará si me entero de que a esa chica le ha pasado algo y no he hecho nada para impedirlo?

—¡ERES UN MIDGARDIANO CABEZOTA!

Only a dreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora