zoe es una adolecente de 18 años, con unos padres dedicados a Dios y a su trabajo y poco tiempo para ella, su vida da un giro inesperado.
por su mala conducta esta adolecente tiene que convivir un tiempo en el convento ADORACION MILAGROSA , para lu...
Salí de prisa de la enfermería con Luana intrigada por lo que tenía por decirme ¿Qué tan grave podría ser?. - tenemos un gran problema para irnos- dijo Luana caminando junto a mi. - que pasó, no me digan que se van a echar hacia atrás- dije mirándola a las ojos. - no claro que no, es que el cura Germán se enteró- la Chica fue interrumpida por mi. - Si yo le dije - Luana me miro con furia. - como te atreves a contarle ahora Germán esta hablando con Regina y todos los planes se dañaran- dijo Luana muy enfadada. - recojan todo lo que llevarán, mañana en la madrugada nos iremos- dije muy decidida - y Amelia como la llevaremos- me dice la chica señalando la enfermería. - de eso me encargo yo, prepara a las chicas. Pero antes de irme tenía que despedirme de Erik, no quería marcharme sin darle el último beso; me dirigí hacia su habitación y abrí su puerta y él estaba en la ducha y no se dio cuenta que abrieron la puerta yo entré y me senté en su cama oliendo su pijama; seguí mirando y tocando todo cuando escuché la puerta del baño abrirse giré y ¡Oh por Dios! Qué dulzura están viendo mis ojos, era Erik semi-desnudo con sólo una toalla puesta en su caderas y su escultural cuerpo descubierto. - Zoe ¿qué haces en mi habitación?, puede venir alguien y vernos, pueden pensar mal -me dice Erik tomándome del brazo. - tranquilo nadie me siguió, ni saben que estoy aquí sólo que vine a despedirme -dije abrazando le. - ¿y por que a donde te marchas?- dijo extrañado de mi comentario. - nos vamos mañana Erik, Germán se enteró y no demora en decirle a la madre superiora Regina que estamos por escaparnos- dije sentándome en la cama. - no quiero que te vallas- me dice sentándose a mi lado un poco triste. - tú ya encontraste Tu camino y es éste, el mío no está aquí y tú muy bien sabes- dije mirándole a los ojos para que entendiera. - Zoe Entonces no me pidas que te ayude, yo no te quiero lejos de mí y dime egoísta pero no soportaría pasar por los pasillos de este convento y no verte o escucharte y que en cada reunión dejar de escuchar como hablan mal de ti- dice él con tristeza. Me levanté de la cama y le extendí la mano para que se levantará y darle un gran abrazo. - gracias, por todo por salvarme del castigo impuesto por la madre Regina pero si no me quieres ayudar lo entiendo, eso no cambiará mi manera de pensar yo me voy a ir con ayuda o sin ayuda.- dije levantando la vista hacia sus ojos. Quedamos a tan sólo centímetros de nuestros labios; sentíamos la necesidad de besarnos era la despedida Aunque doliera, tomo mi rostro con dulzura y lo acaricia lo cual hace cerrar los ojos por su tacto, Cómo era posible que este hombre Me guste tanto, me besó como nunca lo había hecho y me di cuenta que esa era la despedida, luego paso a besar mi cuello, yo tocaba tu torso desnudo y muy bien esculpido.
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Caímos los dos juntos en la cama él encima de mi y comenzamos a intensificar el beso sólo nos alejamos para tomar un poco de aire, sentía como su erección crecía aún más entre mis piernas , mis manos decidí bajarlas hasta sus caderas; dándome cuenta que la toalla se le había caído"oh por Dios tengo a un hombre desnudo encima de mi", él hizo que levantará los brazos para poder quitarme la pijama que tenía puesta dejándome sólo en ropa interior.
