ENTRE MONJAS +18

SÓLO SON SUEÑOS.

Fadil....
Ver como Zoé tenía ese vestido de baño tan provocativo, me hace perder el sentido y aún pero saber que se ríe y se divierte en la piscina con el hermano de Benjamin, no puedo controlar mis impulsos y decido salir a hablar con ella, pero escucho la voz a alguien y me toca detenerme.
-a donde crees que vas?- me giró y puedo ver a Ghaada cruzada de brazos mostrando la molestia que esto le causaba.
- en realidad me iba a meter a la piscina a jugar con ellos- es era la peor de mis escusas.
- mejor nos vamos a la habitación y me conscientes un rato.
- eh... ves adelantándote yo iré después, tengo que hacer algo antes.
Ella pone cara de molestia y me hace una señal, se lleva uno de los dedos de ella a la boca y se toca los dientes, sabía bien que significaba eso, (no son de leche), quería decirme que no se tragaba el cuento de queremos que hacer algo importante.
Pongo cara de molestia, No quería que alguien me sermoneara ahora - piensa lo que te convenga.

Ella me mira disgustada pero se marcha por donde vino dejándome sólo de nuevo.

Aún no paro de ver a Zoé, Se ve tan sexi y provocadora, pero Ghaada no para de vigilarme, tengo muchas ganas de hablar con Zoé, Pero ya tendré tiempo para eso, Ella se irá en un par de días y podré hablar con ella más tranquilo.

Zoé...

Estába muy cómoda hablando y jugando con Germán, jamás había hablado con el de esta manera, hacíamos parecer que nos conocíamos de toda la vida; salimos de la piscina y nos tiramos en la tumbona y con una copa de champaña brindamos.
- por una vida nueva- dice el levantando su copa, yo hago lo mismo pero no tenía por quien brindar, haci que dije lo primero que se pasa por la mente.
- um.... que venga un nuevo amor y mate al que tengo- diJe tomando de la Copa, sin percatarme que estaban siendo observada por Germán de una manera intrigante.
- Te sucede algo con el amor - me dice el sonriente.

En realidad no me sucedía nada con el amor, Si no con las personas que me tocaban para enamorarle.

Mire fijamente a Germán Y sus ojos eran parecidos a los de Benjamin pero estos inspiraban paz y una confianza increíble a diferencia de su hermano- en realidad si tengo problema con el amor.
- bueno si quiere contar estoy disponible- el nunca dejará ese papel de cura, no podía contarle exactamente lo que me pasaba y con quien me pasaba, esto hace que decida contarle lo superficial.
- estoy enamorada de un hombre comprometido, pero hoy me di cuenta que el jamás dejará a su mujer por mi.
- siempre fuiste la oveja más descartada de las chicas del convento, Pero me sorprendía que siempre tenías como solucionar tus problemas, erés fuerte Zoé y sabrás como manejar esto. Pero sólo puedo pedir que Ghaada no se entere de nada ella no tiene que sufrir por sus aventuras.
Me sorprende que diga el nombre de Ghaada, ¿como sabe el que estoy hablando de Fadil?, mi corazón se acelera demasiado y es inevitable no colocarme nerviosa, Mi manos comienzan a suedar con tenacidad.
- de...que hablas, Fadil no tiene que ver con nada de esto- mis nervios estaban disparados, se me podía notar al hablar.
- Zoé, no sea mentirosa, e notado como se miran y aveces cuando los veo hablado parecen discutir, No soy tan bobo para no darme cuenta- valla que si es muy meticuloso en el arte de observar.

En ese momento llega Erick y Deseret, les agradecía que hayan terminado esta conversación que sólo me podía hacer daño, la dulce pareja nos saludo y se sentaron junto a nosotros.
- hola Zoé- habla Deseret con su sonrisa de inocencia, esa niña me hace recordar mucho a mi.
- hola, ¿que tal como les va ?- le lanzó una media sonrisa.
Los dos chicos se van adentrándo a la piscina dejándonos a las dos chicas solas.
- Erick es un buen hombre- Deseret tenía razón yo más que nadie sabía que lo era, tuve la fortuna de tenerlo.
Al ella decir eso, observó a Erick quien está riendo con Germán en la piscina - si que lo es.
- Te agradezco por ayudarme a tenerlo, a pesar de que lo querías- eso comentario me saca de mis casillas, me hace enojar, Pero me tengo que tranquilizar.
- Erick no era para mi- le dije dándole una media sonrisa y puede notar como ella se sonrojaba de la vergüenza.- pero tranquila no te lo voy a quitar.
Me levanto de la tumbona y decido entrar ya a la casa, Pero la voz de Germán me detiene.
- eh.. ex-cuñada ¿por que te vas?- No me agradó de mucho ese apodo, vi como Erick me miraba con seriedad y Deseret sonreía.
- Germán, no quiero que me llames de esa manera, mi nombre es Zoé, mucho gusto.- le hice notar mi molestia- me iré adentro me dio mucho frío.
Germán sólo se queda callado al igual que la sonrisa de Deseret de borra de su rostro.
Camino a hacía adentro de la casa y me encuentro con Jackelin, era a la única hora que podía salir de su habitación, ya que sabía que Alex estaría a esta hora en la enfermería.
- que mal genio tienes hoy, deberías estar contenta te irás con tu amante y su mujer- esto ya es la tapa.
Ignoro su su comentario y me marchó a mi habitación, me quito las prendas que están mojada y me coloco la toalla, quedando solamente con ella, me tiro en la cama boca arriba mirando el techo, pensando en que mi vida se arruina, todos saben que soy la amante de Fadil, no me recordarán como más nada.
Escucho que abren la puerta de mi habitación, pero no le resto mucha importancia, pensado que era jackelin queriendo fastidiarse aún más, pero me alertó cuando escucho que la puerta me colocan seguro levanto mi cabeza y a que no adivinan a quien me encuentro.
- ¿que haces aquí?- le dije a Fadil, el cual estába arecostado a mi puerta mirándome.
- zoe, Sólo quiero pedir disculpas, no quiero que me odies - ya es un poco tarde para eso, por que gracias a ti me convertí en solamente tu amante.
- ya eso eso bueno largo- prácticamente lo lanzó fuéra de mi habitación y cierro la puerta, me lanzo nuevamente a la cama para esta vez cerrar mis ojos y dejarme completamente dormida.

En los sueñosde Zoé ..
...........

Veía pasar una par de luces en forma de personas por el bosque de la isla, estaba plasmada mirando, pero no tenía miedo de nada de lo que me podía pasar, en ese instante Roser aparece a mi lado y Asael al otro lado.
- esto lo comenzó el, pero se que lo terminarás tu- dice Asael.
No entendía bien de lo que ellos me hablaban, hasta que puede ver a donde se dirigían Todas aquella luces que estaban delante de Mi, estaban cambiando en dirección a la habitación tenebrosa que encontré, con muchas cosas escalofriantes, escrita en la pared.
- zoe, protegete y protege a Isaac y a Isaiah, pero también a samanta- ¿como Asael sabe el nombre que le quiero colocar a mi hija si la tengo?.
- lindos nombres, sabía que no me decepcionarias- Rposer me dice con una sonrisa, Mi el suelo no paraba de llorar, los extrañaba, más a Roser.
- ¡hay viene, por favor Zoé liberanos, estamos atrapados el nos tiene atrapados!- puedo sentir la desesperación de Asael en querer liberarse de algo, pero no sabía de que, hasta que vi que un destello de luz casi idéntico a los otro, se aproximaba, pero este a medida que se acerca se va tornando más oscuro, sentía la necesidad de correr.
-¡ zoe despierta ahora!- escucho el grito de Roser, pero no se como despertar.

Hasta que sentir que algo me atraviesa robandome algo dentro de mi y dejándome basia y sin fuerzas.
Sentía que todo mi cuerpo ardía por dentro, no podía estabilizar mi respiración, sentir un brusco jalón a mis espaldas que me arrastraba a aquella habitación tan tenebrosa.
..........
Fin del sueño...

Mis ojos se abren y aún tengo la sensación de inseguridad en mi ser, me sentía desprotegida, las lágrimas no paraban de salir de mis ojos con mucha prisa, mi corazón latía muy fuerte, observe toda mi habitación y puede ver que estaba acompañada de alguien, que no se cuento tiempo llevaba observandome dormir pero lo suficiente para colocar cara de preocupación.
- zoe, como te salieron esas marcas- me dice Germán acercándose a mi muy temeroso.
Me observo algunas partes de mi cuerpo y puede verlas, eran golpes, pero tenía pequeños dedos ensangrentado en mis piernas, huellas de los dedos de un niño de mínimo 3 años de edad, tanto Germán como yo estábamos asustados, Pero el entendía el porque pasaba eso.
- por que no me dijiste en el convento que ese espíritu te perseguía- me dice el hablando de la vez que lo acompañe en el exorcismo de la señora endemoneada.
- pensé que no iba a ser tan grave- le dije bajando mi mirada y sentándome en la cama, al acostarme un poco en la almohada mi espalda arde, me desarecuesto de inmediato que siento el dolor y veo la almohada que está llena de sangre, giró a ver a Germán y está plasmado mirando mi espalda, pude ver el temor que eso le causaba.

Xx... esto será la gota que rebosa el vaso..
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