ENTRE MONJAS +18

OPORTUNIDAD DE VIDA.

Benjamin...

Tenía temor, desde que abrí mis ojos por su grito todo dentro de mi se me cruzo y me invadió del miedo y la desesperación, hacia que decido llamar a todo en la casa, Milagros y Amelia supieron como actuar al instante, mientras luana buscaba al médico, estábamos todo mirando subir a Zoe, escuchando sus grito, Que me partían en alma, pero el otro lado que compartía con abbadon amaba escuchar.
Al llegar el doctor, él pide estar en absoluta soledad, pero antes de que me levantase de la cama Zoe me aprieta la mano con toda sus fuerzas.
- Benjamin tu no te vayas, quédate- su voz estaba quebrantada por el mío y las ganas de llorar, sin protestar decido quedarme y darle fuerzas.
- esto no se ve muy bien- el doctor dice, haciendo que nuestros nervios suban más, pero hice todo lo posible para calmarme y calmar a Zoe, ella estaba asustada y eso causaría más daño.
Sólo espero que esto no haya sido obra de abbadon.
Después de varias horas sacándole platica a Zoe para que repitiera, el doctor tenermina y espero que me den sólo buenas noticias.
- ¿ya está todos bien?- pregunté nervioso por saber la respuesta.
- si ya el peligro ya pasó, sólo tiene que guardar reposo todo este mes que le falta ya que lo que le sucedió es muy raro- dice el doctor preocupandonos más.
- ¿Que sucedió?- pregunta Zoe asustada.
- al parecer, te forzaron una inducción de parto y esto rasgo un poco el útero y casi afecta al bebé, pero gracias a Dios y a que llamaron una horas antes se puedo detener la inducción- no estaba entendiendo nada ¿como que le inducieron el parto?.
- ¿has tomado una clase de bebida, pastillas desconocidas o frasco de laxante ?- mire a Zoe esperando su respuesta, al ver su rostro vi que está estaba igual de confundida que yo.
- No doctor- ella dice y el doctor sólo sonríe.
- bueno entonces cuidate mucho vale- el doctor y su ayudante se marchan y me giró para mirar Zoe.
- porcelana dime la verdad, No te has tomado nada de eso ¿verdad?- sólo quería salir de dudas.
- no Benjamin, prometi no lastimar a la bebé y cumpli con todo mis controles y alimentación para su bienestar, No entiendo por qué sucedió eso- la noto muy confundída, haci que decido abrazarla.- de echo está mañana cuando veníamos en el yate Ghaada nos ofreció unas bebidas para brindar por una nueva vida.
Ghaada, que gran inocencia de esta mujer; sabía bien que Ghaada la odiaba y aún haci le recibe cualquier tipo de cosa a ella, ahora todo cobra sentido.
Todos vuelven a entrar a la habitación a pregunta como se sentía Zoe, pero esta estaba cansada y sólo quería dormir y todo entendieron y saliendo de la habitación.
- ven yo me llevaré esto tu cuida de ella- dice Milagros quitándome las sábanas manchadas de sangre que había que quitado de la cama.
Mire la hora en mi teléfono y eran la 1:30 am, está noche será muy larga, me acostó a su lado y ella se abrazo a mi de una manera vulnerable, hacia su yo la cubro con mis brazos y le doy un beso en la frente.
- No quiero que vuelva a pasar- dice ella entre sueño.
- yo no lo permitiré- me lastima verla haci, ella daría todo por tener a su bebé en brazos, pero el egoísmo lo quiere impedir.

Zoe...

Me acosté segura de que Ghaada era la culpable de todo lo que había pasado, desde que llegamos a la casa yo no he tomado nada sólo aquella bebida que me dio ella, pero no era tiempo de pensar en eso, estaba cansada y aún tenía que recobrar el aliento, de sólo imaginarme la pérdida de mi samanta era la destrucción total de mi vida.
Cierro mis ojos del cansancio y sólo puedo  a Benjamin tocando mi cabello, él a sido muy paciente conmigo y se lo agradecía mucho, haci fue hasta que el sol se quiso posarse en mi ventana de vidrio.

Abro los ojos poco a poco, para ir acostumbrandome a la luz de la habitación, al estar totalmente despierta me giró a buscar a Benjamin pero no está, en cambio en reemplazo de él hacia una bandeja llena de comida y todo tipo de cosa que se me antojaba, en la bandeja también había una nota, sabía perfectamente que era de Benjamin la abro muy emocionada.

No pude quedarme hasta que tus ojos se abrieran ya que tenía que hacer algunas cosas por fuera, pero dejó este delicioso desayuno para las dos hermosas mujeres que dominan mi corazón, espero que no hagas mucho esfuerzo, descansa mucho.
Att: Benjamin.

Al terminar de leerla no pude evitar sonreír como idiota, este hombre sabía como ganarse mi corazón y el de mi hija, comenze a comer de una manera que jamás imaginaba hacer y en ese momento tocan a mi puerta, luego de dos toques se abre y puedo ver que Amelia y Milagros son las que estaban llamando.
- ¿se puede?- Amelia tiene en brazos a su hermoso Bebito.
- claro- logre extender mis brazos para poder cargar a el bebé de Amelia, él cual llevaba por nombre Dan.
Al tenerlo ya en mis brazos Amelia y Milagros se sentaron en la cama- ¿como te sientes?- Milagros pregunta.
- mucho mejor.
-¿tu te induciste el parto?- Amelia estaba tardando demasiado en preguntarlo, sabía que no me creía que no lo había hecho yo, ya que ella tomó del mismo jugo y no se sintió para nada mal ella.
- no lo hice- diJe metiéndome trozos de frutas a la boca.
- eso ya pasó Olvidémonos de eso- Milagros dice acariciando mi pelo despeinado por el hecho de haberme acabado de levantar.
-¿ se puedes?- dice uno de los mayordomos tocando la puerta y haciendo que tomemos su atención, este traía implementó de aseo, eso quería decir que iba a limpiar la habitación.
- si claro- dije levantándome de la cama para irme a la ducha, pero antes observe todo el rastro de sangre que aún estaba en la cama y en casi todo el cuarto, un escalofrío corrió por todo mi cuerpo Y me hace estremecer.
- estaremos en las hamacas si quieres ir a relajarte con nosotras- dice Amelia quitándome a Dan de las manos y marchándose de inmediego con Milagros.
Sonaba muy bien haci que luego de ducharme y vestirme, salí de la habitación, encontrándome con la sospechosa de mi casi abortó, si Ghaada está hay afuera precisamente en mi puerta.
-¿ Que quieres ?.
- venía a ver si no de habían muerto- que maldita es esta tipa.
- no me cabe la mayor duda de que has sido tu la que me dio algo para matar a mi bebé.
- si fui yo- no esperaba esa respuesta, mis ojos se llenaron de lágrimas, por la rabia que sentía.
- ¡eres una descarada!.
- te equivocas la única descarada eres tu Zoe, te metiste con mi marido y ese bebé que esperas es de él haci que voy a hacer lo imposible para que ese bebé no nasca.
-te voy a pedir el favor de que con mi bebé no te vallas a meter, por que aquí la única que debe tener miedo eres tu, o olvidas lo que yo se y las pruebas que tengo; haci que guarda tus amenazas por que si no voy a cavar con la farza de una "familia feliz"- ella quedó sorprendida pero yo sabía que no se había conformado.
- acaba con mi familia y yo acabo con tu bebé - lo hace sonar con todas las fuerzas de su ego y superioridad, yo sólo me carcajeo en su cara y luego la miro fijamente a lo ojos.
- tu que le tocas un dedo a mi bebé y te las vez conmigo, recuerda que no me peso las pistola para dispararle a jackelin cuando me hicieron perder mi primer bebé- Al fin su sonrisa se borró al igual que si altaneria, ella recordaba muy bien ese día.
Cierro la puerta de mi habitación y camino en dirección a las cabañas, a relajarme un poco, al llegar estaban casi todos hay, menos Benjamin ni Asrael, ellos habían salido temprano.
-¿ como siguez?- esa fue la pregunta de Isam al verme.
- mucho mejor- sonreí y mi mirada se cruza con la de Fadil quien está muy atento viéndome.
-¿por que no nos dijistes que querías matar al bebé?- luana pregunta con toda tu sinceridad, No sabía que ideas tenían en la cabeza.
- yo no quería matar al bebé, sólo que alguien  me dio a tomar algo  y eso causó el sangrado es todo- veía sus rostros no me creían en absoluto.
- prometemos que te cuidaras más ¿vale?- Germán se Levanta de la tumbona y me abraza.
-lo haré, mi bebé ahora tiene  una nueva oportunidad de vida y yo lucharé por que sea interminable.

...X...Que hermoso, espero y les haya gustado.