Nueva Vida (I)

Capítulo 27

El resto de la semana fue tranquila y sin amenazas, todos disfrutamos al máximo del viaje.

Camila y Nicolás se hicieron muy amigos de los hijos de unos conocidos, incluso del hijo de Vincent, debería dejar de lado el trabajo, pero yo sé que él no es un mal tipo, solo es un importante traficante de armas, pero con su familia tengo entendido que es muy bueno. Fue gran amigo de mi padre más allá de los negocios, y sus hijos no tienen nada que ver con este mundo, al igual que los míos.

Tuvimos que regresar el jueves porque tenía que buscar los uniformes de los chicos, y ellos tenían que empezar a prepararse para comenzar las clases el lunes.

Al llegar a casa todos estábamos cansados por el viaje, aunque valió la pena.

Mi nana se quedó un poco más para luego regresar a su casa ya que no quiso venir hasta dentro de algunos días.

Todos llegamos con la piel bronceada, aunque los chicos se ven un poco colorados por su tono de piel.

De Josep no supe nada durante todo el viaje, no respondí ninguna de sus llamadas, todavía sigo molesta por su actitud, aunque lo que más me molesta es que todavía no me dice porque desaparece y aparece de esa manera.

—Chicos yo tengo que ir a buscar sus uniformes, vuelvo en un momento, y descansen porque a partir del lunes su rutina cambiará, me llevaré a Emmy.

Ellos asintieron, y junto a Emmy fui rumbo a buscar los uniformes, también tengo que comprarles sus cosas escolares, pero eso ya será mañana juntos.

Luego de eso, fui a la agencia de autos para buscar el regalo que aún me falta de Camila, ya lo tenía elegido, pero faltaba arreglar unos papeles para poder llevarlo conmigo.

—Mami por qué aquí hay tantos autos?

—Porque aquí venden autos cariño, por eso hay muchos.

—Y tú vas a comprar otro? — eso caracteriza mucho a Emmy, es demasiado curiosa e inteligente.

—Si pequeña, es una sorpresa para Camila, por eso no puedes decir nada hasta que se lo enseñemos, ¿está bien?

Terminé de arreglar los documentos y cancelar lo que faltaba, y pedí que le pusieran un gran lazo en el techo.

Regresé a casa junto a Emmy, y el nuevo auto de Camila lo traía uno de los escoltas.

Antes de entrar a casa recibí otra llamada de Josep, y pensé que sería buen momento para responder.

—Qué sucede? — respondí cortante.

—Estaba preocupado por ustedes, ¿cuándo vuelven?

—Pues como te darás cuenta todo esta excelente, llegamos hoy.

—Camila sigue molesta conmigo cierto?

—No sé si Camila está molesta contigo, pero por mi parte, estoy furiosa, que si no fuera por el aprecio que te tengo ya estarías como todo el que me hace molestar o que me traiciona. ¿Si sabes de qué hablo no? — dije en clave porque Emmy estaba escuchando.

—Sí, muerto. Pero no tienes razones aparte de estar molesta, yo no te estoy traicionando Jessie.

—Exactamente, y te equivocas, porque desde el momento que tu actitud cambió y me mentiste sobre lo que realmente te sucedía comenzaste a traicionarme.