Ya estamos a lunes, hoy los chicos comienzan una nueva rutina, y creo que más emocionada estoy yo que ellos, para mí es muy importante que ellos se sientan bien y cómodos en su nuevo entorno académico.
Yo a partir de hoy empezaré mi día junto a ellos, quiero poder ser yo quien los lleve al instituto y a Emmy al colegio o al menos despedirlos antes de que se vayan.
Luego de que termine de alistarme, salí de mi habitación y toque las tres puertas, por la hora imagino que se están levantando, y si no los despertaré yo.
La primera en abrir fue Emmy, con una enorme sonrisa y un poco despeinada por dormir.
—Mami ya me voy a empezar a vestir, estoy muy emocionada.
—Claro cariño, andá a alistarte que luego de despertar a tus hermanos te ayudo, ¿te parece?
Emmy asintió y entró nuevamente a su habitación, yo volví a tocar las puertas de Nico y de Camila, como no respondía entré, y como imaginaba siguen dormidos.
Primero desperté a Camila que seguro se tarda mucho más en alistarse.
—Cami despierta, ya debes alistarte para el instituto —dije moviéndola suavemente para no asustarla, ella se empezó a despertar y le volví a hablar — cariño anda y arréglate, que hoy comienzan el instituto.
Ella pareció recordar que empezaban hoy y se levantó corriendo a ver la hora, por lo acelerada que estaba yo me reí, seguro no escuchó el despertador.
—En un momento vuelvo, se nos hace tarde —Camila asintió y se fue a su baño para hacer sus necesidades. Yo salí y fui a la habitación de Nicolás, volví a tocar la puerta y entré.
—Nico cariño ya es hora de que te alistes para el instituto.
—Un ratito más por favor —dijo tapándose nuevamente con la cobija para seguir durmiendo.
—Nicolás despierta que entran al instituto en 10 minutos —dije esta vez con la voz más seria, pero no podía aguantar mucho más tiempo las ganas de reírme, él se levantó y me miro con mucho susto — a mí no me mires de esa manera, te tienes que levantar antes de que se haga tarde.
Fui ayude a Emmy a terminar de acomodar su uniforme.
—Te ves muy hermosa mi princesa.
—Gracias mami, pero tengo miedo — dijo borrando la sonrisa que tenía y haciendo puchero como siempre qué quiere llorar.
—Miedo de qué pequeña?
—De no gustarle a mis compañeros y que ninguno quiera ser mi amigo —su respuesta fue estando casi al borde de las lágrimas.
—Cariño no tengas miedo que eso no pasará, siempre hay alguien que va a querer ser tu amigo, eres una niña muy buena, y si alguno no quiere ser tu amigo no te preocupes que luego encontrarás muchos más que sí quieran. Ahora tienes que estar feliz, nada de llorar, ¿vale?
—Está bien mami — dijo recuperando la sonrisa que tenía antes.
Bajamos juntas para desayunar y antes de hacerlo volví a llamar a los chicos para que se dieran prisa.
Media hora después bajaron ya listos.
El uniforme a los tres les quedaba hermoso, pero las caras de Camila y de Nico no eran de mucha emoción.
—Siéntense a comer que se les hace tarde niños. Y cambien esas caras que empiezan las clases no van a un funeral.
—Estas corbatas son insoportables Jess, no quiero llevarla — dijo Nico evidentemente molesto, y todavía tenía cara de sueño.
ESTÁS LEYENDO
Nueva Vida (I)
General FictionLibro 1 de la trilogía"Vidas" "Soy el Ángel que te salva, y el Demonio que te condena". Todos tenemos ese lado oscuro que queremos mantener oculto de todos. Sin importar que pase, debo seguir con esto. Dejé de ser la niña de mami y papi hace mucho...