Desperté sin resaca, algo que me sorprendió ya que anoche bebí bastante.
No tengo ni idea de a qué hora llegaron los chicos, todos se quedaron aquí.
No me parecía muy apropiado que llegarán a sus casas en estado de ebriedad.
En la cocina no hay nadie, pero encontré una nota de mi nana donde me avisaba que salió a comprar junto a Nora y la pequeña Emmy.
No sé qué hora es, supongo que pasadas las 12. Lo confirmé al ver la hora en el reloj de pared que se encuentra en el comedor.
Mi móvil está muerto, no tiene nada de batería y bastante me costó conseguirlo.Me hice un batido de frutas, porque no tenía mucha hambre y subí en busca de mi móvil para así poder llamar a mi nana.
—Hola nana, dónde están?
—Mi niña ya despertaste, no te preocupes que estoy con Nora haciendo la compra, y llegamos en un momento.
—De acuerdo. No se olviden de comprar helado y galletas.
Mi nana río por mi pedido, desde muy pequeña siempre me a gustado comer dulces.
Seguro y los chicos despiertan en un luego, por eso aproveché el tiempo para prepararles una comida ligera y algo para la resaca.
Comencé con el café, jugo de naranja, luego un bocadillo con huevos revueltos para acompañar y así fui preparando la mesa.
Y tal y como lo imaginé, bajaron con una resaca terrible, sus caras lo decían todo.
—Buenas tardes chicos — dije con una sonrisa, que al parecer no les dio ni un poquito de gracia —. Bien ya entiendo, no tiene nada de buenos. Coman que ya está servido.
Al parecer funcionó que les preparará el desayuno, sus caras cambiaron un poco luego de comer y tomar las pastillas para el dolor de cabeza.
—Mamá y mi nana y Emmy? —Nico estaba extrañado al notar que faltaban ellas en casa.
—Están con Nora haciendo la compra, llegan en más tarde
A pesar de tener mucho dinero, siempre me enseñaron que hay cosas muy necesarias saber, como hacer la compra o saber cocinar, nunca se sabe hasta cuando van a hacer las cosas por ti.
CAMILA
Que alguien me explique qué demonios pasó anoche.
La cabeza me está explotando y no tengo ni idea de en qué momento llegamos a casa.
Solo tengo vagos recuerdos de Isaac y yo en mi habitación, o de las chicas bebiendo sin parar en el cuarto de juegos.
Pero lo peor es que al parecer nadie recuerda nada, ninguno sabe que paso luego de que Jessie se fuera. Las SS estaban con nosotros, ellas también estaban ebrias y ya luego no sé.
El problema no es despertar junto a Isaac, ni mucho menos que pasara algo más que dormir. El problema es que no recuerdo casi nada.
Jess nos preparó el desayuno; estaba delicioso. Al parecer ella sí despertó de buen humor.
Los gemelos no durmieron en casa, ellos se fueron con sus escoltas a su casa. Pero el resto se quedó aquí.
Isaac se fue luego de desayunar, supongo que su padre lo estaba esperando .
Gabriela, su hermano y Emilia también se retiraron a sus casas al poco tiempo.
Tiago, Nico y yo vimos una película mientras pasaba el rato.
—Alguno de ustedes recuerda algo de anoche?
—Yo recuerdo hasta un poco después de que mamá se fuera.
—Y tú Ti?
—No mucho, son recuerdos borrosos, solo les puedo decir que llegamos en la mañana todos ebrios haciendo un desastre. No sé cómo no despertamos a todos en la casa.
Nos reímos imaginando la situación, ya luego seguro y recordamos mejor todo.
Seguimos viendo la película. Cuando terminó entró Jess junto a la pequeña.
—Deberían alistarse, vamos a salir a cenar.
—Jess sabes algo de mi papá? Mi móvil se quedó sin batería.
—Hablé con él, va junto a tu madre a cenar con nosotros.
No sabía qué hora era, supongo que ya era tarde.
Entré a mi habitación y busqué mi móvil para ver la hora y así revisar las redes un rato.
El tiempo pasó volando, no podía creer que ya casi es la hora de la cena.
Tenía varios mensajes que no había visto y me senté en mi cama para así leerlos.
Algunos eran felicitaciones de mis compañeros, tenía varios de Isaac y otro de Sasha.
Leí primero el de Sasha y lo que decía me dejó loca.
Sasha: «Mañana tienes que venir temprano a la agencia, hay alguien muy importante que quiere hacer negocios contigo. Te quiero, besos.»
La duda me mataba, le respondí una afirmativa y seguido leí los mensajes de Isaac.
Isaac:
«No puedo evitar sentir que te quiero, y cada vez más »«¿Nos vemos mañana? Ya te extraño маленький»
Sonreí como idiota, no podía dejar de sonreír con esos simples mensajes que para mi valen tanto.
Tengo que admitirlo, Isaac Ivanov me tiene en sus manos y no me importa en lo absoluto.
Camila:
«También te quiero Ivanov»
«Obvio que nos veremos tontito, tenemos clases juntos»Deje el móvil en la mesita que se encuentra a un lado de mi cama, y entré a mi baño para así ducharme y arreglarme para salir.
Luego de esa ducha tan relajante, pude recordar varias cosas.
Sabía que algo pasó entre Isaac y yo, pero recordar me hizo sonrojar, dormí junto a él luego de todo eso. También pude recordar que los guardaespaldas traían en brazos a Nicolás y que luego bebí más en el cuarto de juegos junto a las chicas e Isaac, eso y una que otra cosa sin mucha importancia.
Solo espero no haber hecho un espectáculo en público, y menos después de ese gran desfile.
Todo el camino al restaurante estuve hablando con Isaac; en varias ocasiones Jess me veía sonreír como siempre lo hago al hablar con él, parece darse cuenta, pero no dice nada, seguro está esperando que se lo diga yo.
Les comenté sobre el mensaje de Sasha y me llenaron de buenos deseos.
Seguro fue alguien que me vio en el desfile o que se yo.
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Nueva Vida (I)
قصص عامةLibro 1 de la trilogía"Vidas" "Soy el Ángel que te salva, y el Demonio que te condena". Todos tenemos ese lado oscuro que queremos mantener oculto de todos. Sin importar que pase, debo seguir con esto. Dejé de ser la niña de mami y papi hace mucho...