Capítulo 67

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Días después

El estrés me tiene agotada, Melissa a estado intentando encontrar algo que nos ayude con las amenazas, pero es muy jodidamente difícil.

Por otro lado, los investigadores parecen estar cerca de conseguir algo importante, a pesar de que Melissa me asegura lo contrario.

Todo va igual que siempre, los chicos en el instituto, Emmy en su escuela cada día más inteligente.
Camila, es la que me preocupa un poco, últimamente a estado muy ocupada con varias campañas publicitarias, y no tiene casi tiempo para descansar, y no es sano para el embarazo.

- Tengo algunas cosas que pueden interesarte.

- Se toca antes de entrar, por si se te olvida - esta niñata cada vez coje más confianza y no sé si sea bueno o malo.

Pero sí puedo asegurar que es buena en lo suyo.

- Quieres que te diga lo que encontré? ¿o lo hago cuando salga y vuelva a entrar?

- Ya estás dentro, habla.

- Bueno lo primero es, que los investigadores van un poco lentos en lo suyo. Encontré otro archivo donde tenían información, pero no era mucha la diferencia.

- Si ya encontraste otro, ¿que te asegura de que no hay más?

- Ellos mismos con sus acciones lo confirman, no hay que ser muy listo para darse cuenta de que están desesperados por conseguir algo que pueda servir.

- ¿y cuáles son esas supuestas acciones?

- Siempre que estoy de guardia en el club, intentan hablar conmigo, eso, desde del día que me vieron contigo.

- Algo que imaginé que harían.

- Si bueno, por otro lado también tengo algo sobre las notas.

Me puse más seria, no era mi tema favorito evidentemente.

- Te escucho.

-Hay una especie de patrón, no sé cómo explicarlo. Solo te puedo asegurar de que se trata de alguien de tu entorno.

- ¿Un patrón?

- Las primeras fueron enviadas luego de que se entregaran cargamentos importantes, o cuando fueron los atentados contra los cargamentos. Justo cuando tenías otras cosas en las que pensar, como una distracción. Y también muy pocas personas saben que Camila está embarazada, como para que lo sepan.

-O puede que sea porque estamos muy vigilados, hay información que puede ser útil que no solo yo manejo.

-Eso no es todo, siempre es cuando hay más gente a tu alrededor.

-Eso es cierto, ninguna me la han dado estando completamente sola.

-Lo que refuerza mi opción están cerca. O la tuya, te tienen muy bien vigilada y para no dejar pistas lo hacen así.

-Todo es una mierda.

- Bueno, yo me voy. Si tengo algo más te informo Leona.

Lo último lo dijo con ironía, como siempre lo hace.

- Esta bien niñata.

Salí temprano de los galpones, tengo que buscar a los chicos en el instituto, algo que tenía mucho tiempo sin hacer.

No paraba de darle vueltas a todo el asunto, intentando encontrar algo en mi mente que me ayude, pero como en cada intento el resultado es fallido.

Había reforzado la seguridad nuevamente, esta vez sin molestias por parte de Camila, ni de Nicolás, y eso me extrañó un poco.

Emmy llegó hasta el coche y me dio un fuerte abrazo, me llegaba a sorprender lo dulce que podía ser en algunos momentos, era una niña demasiado buena, con un corazón enorme.

-Mami, viniste por nosotros. - su mirada demostraba alegría pura.

- Sí mi pequeña.

- Hola mamá - Nico me dio un beso en la mejilla y uno en la frente a la pequeña.

- ¿Y tú hermana?

- Ya debe venir, estaba en el baño.

Asentí y esperé junto a ellos a Camila, quien salió acompañada de su no-novio.

- Hola mami.

- Hola Jessie.

Les regrese el saludo y ellos se despidieron, en el camino las risas no faltaron, los chicos contando anécdotas de su día.

-Estoy demasiado agotada, voy a descansar un poco.

Camila no había terminado de entrar casa cuando ya se fue a su habitación, puedo imaginar lo cansada que se siente.

- Yo terminaré de hacer mis deberes, nos vemos luego ma.

- ¿Mami, juegas a las muñecas conmigo?

- Claro pequeña juguemos.

Pase un rato largo jugando con mi pequeña princesa, estos momentos son los que me dan paz y tranquilidad, aún me sigo asombrando lo mucho que quiero a estos tres chicos, cómo se convirtieron en mi prioridad y mi fortaleza. La mejor decisión que pude tomar a pesar de sus consecuencias.

Sé que mi mundo los tiene al borde del peligro, pero no puedo evitar sentirme feliz por tenerlos conmigo, que ellos se sientan cómodos y felices a mi lado es lo más importante, el resto del mundo que se joda.

- Mami escuchaste eso?

No entendía de qué hablaba, no escuché nada.

- No pequeña, que escuchaste?

- No se mami, creo que fue un grito.

Ella parecía estar asustada, su carita lo demostraba y me tense, imaginé lo peor y me levanté rápido para asegurarme de que no fuera nada.

Y justo cuando abrí la puerta de su habitación lo escuché, un grito fuerte y de dolor, venía del cuarto de Camila.

- Mami qué es eso, por que esos gritos?

- No pasa nada, anda al cuarto de tu hermano y no salgan hasta que yo los llame, vale?

Ella asintió, y corrió hasta el cuarto de Nicolás, yo fui lo más rápido al lugar de donde venían los gritos, el cuarto de Cami.

Entré y la escuché llorar y sollozar, pero no la veía.

- ¿Camila? Cariño estás bien?

- Mami ayúdame, Jessie por favor ayúdame, mi bebé, mi bebé.

Estaba en el baño, sentada con la mano en el vientre y un charco de sangre en el suelo, estaba en shock, solo repetía lo mismo una y otra vez.

Y en ese momento el desespero en mi creció, no sabía qué hacer, pero estaba segura de que no iba a permitir que nada malo les pasara.

Nueva Vida (I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora