Todo por defenderte

Viajes

____ Shirosagi

-¡¡¡Adios, Shu!!!

-¡¡¡Cuidate!!!

-¡Lo haré! ¡No se preocupen!- dijo el con un tono muy alegre y su mochila en mano antes de entrar al avión.

Todos vimos como Shu nos despedía por la ventana que le había tocado, y nosotros nos despediamos de el...

Con lo que pasó ayer no puedo creer que esté tan feliz.

 En cuanto el avión despegó yo me alejé del vidrio que nos separaba de la pista, llendome a sentar en una banca. Miré mis manos, y por un mili segundo las vi rojas. Parpadee muchas veces y esa "visión" desapareció.

-____, ¿estás bien?- me preguntó Daigo con cierto aire de preocupación, sacandome de mis pensamientos.

-S... si. Mejor que nunca, gracias- le mentí, aunque lo disimulé bien. Estoy segura de que si se enteran de lo de ayer me matarán por haber hecho lo que el me pidió. No se ni siquiera porqué lo hice, pero por alguna razón yo le dije que si casi automáticamente. Aun no puedo olvidar su sonrisa de ALIVIO.

Lo de su familia maniatica en serio lo afecto al punto de...

-Tierra llamando a ____. Reacciona- dijo Wakiya mientras tronaba sus dedos frente a mi rostro.

-¿Segura que estas bien?- me volvió a preguntar Daigo.

-SI. Muy segura, en serio- contesté esbozando una sonrisa parecida a la de mi hermano.

-Vaya, en serio se nota que eres su gemela. Son iguales- dijo Rantaro mientras un escalofrío lo recorría de pies a cabeza. Yo reí esta vez de forma sincera.

-Bueno, basta de charla. Vayamos a descansar- dije levantandome de la banca y dandome media vuelta -nos vemos luego.

Ellos también me despidieron.

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Shu me regaló un juego de llaves para su departamento, solo en caso de emergencias... además de que quiere que mientras este aqui mantenga el lugar lo más limpio posible. Ridiculo.

Introduci la llave en el picaporte y la giré, abriendo la puerta. Miré el departamento.

Sin Shu aquí se ve vacio.

Entre para luego quitarme los zapatos y pasar a la sala. Todo estaba impecable, tal y como Shu y yo lo habiamos dejado ayer antes de dormirnos. Me dirigí a la cocina y observé la encimera.

Todo estaba limpio. Los platos, los cubiertos... los cuchillos. Sacudí mi cabeza y fui al que ahora era mi cuarto en este lugar. Las paredes color crema en serio daban a la habitación un ambiente muy agradable y acogedor. No lo pensé dos veces antes de lanzarme a la cama. Estuve un rato acostada hasta que me percaté que algo: había un papel tirado en el suelo. Sobresaliendo de debajo de la cama. Lo tome y lo leí.

EL alma se me cayó a los pies al leer la hoja. Hablaba de la secta "Runa del Sol" en Estados Unidos. Estaba firmado por varias personas, y entre ellas reconocí los nombres Hachiko, Tomoko y... ¿Megumi? En fin. Esto era, definitivamente, lo único que faltaba.

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Los días pasaron, y ahora eramos Valt y yo los que ibamos al aeropuerto. Valt perdió contra Lui (como era obvio que pasaría), pero su desempeño en el torneo fue tal que el BC Sol lo invito. Yo solo voy porque medio se hablar español y porque quiero hacer las pruebas para ver si también me admiten en el club.

Subimos al avión después de despedirnos...

Lui ni siquiera me vino a despedir.

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No tengo idea de en que momento fue que llegamos a España. Creo que tanto como Valt como yo nos dormimos en el camino, y ahora estamos en el país europeo donde se ubica el club al que vamos.

Valt estaba muy emocionado.

-Ah... es mejor de lo que se ve en las películas- en efecto, el tenía razón. Los edificios y las fuentes en las plazas eran de verdad algo muy lindo, aunque eso si: hay más turistas que en Japón... y entonces nos dimos cuenta de algo.

-Espera... ¿dónde estamos?... NOS PERDIMOS!!!!!!- gritamos los dos al mismo tiempo, llamando la atención de la gente, pues lo gritamos en japones.

Nos subimos a una torre algo alta para observar la ciudad y así lograr ubicarnos. Estabamos algo cabizbajos hasta que un niño llegó y le habló a Valt.

-Jaja, oye. Dejame ver tu bey- creo que Valt no entendio ni una mierda de lo que el niño dijo. Yo lo entendí más o menos, así que le dije a Valt lo que el niño le dijo.

Empezaron a hablar y a discutir, usandome como si fuera la traductora.

El niño no creía que Valt en serio huboera sido reclutado por el BC Sol, así que salió corriendo con Valtryek en manos. Lo perseguimos.

-Por cierto, soy Kitt. Es un gusto, tortugas- se presentó mientras corriamos.

-¿Qué dijo?

-El muy creido se acaba de presentar. Dice que se llama Kitt y nos llamo tortugas- dije molesta acelerando el paso.

Fue entonces que Kitt se detuvo frente a una arena, y nosotros detrás de el.

-Pense que te gustaría ver donde se reunen los bladers de la ciudad- le traduje a Valt -el chico de las franjas es Pablo. Es uno de los mejores del vecindario. Veamos si eres la mitad de lo grandioso que dices que eres- finalizó Kitt ofreciendole su bey de vuelta.

Valt apenas iba a enfrentarse a ese tal Pablo cuando alguien se le adelanto.

-A un lado, niños. Es mi turno.