El diario

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____ Shirosagi

Cuando volví a España me vi envuelta de felicitaciones por parte de todos. Por cada calle por la que pasaba me encontraba a algún fanático que quería mi autógrafo o una fotografía conmigo. Se veían orgullosos de mi, y ni siquiera se porqué se emocionan tanto. Creo incluso que se les olvidó que soy japonesa, no española.

Pero aún así no me negué a nada. Incluso era agradable recibir tanto aprecio por parte de los demás. Gente que ni siquiera te conoce pero que te quiere como eres. Que se alegra por tus logros. Me gustó bastante, pero no podía sacarme de la cabeza que esto debió ser por Silas... Silas...

Cuando Silas murió Chris dejó su habitación sola, como si fuera un santuario. Incluso reubicó a Cuza. Según ella era para preservar su memoria. Genial, ahora quiero ir a ver que hay en el cuarto vacío.

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Es de noche, y me encuentro vagando por los pasillos del BC Sol de la forma más cautelosa que puedo. No quiero despertar a nadie. Para ayudarme a ver traigo una vela, pues una lámpara alumbraría demasiado.

Finalmente llegué a la puerta de lo que alguna vez fue el cuarto de mi amigo difunto. Cuando abrí la puerta me sorprendí de ver que todo estaba en su lugar, tal y como yo lo recordaba.

Cabe destacar que Silas y yo eramos muy buenos amigos, y el llegó a invitarme a pasar el rato, por lo que se bien como se ve su cuarto. Una vez incluso me lo dejó encargado porque los niños se habían estado metiendo cuando el no estaba, y desordenaban todo.

Di unos pasos dentro, dudosa, mientras cerrada la puerta detrás mío. El ambiente es frío, pero no desagradable. Era incluso acogedor.

Vi los muebles, la cama, el buró, hasta que finalmente mi vista se clavó en algo: un libro. Por alguna razón llamaba mi atención, y es que a veces veía que Silas escribía en él.

Lo tomé y vi la pasta. Decía en letras gastadas "Diario". Lo abrí y vi la fecha de la primera entrada. Hace ocho años. Cuando Silas tenía cinco.

Entrada 1

Estoy emocionado. Mamá y papá me regalaron este diario y me dijeron que podía escribir lo que me pasara diariamente. Además, mañana acompañaré a mis papás a Estados Unidos. Me dijeron que me quieren enseñar algo del negocio familiar.

Pasé la hoja.

Entrada 2

Estoy aburrido. Llevamos esperando varias horas fuera de una casa grande acá en América. Mis papás me dijeron que iban a darle un regalo al dueño de la casa. Justamente se acaba de sonar por la ventana. Acabo de ver sus ojos turquesas, pero creo que no estaba feliz de vernos fuera de su casa.

Entrada 3

Cuando las luces se apagaron mamá y papá me pidieron que trepara por la pared hasta una ventana que estaba arriba de todo. Ahora que abrí la ventana y todos entramos puedo escribir lo que pasó. Es una habitación, y en la cama están dormidos un hombre de cabello tricolor abrazado a un niño albino como de mi edad. Mamá me acaba de pedir que deje de escribir un momento.

Pasé la hoja de nuevo, ahora con intriga.

Entrada 4

Todo por defenderteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora