Capitulo 17

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Narra Dulce

Veo como Christopher entra al despacho y se queda en shock al ver la escena. Mira el cuerpo sin vida que hay en el piso y su mirada vuelve a mi. 

Ruedo los ojos. Conociéndolo vendrán sus estúpidas preguntas. Él me mira como si fuese un monstruo.

Sí, un monstruo.

Se acerca al cadáver, se agacha y presiona dos dedos en su cuello para saber si aun sigue vivo. Se levanta y me mira con decepción y enojo. Lo miro con la cabeza en alto y la mirada fría. 

— ¿Qué hiciste Dulce?¿Por qué mataste a este pobre hombre? — me pregunta él desde la puerta levantando la voz. Lo miro seria. 

— No tengo porque darte explicaciones de lo que hago o dejo de hacer. — le digo enojada. Él me mira decepcionado de nuevo  desde la puerta y por un momento siento que me afecta, cuando iba a decir algo Renato interviene.

— Ella no fue quién lo mató. —  dicho esto Renato se dirige a la puerta dándole un pequeño reempujón a Christopher apartándolo. Le susurra pero logro escuchar. — Si la tratas mal, te dispararé y despues le daré tu cadaver a los caimanes. — después de decir esto se marcha, quedandonos solos Christopher, el cadáver, uno de mis peones y yo. Sonrio levemente, Renato siempre con su amenzas para cuidarme.

— Si no fuiste tú quien lo mató ¿Quien fue?¿Renato? — me pregunta él estresado. 

— Fui yo señor Uckerman, yo mate a mi compañero por un ataque de rabia. La doña solo disparó al aire. Pedro era uno de sus hombres de confianza y lo maté. — confiesa, Isaac. Uno de mis peones. 

— ¿Por qué lo mataste?¿Que hizo para merecer la muerte? —  le pregunta Christopher. Lo miro estudiandolo con la mirada.

— Se acostó con mi hermana pequeña, ella es menor de edad y ahora esta embarazada, solo es una niña de 15 años señor y él no queria hacerse cargo de la criatura, habló de mi hermana como si fuese una cuaquiera. — le explica Isaac a Christopher. Me enojo ante lo ultimo que ha dicho Isaac y decido hablar.

— Tu hermana también tiene culpa de esto, ella sabia perfectamente que Pedro era un maldito mujeriego y ella igual le abrió las piernas y dejo que se la cojiera, si está embarazada que se aguante y tenga al bastardo. Si es grandecita para abrirse que también lo sea para criar a ese mocoso. Tú sabes perfectamente que tu querida y pequeña hermana siempre le han gustado los hombres mas grandes que ella, y ha ido provocando a mas de uno. No es ninguna blanca palomita. — le digo enojada. Isaac me mira cabizbajo, sabiendo que lo que digo es cierto.

— ¿Qué hará conmigo Doña? Por favor perdóneme. Fue un ataque de irá y yo... — empieza a decir él. Pongo los ojos en blanco y lo interrumpo.

— Bien. Arreglaremos esto después, ahora lárgate y déjame en paz. Fuera. — le digo harta de él. Se marcha y me deja a solas con Christopher. Este me mira confuso.

— Yo escuché un disparo ¿Ibas a matarlo tú o Renato? —  me pregunta. Yo pongo los ojos en blanco y lo miro seriamente.

— Si Renato o yo quisieramos matarlo, ya lo hubiesemos hecho. Solo lo asustamos. Deja ya el drama y dime que haces aqui. — le digo ya evadiendo el tema. 

— Esta bien, no quieres hablar del tema, lo entiendo. Vine a felicitarte, se que mañana es tu cumpleaños. Pero te felicito antes por si acaso. Felicidades. — me dice y mi rostro se vuelve sombrío. Odio el dia de mi cumpleaños. Un año mas de vida y un año mas de tormento. 

Un año mas que no soy feliz. Un año mas de todo. Un año mas de infierno.Un año mas de dolor. Un año mas con mis demonios. Un año mas....

— ¿Quien demonios te dijo que mañana es mi cumpleaños? Detesto este dia. — le digo enojada. Él se hace el desentendido y no dice quien fue. Debo suponer que habrá sido o una de mis hermanas o la chismosa de mi nana. 

Irresistible TentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora