Capítulo 42

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Narra Christopher

Toco y toco la puerta sin parar. Le doy golpes no muy fuertes para que me abra pero no lo hace. Por un momento la escuché gritar y llorar.

Estuvimos apunto de hacerlo, ella quiso intentarlo pero el recuerdo de lo que le sucedió años atrás la persigue, su pasado la atormenta, esos desgraciados aun siguen en su cabeza, sus demonios volvieron a ganarle la batalla.

Se encerró y no supe más. Me ha parecido escuchar algo romperse pero no estoy seguro. Tal vez ha tenido un ataque de irá y ha lanzado algo contra el piso.

Ya no se le escucha llorar, hay silencio dentro del baño ¿Qué está pasando por su cabeza?¿Se habrá calmado ya?¿Debería llamar a Eustaquia?

— ¡Dulce, ábreme la puerta por favor!¡Si quieres me voy a otra habitación pero abreme la puerta!¡Necesito ver que estas bien! — le grito empezando a preocuparme un poco mas por su silencio.

Volteo la cara y pongo la oreja derecha en la puerta para escuchar algo pero es inútil. Esta en silencio y no escucho nada.

De repente Renato entra en la habitación por mis gritos y me mira confuso y a la vez preocupado. Eustaquia entra detrás de él con la misma expresión en su rostro.

— ¿Que pasa?¿Porque los gritos?¿Que le has hecho? — me recrimina Renato tenso.

Me molesto.

— No le he hecho nada sin su permiso. Ella quiso intentar hacerlo conmigo pero sus demonios la han vuelto a atormentar. Se encerró en el baño, la he escuchado llorar, romper algo y quedarse en silencio. Nada más. — le explico preocupado.

Se queda pensativo mirando a Eustaquia, de repente abren los ojos alarmados como recordándo algo a la vez.

— ¡Abre esa puerta rápido! — le grita Eustaquia a Renato alterada. Este intenta tirarla abajo. Ella me mira a mi después. — ¿Has escuchado si ha abierto el agua de la bañera? Es importante saberlo. — me pregunta ella.

Asiento.

— Creo que si. He escuchado agua. — le respondo inmediatamente recordando el sonido del agua caer.

Ella abre los ojos aun más alarmada y mira con pánico a Renato. Este al instante da una fuerte patada a la puerta tumbandola.

Entramos y me encuentro con la peor escena que han visto mis ojos. Ella con las venas cortadas, sangrando, pálida como si estuviese muerta, las marcas de sus lagrimas en su bello rostro.

Ha intentado matarse. Suicidarse ¿Por que?

Renato corre hacia ella como alma que lleva el diablo. Arranca dos trozos de su camisa con fuerza y le venda cada muñeca tapandole los cortes.

Eustaquia llora. Renato la carga y se la lleva del baño, lo seguimos, salimos fuera de la casa y la sube a su auto. Entro junto a Eustaquia sin pedir permiso a nadie y vamos rumbo al hospital por pura lógica.

Ella debe estar bien, tiene que ponerse bien, no puede ser que quiera morir a estas alturas.

*****

Tres horas llevamos esperando a que nos den noticias. Tres horas estando Eustaquia, Renato y yo en silencio. Hemos avisado a los demás pero por seguridad es mejor que no vengan al hospital.

Renato tiene custodiado el hospital entero. Hay hombres por todas partes, armados hasta los dientes. Sea quien sea el enemigo de Dulce debe ser muy importante y peligroso para tener tanta seguridad.

Recuerdo como se puso cuando la toqué, su llanto desgarrador, su grito de terror, como temblaba de miedo, como si pensará que yo la lastimaria como esos desgraciados.

Irresistible TentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora