Capítulo 40
-Amor- oigo susurrar a Harry mientras abro perezosamente los ojos. –Amor, ve a ducharte, puede que Helena llegue en cualquier momento- pide de nuevo.
-V…voy- digo con voz ronca. Bostezo y me estiro para sacar la pereza lejos de mí, me siento en la orilla de la cama y me quedo mirando a la nada, soñolienta y distraída.
-Parece que perdiste tu alma- oigo reírse a Harry.
-¿Huh?- no logro que mi cerebro coordine las palabras ni procese la voz de Harry.
-Que parece que perdiste tu alma, llevas sentada mirando a la nada casi cinco minutos- se ríe. –Me asustas bebe- se burla de nuevo y se sienta a mi lado.
-Lo siento- trato de reír, pero estoy muy adormecida aun.
-Por qué no vamos a tú habitación y te das una ducha- propone mientras se pone de pie.
-Creo que una ducha caliente estaría bien- asiento, mi cerebro comienza a trabajar de nuevo, lento, pero por lo menos trabaja. Me pongo de pie y camino hasta la puerta.
-¡Hey! ¿A dónde vas?- Harry corre detrás de mí y su mano toma mi codo deteniéndome.
-A mi habitación- me rio confundida.
-¿Desnuda?- pregunta mirándome el cuerpo con una sonrisa de oreja a oreja. Incrédula miro mi cuerpo de arriba hacia abajo y compruebo que Harry dice la verdad.
-¡Dios!- me rio avergonzada y corro al baño de Harry, necesito ocultar mi cuerpo desnudo.
-Espera, ¿Por qué te escondes?- lo oigo perseguirme pero cierro la puerta del baño.
-¡Me traes mi ropa, por favor!- me rio, ahora estoy a salvo de su lujuriosa mirada.
-¡Amor, no puede ser enserio!- lo oigo reírse.
-Harry, por favor- le pido riéndome.
-Vale, espera- dice y lo oigo caminar por la habitación, debe estar en busca de mi ropa. No sé por qué estoy tan dormida aun, debe ser porque la cama de Harry es realmente increíble y deliciosamente cómoda, me encanta, es tan suave, tan cálida, y además huele a él. Dormiría el resto de mi vida en esa cama si fuera posible, claro, siempre y cuando Harry estuviese allí conmigo.
-Toma- su voz disipa mis pensamientos y camino hasta la puerta del baño para abrirla, la abro solo un poco, lo suficiente para poder tomar la ropa. Harry me da la ropa y yo la tomo, justo en ese instante él empuja la puerta y entra al baño.
-¡Harry!- chillo sorprendida. La ropa cae al suelo.
-¿Por qué te escondes?- dice con su ya familiar sonrisa picara mientras me empuja suavemente contra la pared de baldosa del pequeño baño.
-Ya sabes- digo con la respiración entrecortada.
-Me encantas, cada parte de tu ser- ahora susurra, pega su cuerpo semidesnudo al mío. Su pecho desnudo se presiona contra el mío, sus grandes y suaves manos se aferran a mi cintura y me aprieta las caderas, no duele, por el contrario, se siente muy bien.
-Eres un… tramposo- trato de dar coherencia a mis palabras, la cercanía de Harry nunca me deja pensar con claridad.
-El tramposo que amas- me recuerda sonriente, se inclina y rosa suavemente mis labios en un delicado beso, retira su rostro del mío pero su cuerpo sigue en la misma posición. Sus ojos verdes me miran con deseo, amor, y a la vez tanta ternura que casi me derrito en ellos.
-Te amo tanto- ahora pongo mis manos en su cuello, con una de ellas juego con la parte baja de su rizado cabello, me encanta.
-Tú no te imaginas, ni siquiera la mitad de lo que yo te amo- besa suavemente mi frente, luego da otro pequeño beso sobre mi cabello. Bajo una de mis manos por su espalda, siento cada pequeño detalle de ella, sus marcados músculos que ha estado desarrollando más últimamente al ir al gimnasio.
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ONLY YOU -Sin Editar-
FanfictionAnna Jonhson es una joven romántica y soñadora de dieciocho años, cuyo sueño siempre fue y ha sido entrar a la universidad. Ha llevado dieciocho años de una vida tranquila y responsable, de inocencia y fantasía literaria, pero qué pasa cuan...