En los ojos de la bestia ® [01]

Capítulo 51.

YULIMA TYLER.

Myke lo ha dejado todo aquí, hasta su móvil, últimamente no se despegaba de él por si ocurría algo. De repente recibe una llamada de Janet, me sorprende y pienso que puede ser Kendo.

LLAMADA TELEFÓNICA.

— Menos mal, creía que habías cometido una locura con la dirección que te di.

— ¿Cuál dirección Janet? —Pregunto. Se queda callada— ¡Janet, bestia ha desaparecido, dime de qué dirección hablas!

— Me pidió la dirección de Jack, yo no pude negarme.

¿Jack? ¿Qué tiene qué ver Jack en todo esto?

— Dile a Kendo que venga en este momento a recogerme y me lleve a casa de Jack.

— Pero..

— ¡Ya! —Grito.

CUELGO LA LLAMADA.

Quince minutos después Kendo envía un mensaje al móvil de Myke avisándome que está abajo esperando. Luz insiste en venir y yo por falta de tiempo acepto.

— Dios mío. —Susurra— Que no haya cometido una locura.

— ¿Por qué a casa de Jack? ¿Jack le dijo algo? —Le pregunto a Kendo. Supongo que siendo su mejor amigo sabrá algo más.

— Lo único que se es que me llamó y pidió la dirección de ese chico, yo también creo que ha ocurrido algo que tú no sabes.

— Acelera, bestia cuando se enfada pierde totalmente el control.

Él me obedece, conduce lo más rápido que puede pero el tráfico lo frena cada dos por tres impidiéndole el paso.

MYKE WALKER.

Estoy apunto de apretar el gatillo pero vuelvo a escuchar un golpe que proviene de arriba.

— ¿De qué me serviría matarte sin qué mi querido hermano Dylan lo vea?

— No, no metas a Jack en esto. —Suplica Belinda.

— Dylan. —Recalco— ¿También has olvidado el verdadero nombre de tu hijo?

— Dylan ya no existe. Ahora somos otras personas, ya no tenemos nada que ver con el pasado.

— Os habéis dejado un pequeño detalle de vuestro pasado ¡Madre! —Subo la voz.

Connor niega con la cabeza.

— No la llames así.

— ¿Por qué no padre? —Pregunto haciéndolo callar— Habéis querido borrar todo vuestro pasado, habéis querido olvidar que asesinasteis a un niño inocente que solo necesitaba sentirse querido.

— No eras un niño inocente ¡Eras un monstruo! —Grita— Si quieres matarme hazlo ya.

Subo las escaleras acompañado de Connor. Lo obligo abrirle la puerta a mi hermano y él cuando me ve se queda bastante sorprendido.

— ¿Qué significa esto? —Pregunta.

— Significa que no solo te rompí la nariz. —Respondo— También soy tu hermano mayor.

Él queda boquiabierto con los ojos abiertos como platos y espera una negación por parte de Connor. Volvemos al salón, esta vez como una familia completa.

— ¿Cómo te ha dicho este hombre qué se llama?

— Héctor. —Responde— Lo que no entiendo es porqué papá te llamó Belinda. —Le dice a nuestra madre— lo escuché.