Capítulo 14

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Capítulo 14:Cuestiones del corazón14 de junio

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Capítulo 14:
Cuestiones del corazón
14 de junio

11:36 am

Red heart, a new scar
I fall in love with the wrong guy
Fast beat, fresh fear
Tell me how to escape from his eyes

El jardín de rosas se había transformado en el lugar favorito de Rubí, donde dejaba escapar sus emociones a través de canciones. Esa vez, estaba llena de frustración. Observó las palabras que escribio sin siquiera pensarlo y no pudo hacer más que soltar una larga respiración. Luego, desvió su mirada hasta las flores frente a ella, muy consciente de que su mente estaba enfocada en una personaben particular...

¡Maldición! ¡Eso no podía pasarle a ella!

Su corazón no dejaba de latir y su cerebro no podía desviar sus pensamientos. No importaba cuanto se concentrara en la melodía que poco a poco construia en el pentagrama, o en el color rojo de las rosas, él siempre volvia a su mente ¿Por qué se había vuelto un intruso de repente?

—¡Hola, hola! —exclamó una voz que ella conocía muy bien —. Traje un par de gaseosas de uva y muchas ganas de escuchar tus canciones.

—Ya te he dicho que no canto en público, Cris —le recordó Rubí, mientras la pelirroja se sentaba a su lado en el banco.

—Seguro tienes una voz preciosa, ¿por qué se la ocultas al mundo?

—Porque el mundo no me ha pedido mostrarla. Ahora, ¿seguirás pidiendo cosas imposibles, o me darás mi gaseosa?

—Algún día, el mundo te lo pedirá. No creo que sea tan estúpido como para pedirte que te calles por siempre.

Rubí se encogió de hombros al tiempo en el que tomó su gaseosa. Luego de esa primera vez en la que se encontraron por error, se había vuelto costumbre para ambas reunirse en las tardes en el jardín de rosas del C.A. Mientras que la mayor escribía canciones, Cristal charlaba sin cesar y rogaba por escuchar algunas de las melodías que se componían frente a sus ojos.

Rubí jamás se las mostraría, no si eso implicaba que ella debía cantar. Sin embargo, descubrió que la compañia de la protegida de su cuñada no era del todo desagradable, así que no le pidió que se fuera esa vez...tampoco lo había hecho las veces siguientes.

Además, le gustaban las gaseosas de uva que traía. No se podía quejar.

—Y bien —comenzó Cris, con una gran sonrisa —, ¿cómo va tu canción?

—Acaba de dar un giro inesperado —confesó Rubí, frunciendo sus labios en dirección a su cuaderno —. No creí que terminaría hablando de amor en esta canción en particular...

Rosas ||P.E #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora