Silene Osbone es tan perfecta como una rosa...
Cristal Milestone admira tanto a Silene que solo quiere ser igual a ella...
Dicen que las rosas son las flores más hermosas del prado, las que todos ven. También dicen que son perfectas por su color, ar...
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Dicen por ahí que no hay flor más hermosa que una rosa roja de dulce aroma, potente color, y belleza inigualable...¿Quién pondría en duda la perfección de un retoño como ese?
Si las personas fueran flores, Silene Osbone sería una roja: bella, asombrosa, inconfundible...perfecta. Ella moldeó su vida para convertirse en la chica que todos ansían ser. Pero ser una rosa va más allá de tener pétalos preciosos; ser ella significa tener espinas listas para lastimar.
Por otro lado, Cristal Milestone tan solo es un retoño...Por ahora. Su inocencia es el único color que tienen sus pétalos, pero su deseo de ser como Silene podría llegar a cambiar eso.
Dicen que las rosas son perfectas, y a Silene no le da miedo arrastrar a otra flor hacia el turbio camino de la perfección. Pero, ¿qué ocurrirá cuando las circunstancias jueguen en su contra? ¿Qué les pasará a ambas cuando ser una rosa no sea suficiente?
Esta es una historia sobre perfección, pero no es perfecta. Así que ten cuidado, tú que estás leyendo esto, porque te advierto que esto no se trata de las rosas...Se trata de las espinas.
