Capítulo 30:
La pelea
27 de junio2:11pm
—Esto es absurdo —bufó Silene, rodando sus ojos.
—¿Absurdo? Lo único absurdo aquí es que te apropiaras del trabajo de dos de las personas que más amo solo para sentirte superior —soltó Caleb, más molesto de lo que creyó que podría estarlo —. Ya todos te creen una princesa, Silene ¿Para qué necesitabas más atención?
—¿De verdad crees que pensé que las canciones eran para mi por eso? ¿Porque quería atención?
¿Y por qué otra cosa sería? Es decir, las rosas siempre quieren ser vistas, que las alaben, ¿no era eso lo que quería ella? ¿Que la envidiaran y adoraran?
Caleb y Silene contaban con una larga relación, una que te haría creer que se conocían a la perfección. Pero lo cierto es que ahí, frente a frente y más enojados que nunca, solo eran dos extraños. La perfección que tanto habían visto en el otro se estaba manchando con pequeñas salpicaduras de realidad, y Sile pudo notarlo. Le dolió que él la conociera tan poco como para creer que lo único que buscó fue sentirse superior.
Ahí, donde él veía a una princesa pretenciosa y orgullosa, también había una damisela cuyo corazón era más frágil que la coraza que le mostraba al mundo.
—No lo hice para sentirme superior, grandísimo idiota —le reclamó ella, sintiendo que en su garganta nacía un nudo que amenazaba con dejarla sin habla. Aún se veía amenazante, no iba a dejar caer su escudo, ni siquiera por Caleb —. Tampoco lo hice por atención. Sí, me gustaba presumir que mi novio, que estaba en el otro lado del mundo, sentía algo por mi a pesar de la distancia y que por eso escribía esas canciones, pero no lo hacía para que otros me alabaran. Hay miles de formas para en la que puedo conseguir la atención de otros ¿Por qué perdería el tiempo buscándola con tus canciones cuando puedo hacerlo por mi cuenta?
—¿Entonces qué? —preguntó él, sin entender —. ¿Por qué mierdas sacaste la conclusión de que las canciones eran para ti?
—¡Porque quise creer que te importaba lo suficiente como para que hacer algo por mi! ¡Porque pensé que eras mejor que el resto! Nadie hace nada por mi, creí que el hombre que dice que me ama era la excepción...
Caleb la miró mientras procesaba sus palabras. Las repetía lentamente en su mente, con demasiada precaución para evitar explotar en ese momento. Silene molesta se veía mucho más intimidante que la Silene normal. Sus mejillas estaban sonrojadas, sus labios fruncidos, y sus ojos café estaban mucho más oscuros, más feroces. Era como si su mirada estuviese adaptada para convertirse en un par de dagas capaces de atravesar piel, huesos, y alma...
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Rosas ||P.E #3
Teen FictionSilene Osbone es tan perfecta como una rosa... Cristal Milestone admira tanto a Silene que solo quiere ser igual a ella... Dicen que las rosas son las flores más hermosas del prado, las que todos ven. También dicen que son perfectas por su color, ar...