Anne Of The Present

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Anne.

—Es una mala idea. —susurraba en mi dirección Diana mientras el Señor Phillips terminaba de escribir en la pizarra —Una muy, pero muy mala idea.

Dijo que era una excelente idea y que hay que hacerlo —respondía la Mini Anne encargada de los planes en mi cabeza.

Sonreí. —Hay que hacerlo.

—¿Pero cómo dirás después cómo conseguiste esa información, Anne? —el Profesor volteó para mirar que todos permanecieramos como esculturas, así que nos mantuvimos en silencio unos segundos.

En el momento en el que volvió a escribir de espaldas otra vez, Diana se acercó más a mí y susurró puntualizando en la última palabra: —Sacarás esas pruebas de forma ilegítima. No, no deberías hacerlo, podríamos hablar con el director y contarle la situación.

—Lo tengo cubierto...o algo así. Lo sacaré sin que me vea y lo dejaré sobre el escritorio del director sin que me vea también. Fácil y sencillo. —mi amiga no parecía muy segura– Es por Cole, Diana. Él se lo ha contado miles de veces al director pero no le cree, y tampoco hace nada por ayudarlo. Podría perder la beca, no puedo no hacer nada.

Suspiró, rindiéndose. —¿Y cómo lo haremos?

—Solo necesito saber en qué horario no tiene clases y seguramente guarda sus cosas en los casilleros. Espera, ¿dijiste haremos?

—Haremos. —asintió dándome la mano— Y ya sé a quién debo consultarle esa información.

Prissy Andrews era bella de una forma realmente tradicional pero a la vez sumamente romántica. Su cabello estaba recogido con una trenza que simulaba un corona completa y dos rizos caían a los lados de su rostro de porcelana. No tenía ni una pisca de maquillaje igual que yo, y vestía un suéter blanco que ponía dentro de unos pantalones de tela tiro alto rosa palo con un moño en el frente, que la hacía lucir como una mujer madura y segura.

No entendía como ese monumento se había creado en el mismo estómago que Billy.

—Diana. –sonrió Prissy guardando un cuaderno en su bolso con una delicadeza similar pero mucho más enérgica de la que poseía mi amiga junto a mí—. Hace mucho no te veía.

—He estado un tanto ocupada por los exámenes así he estado desaparecida. —respondió mi amiga y luego me señaló: —Ella es Anne, la nueva integrante de la familia de los Cuthbert y mi amiga.

—Y la chica a la que mi hermano molestó. —bufó y me miró con culpa: —Lo oí, perdón por eso. Mi hermano tiende a ser...bueno, sumamante odioso.

Asentí. —No te preocupes, ya está olvidado.

—Si sucede otra vez jurame que le harás tragar esa tierra. Si tienes problemas después, yo te cubro.

Sonreí en su dirección y me devolvió la sonrisa. —Tenlo por seguro.

—Bueno...¿qué las tiene por aquí? —preguntó luego de saludar a unas personas que pasaron por nuestro lado y le hablaron animosamente.

—Queríamos preguntarte sobre las clases extracurriculares que estás tomando con el profesor Phillips. —respondió Diana y aunque yo no entendía que trataba de hacer asentí dándole la razón —Nos están complicando bastante las ecuaciones de segundo grado y queríamos ver a qué hora las hacía.

—Bueno... —dudó unos segundos y se apartó un rizo con suavidad— No sé si les hace a todos, yo tengo que estudiar para la prueba de selección a Queens y por eso me hizo el favor, pero podrían preguntarle.