4. Una sorpresa

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3 de marzo del 2014

¿Pensabas que después de un asesinato tu colegio estaría vacío? Bueno yo estuve completamente equivocado. Tuve que caminar treinta minutos bajo una tormenta no porque haya un tráfico que hará que mi padre llegué tarde al trabajo, simplemente me insistió a gritos que se saliera del carro y que estaba harto de llevarme al colegio.

«Para el colmo a papá no le dio la gana de dejarme más cerca del colegio, prefiere que su hijo este media hora bajo una tormenta y sin desayuno»

De una semana a otra la cantidad de estudiantes había aumentado considerablemente y no tiene ningún puto sentido ¿Acaso no se enteraron de que mataron a varios estudiantes? Nadie en su sano juicio vendría a dar clases hasta que encuentren al responsable. Estaba seguro de que los estudiantes no eran panameños, porque físicamente era evidente.

Después de pasar el jardín de la entrada bajo la lluvia pude ver que Juan estaba sentado en los escalones casi durmiendo. Me pareció extraño no ver a Sebas junto a Juan.

—¿Por qué hay tantas personas de repente? —Pregunté mientras escurría la maleta

Juan alzó la mirada soñolienta, tenía unas grandes ojeras y sus ojos estaban casi cerrados. Le sacudí con fuerza para que se despertara.

—Ah ¿Qué paso? Si, son los nuevos estudiantes extranjeros de los que hablo Sebas, pero nosotros no le prestamos mucha atención cuando lo menciono—Respondió Juan mientras se ponía de pie

«¿Cuándo dice algo interesante ese inepto?»

—Claro nunca le prestamos mucha atención a lo que dice...pobrecito—Respondí

—¿Por qué estás empapado hermano? —Preguntó Juan intentando no dormirse estando de pie

—A mi padre no le ha dado la gana de dejarme cerca para que al menos no me mojé tanto—

—¿El tío Alaric? La verdad es que no entiendo porque es así contigo...pensaba que con la ausencia de Amelia mejorarían las cosas, pero al parecer me equivoqué—Comentó Juan

Me levanté la manga de mi suéter dejando ver varios moretones en mi brazo. Juan abrió los ojos como platos al verlos.

—Cielos Damián...eso es mucho peor—

«¿Mucho peor? Estas cosas son algo rutinario en mi vida, nada sorprendente»

—La familia es lo más importante—Dije con sarcasmo

Juan se mantuvo en silencio, de seguro no sabía que decir y lo entiendo. Para él mis padres eran su segunda figura parental y para mí...

—Deberías ir a ver el tablero de anuncios escolares, Sebas lo leyó y al despertarme me pidió que te dijera que lo vieras—Dijo Juan cambiando el tema

—No creo que tenga algo importante—Respliqué bostezando

—Si tuvieras idea...—Comentó Juan

No perdí el tiempo y me dirigí a la tabla de anuncios escolares, subí los escalones con velocidad y entré a mi "querida" escuela. El pasillo estaba tan lleno que era casi imposible caminar sin chocar con otro estudiante, la gigantesca tabla de anuncios estaba rodeada por estudiantes de años superiores, yo siempre la leía a lo lejos, pero soy tan bajo que todos me cubren el anuncio. Pasé entre los estudiantes con la mayor educación posible. Entonces vi el famoso anuncio:

"Queridos estudiantes que habitan en nuestro centro educativo, hoy queremos darles noticias importantes acerca del futuro del colegio.

La primera es el cambio de horario de clases, debido al incidente de la semana pasada se ha hecho una reunión con los profesores y padres de familia para que puedan seguir con su educación y garantizar su seguridad. Los oficiales seguirán con sus investigaciones e interrogarán a estudiantes y profesores.

El Fragmento del CreadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora