El Fragmento del Creador

5. Schwester

12 De octubre del 2013

—¡Ya pronto te irás! Por favor has una gran fiesta—Le rogué a mi hermana

Sus grandes ojos ámbar se abrieron como platos, eso significaba que se le había ocurrido algo o ya tramaba algo. Lo sabía porque cuando esos grandes ojos se abrían ella ya había planeado su siguiente movimiento.

—Bueno vater y mutter no estarán en casa el día de mi cumpleaños por trabajo y aún tengo geld... ¡Ist ein perfekt zeit! —Respondió emocionada

Lo sabía, nosotros no nos podemos mentir entre nosotros es imposible porque siempre sabremos si mentimos. Cuando Amelia miente es incapaz de sostenerte una mirada fija y bajo estrés su meñique tiembla. Nuestros padres están tan ocupados en sus cosas que ni saben de nuestros tick nerviosos y estoy agradecido por ello.

—¿Crees que no se darán cuenta si hicimos una fiesta? Nos castigaran de por vida, aunque te vayas a Londres de seguro te tendrían en una cárcel—Le dije nervioso

—¡Bitte bruder! Solo tenemos que limpiar la hause y ordenarla antes que lleguen, para nosotros será pan comido—Respondió Amelia pegando brincos en el sillón de un lado a otro

Para ser una chica que casi cumple dieciséis sigue siendo muy infantil, jamás entendí porque tenía tantos admiradores y acosadores. La idea de la fiesta de cumpleaños no era mala, sé que yo mismo lo sugerí hace unos momentos, pero me acabo de arrepentir...

—Invitare a: Josefina, Valeria, Sara y ¡Chandler! ­—Gritó Amelia emocionada

—No invites a tu novio, es muy raro y espantará a todos—

Amelia soltó un suspiro, le molesto que hablara mal de su novio, no entiendo que le ve a ese fracasado. Debería salir con alguien millonario o algún deportista famoso.

—¡Chandler es un buen tipo! ¡Y además le caes bien! No entiendo porque siempre hablas scheisse de él—Respondió Amelia furiosa

—Bueno relájate ¿sí? ¿Puedo invitar a mis amigos? —Pregunté

—¡Por supuesto! Son tus amigos por lo tanto para mí siempre serán bienvenidos y ya sabes que Juan ist ein adoptive bruder—

Los ojos ámbar de mi hermana se clavaron en el espejo que estaba al lado del televisor, ella salió disparada hacia este, se observó con cuidado durante varios minutos. Sé acaricio el cabello castaño con delicadeza.

—¿Crees que necesito un corte de cabello? A lo mejor también le puedo poner un nuevo color —Me preguntó ella

—¿Qué te dio? ¿Por qué piensas en eso de repente? Ay no me digas, quieres impresionar a ese tipo...mi querida Schwester, no puedes ser tan ridícula —Repliqué

Amelia me observo de arriba a abajo, una sonrisa se le dibujo en el rostro y me daba una idea de lo que iba a decir y antes de escuchar su respuesta hablé primero.

—¿No te parece suficiente con la cantidad de personas que te acosan? Tienes a toda la escuela detrás de ti y ya te has topado con varios enfermitos—

El semblante de mi hermana paso de irradiar alegría a uno de disgusto, debí tener más tacto al mencionar ese tema. Mi hermana mayor a tenido unas situaciones demasiado desagradables, algunas que es mejor ni recordárselas.

—Bueno me gustaría creer que a Chandler no le atraigo solamente por mi físico y que sus avances no son para tenerme como trofeo en la schule—Replicó Amelia mientras se alejaba del espejo y se lanzaba al sillón suspirando frustrada.

—Mira debí tener más tacto con eso último, pero al final he visto una gran parte de los enfermos que se te acercan, me preocupa que algún día bajes la guardia y te topes con un Ted Bundy. La decisión de borrar tus redes sociales porque los hombres te mandan pura mierda es una de las mejores que has tomado, ya no estas estresada cada vez que abres los mensajes de Instagram con miedo de abrir una foto de algo que no quieres ver—Dije

Amelia guiño el ojo para asentir.

—La verdad es que tienes razón, pequeño bruder, no debería bajar la guardia porque Chandler parece tener decencia. Mira nuestro propio padre como te trata y como le fue infiel a nuestra madre hace unos años— Replicó jalándose un mechón con fuerza

«Todavía no deja ir eso...han pasado años y sigue molesta con eso»

—¿Cómo pudo hacer eso? Sobre todo, cuando la tante Jessica había fallecido recientemente, debimos haber apoyado a Juan con su luto. ¡Pero en lugar de eso nos la pasamos discutiendo en casa porque a nuestro padre se le ocurrió tener una aventura con una ramera cualquiera! Todavía recuerdo el apellido de los regalos...Luxheile—Bramó Amelia temblando de la ira

No tenía idea de que responderle, no solo porque soy incapaz de recordar el evento para tener el panorama objetivo, sino que no tengo como defender a mi padre. Una de las razones por las cuales sé que a mi hermana le enfurece lo que hizo es porque pese a despertarme con un reinicio todos los días siempre tengo algún recuerdo de ella colérica por la infidelidad de nuestro padre.

—¡Verdammtes hure! Espero que si no ha muerto tenga una muerte bien dolorosa y lenta—Gritó haciéndome pegar un brinco de la impresión

Ella respiro hondo y se acomodó su cabello en una cola.

—Entchuldigung, no debí sacar ese tema de nuevo. Regresando al tema de arreglarse ¿Nunca te has preocupado por tu apariencia cuando te gusta una chica? De seguro debe haber una chica de tu año que te parezca linda—Interrogó Amelia con unos ojos pícaros

Ay...de seguro piensa que quiero invitar a alguien y que puse como excusa si puedo invitar a mis amigos, Amelia te quiero, pero eres tonta. Ella comenzó a dibujar corazones con sus manos e hizo muecas tontas con su cara...Vamos se supone que eres la mayor.

—No me gusta nadie, ya deberías saber que solo tengo dos amigos y no me llevo muy bien con la gente del colegio—Le respondí molesto por las payasadas que hizo

Su expresión cambio, sus ojos irradiaban preocupación y una leve tristeza. Los dos sabemos que no me irá para nada bien cuando se vaya, tanto en el colegio como en casa. Ella me ayudaba bastante en ambas, pues los chicos de su año pensaban que tenían más oportunidades si me trataban bien, yo sabía que era falso, pero me ahorraba bastante estrés. Cuando se vaya estaré verdaderamente vulnerable, solo contra todos.

«Aunque fuera puro interés tenía de alguna manera protección, en el colegio y contra mis padres»

—Te llamaré todos los días para asegurarme de que estés bien ¿Das ist klar? —Dijo Amelia

—¿Lo prometes? —Le pregunté

—Das ist ein versprechen —Habló esbozando una leve sonrisa

Ella apagó el televisor, lo teníamos encendido desde hace horas y en realidad no estábamos viendo nada. Mañana teníamos colegio y nos teníamos que levantar temprano.

—Acabo de recordar algo ¿Cómo iremos al colegio si nuestros padres están afuera por negocios y el bus no pasa por acá? —Dije preocupado

—Por supuesto que yo conduciré —Respondió Amelia

—Pero no sabes manejar y no tienes licencia —Respondí asustado

Amelia solo sonrió con malicia.