Cap (2/2)
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—Bueno, creo que eso es todo— le dijo a Shasta quien lo observaba sentada en la última grada del porche.
Había colocado las últimas cosas en la parte trasera de su camioneta. El resto, lo más escencial junto con su motocicleta, estaba guardado en un pequeño remolque de mudanzas que había tenido que alquilar. Se suponía que viajaría ligero, pero al final lo "escencial" resultó ser más de lo que pensó. Ahora bien, lo presindible lo dejó guardado en un almacen de alquiler hasta que pudiera regresar a buscarlo. Lo que importaba era ponerse en marcha cuanto antes.
Hizo una mueca recordando que su madre y Lyn no habían estado demasiado felices cuando las llamó un par de días atrás para contarles que se estaba mudando a Nashville. Fue una charla un tanto incómoda que lo hizo sentir de nuevo como un adolescente.
*
—¿Y por qué no vienes aquí?— había dicho su mamá con el ceño fruncido a través de la pantalla de su portátil — No hay mejor lugar en el cual estar que con tu familia.—Lo sé, mamá— se rascó la nuca tratando de encontrar la mejor manera de no herir a sus sentimientos de mamá osa — Sabes que los amo, pero la verdad es que lo que necesito no está en Maine.
Era difícil explicarle que volver a casa significaba abrir la puerta a todos los recuerdos que eso conllevaba. Y sobre todo volver a casa significaba sentir que había un enorme vacío en su corazón, ese que estaba ahí desde que su padre murió. Sabía que debía enfrentarlo algún día, que para sanar necesitaba enfrentar la perdida, pero no podía hacerlo luego de lo que había pasado con Derek y Rick. Se sentía demasiado inestable.
—¿Y por qué te vas tan lejos?— Lyn hizo un puchero.— No es como que Boston estuviera a la vuelta de la esquina, pero te veiamos más amenudo.
—Hey, no será para siempre. Solo necesito un poco de tiempo para reorganizarme y redireccionar mi vida— Sabía que era un poco egoista teniendo en cuenta que Finn estaba fuera e irse tan lejos era dejarlas un poco a su suerte.
—Ah, pero juro que Deirick aparece por aquí voy a cortarle las pelotas— gruñó su hermana con una expresión fiera. Lyn había heredado los ojos azules de su padre y cuando se encendían con el calor de la protección, dejaban sin aliento al guitarrista.
—¡Lyn!— su madre parecía contrariada— no digas eso, los niños van a escucharte. Además como se te ocurre que vas a ponerte uno contra uno con un hombre del tamaño de Deirick. Eso puede ser peligroso.
—Ay mamá, no por nada tengo un esposo militar. Me ha enseñado a defenderme y sino, pues basta con ir por uno de los rifles que Finnick guarda en el cobertizo— sonrio maliciosa — podría tener a Deirick de rodillas en menos de un minuto.
No pudo evitarlo, se rio porque no dudaba en que su hermana podría cumplir tal cosa. Ella siempre fue de armas tomar, ahora más literalmente que antes. Pero el punto era que nunca jamás dejaba que nadie la doblegara y eso era algo que admiraba mucho de ella. Su hermana mayor siempre fue su heroina, tanto como lo era su madre.
*
Después de eso la plática fue más que nada Wes prometiendo que tendría cuidado, que se mantendría en contacto y que volvería a casa si las cosas en Nashville no funcionaban, sin excepciones. Así que con todo su corazón, esperaba que las cosas funcionaran lo suficiente como para averiguar que debía hacer con su vida de ahora en adelante.
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A Heartbreak Song© (Love & Music #1)
RomanceA veces es necesario romper un corazón para que vuelva a latir. . . Historia con contenido de temática gay. NO copias NO adaptaciones. Todos los derechos reservados.