Cambio de Roles

Italia

Alice
Si hay algo que odio aparte de mi padre, es la comida de avión. No debería ni siquiera de estar clasificada como comida, debería de ser ilegal la fabricación de esa "cosa".
En fin, estábamos en la primera clase del avión, yo en el pasillo y Nickolas en la ventana. Davide son despegaba sus ojos de mi, estaba literalmente a mi lado a excepción de unos asientos vacíos.

-¿Gusta algo de beber?- llega una azafata con un carrito lleno de envases de bebidas y vasos pequeños de plástico.

-Agua, porfavor- pido alegre.

Me sirve en el caos y me lo da con una servilleta color vino.-Para usted joven?

- Jugo- declara firme.

-¿De que lo desea?

-Manzana- contesta.-Con hielos....y un popote...y unos cacahuates Porfavor.

-Claro...- contesta no muy segura la azafata. Le da lo pedido y sigue adelante.

-Veo que eres muy especialito- me burlo de él.

-Me gustan las cosas a mi manera.

-Ya- asiento y toma mi bolso de la parte baja del asiento delantero y rebusco dentro uno de los libros para leer. "Memorias de una Geisha"

-Voy a dormir- dice mientras se acomoda en mi hombro y se cubre con la cobija que te daban dentro una bolsa de plástico irrompible.

-Está bien- contesto empezando a leer.

Seguí leyendo por unas dos horas, el libro era bastante bueno debo decir. Miré a mi izquierda para checar como estaba Davide, estaba en el quinto sueño roncando con un antifaz de seda para los ojos blanco con pelos bordeando este.
Reí y deje el libro en la mesa de mi asiento. Jalé un poco de la cobija de Nick y me acomodé con él, pero antes decido hacerle una pequeña broma.

•••
Nick
Me levanto a causa de la turbulencia y prendo la pantalla táctil de mi asiento, me meto en mapas y nos quedaban 5 minutos para descender. Estiro mi espalda y Alice seguía dormida, río y cepillo un poco su cabello.Al parecer eso la levanto haciéndola batir sus pestañas lentamente. Me miro y se ríe un poco.

-Ya llegamos- dije quitando la cobija y doblándola - Al fin, no soportaría estar encerrado en esto ni un minuto mas.

-De acuerdo, iré a levantar a Davide- dice levantándose y caminando entre los asientos.

••
Salimos por la puerta del avión y las azafatas se reían al despedirse de mi. Tengo encanto.
Caminamos por el pasillo tomando la mano de Alice que se distraía con cualquier cosa.

Llegamos a la fila de papeleo del aeropuerto. Todo mundo reía últimamente, la vida no es tan buena.-.-
Era el último en pasar, me había tocado un señor demasiado anciano con bigote lleno de canas al igual que sus descontroladas cejas.
Le di mi papeleo y pasaporte, miro la foto y luego me miró a mi. comparó la foto y al verdadero.

-Jóvenes estos días- niega suspirando dejando un sello en mi pasaporte.- Buen día.

No entendí pero salí, Davide me miró por primera vez y también rió, bueno esto es demasiado.

-Alice que le pasa a todos?- me acerco a ella pero retiene la respiración hasta no poder más y se ríe igualmente.

Suspiro y me cruzo de brazos molesto.

-¿Acabaron?- pregunto ofendido.

-Ya ya lo sabía yo-dice Davide- Sabía que te gustaban esas cosas.

-¿Qué?

-Alice...bien hecho- choca los 5 con Alice haciéndola saltar un poco.

-Alice...-gruño bajo.

-En mi defensa, te queda- recobra el aliento. Abre su bolso y saca un espejo me lo tiende y quedo horrorizado.
Sombra turquesa en mis ojos, blush naranja y labial rojo cereza.

Gran forma de ir a Italia.

Maratón 4/4