Recuerdo

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Recordaba todo perfectamente; el olor del hospital, los pequeños detalles, su baja y ronca voz diciendo incoherencias una y otra vez, su cambio radical de apariencia. Los sentimientos, las lágrimas de enojo y frustración, la daga enterrada en mi corazón por ella misma. Todo era un sueño, o más bien una pesadilla.

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Oxford, hace 5 años, casa de los Bennett. 8:30 pm

-Alicia- me llama mi madre mientras entra a mi habitación, llevaba un vestido café claro de anchos tirantes que le llegaba a la rodilla, una coleta perfectamente hecha y sus aretes de diamantes.

-¿Si ma?- me volteo dejando de hacer mi tarea de matemáticas.

- Es hora de dormir- empieza a apagar la luz de mi escritorio.

-Pero ma.. Sólo son las 8- refunfuño.

-A quien madruga..- empieza a decir.

-Dios le ayuda- refunfuño- ya sé- me bajo de la silla y me siento en mi enorme cama.

Me arropa bien y cepilla mi cabellera castaña con sus dedos.

-¿A qué hora llega papá?- pregunto.

Me mira un momento y luego suspira- No le sé, tarde, supongo.

Asiento y bostezo- Tengo tueño- digo como niña pequeña.

-Ves? Una madre lo sabe todo- reclama orgullosa. Besa mi frente- Todo estará bien.

Eso pensé haber oído antes de caer en las manos de Morfeo..

El choque de una cerámica me hace levantarme de un salto, miro y solo veo mi habitación con ausencia de luz, sollozos de mi madre se oyen desde su habitación.
Pongo mis pies en el helado suelo y me dirigí a la puerta, giro el pomo lentamente y miro por el pasillo.
Camino silenciosa a la habitación de mis padres donde se oían los sollozos.

Llego a la puerta y me detengo.

- ¿¡Así que me estabas engañando?!- ruge mi padre- Y con un estúpido diplomático!- tira algo al suelo que se rompe en pedazos-¿Creíste que no me daría cuenta? Evidencia aquí hay puta!

Mi madre solo solloza y se mantiene callada.

Retrocedo y regreso por donde vine.


Me levanté con ojos hinchados, porque papá golpeó a mamá?
Bajo las escaleras y veo sólo a mi padre leyendo el periódico con una taza humeante de café.

-¿Dónde está mamá?- pregunto acercándome a él, gran error.

Lanza la taza al suelo haciéndome algunos cortes en el pie.

-No menciones a esa perra desalmada! Se largó con su maldito amante! Mira!- me lanza furioso unas fotos de mamá con un hombre que desconocía.

-Te lo dejaré de la siguiente manera niñata- me toma del pelo jalándolo y tensándolo - Esa maldita se fue y te dejó, nunca te quiso, se embarazó para tener de donde sacar plata.

Me suelta se marcha. Lágrimas de odio aparecen por mis ojos, me abandonó...sabía que odiaba a papá, y aún así no me llevó con ella..porque?


Mi teléfono sonó. Habían sido 2 años desde que ella se fue, miré la pantalla y era un número desconocido.

-Bueno?- digo poniendo el celular en mi oído.

-¿Hablo con la señorita Alicia Bennett?- dice una mujer joven.

-Si, quién habla?

-Hablo desde el Hospital General de Londres- dice ella respetuosamente- Le llamamos para avisarle que su pariente Elena Lee se encuentra hospitalizada en nuestras instalaciones.

Me congelo en ese momento, estaba en mitad de la calle y todo mundo me chocaba hombro para moverme del camino.

-¿Porque...?- pregunto

-Tiene leucemia.- declara ella en el teléfono.


Estoy fuera de la puerta con una placa escrita con plumón.
310- Elena Lee.
Leo el nombre infinidad de veces quedando plasmado en mi mente.
Respiro y entro.
La veo acostada en la cama, con cosas conectadas a sus muñecas y antebrazos, un inaudible beep suena en la habitación.
Estaba leyendo algo, tenía ojeras en los ojos y su pelo había perdido brillo.
Azoto la puerta detrás mío y da un salto antes de mirarme. Hay odio en mi mirada y preocupación en la suya.

-¿Porque les diste mi número? Tu esposo debería de estar aquí, No yo- escupo haciendo puños mis manos.

- Vive con el-me ruega.

-¿El? Ja, no gracias- digo sarcástica.- Ni siquiera sé que hago aquí.- bufo.

-Porfavor...- murmura- Quédate..

La niña de hace tres años salió de mí, la veía frente a mi, mirándome con pena, tratando de convencerme de que estuviera con ella..


-Ma- digo entrando a la habitación - Te traje los libros que me pediste.- me siento en un banco junto a ella.

-Gracias- dice ronca y con voz baja.

Le di la bolsa donde venían los libros, cada día estaba mas demacrada que antes, había perdido la totalidad de su cabello, estaba pálida y sus ojeras eran enormes. Podía ver sus venas verdes y azules.

-Alicia- me llama. La miro y se veía sonriente- Gracias..

-No es nada- contesta sacando mi celular para ver la hora.

-Alicia..- me vuelve a llamar.

-¿Mande?- digo mirando mi celular.

-Te quiero..- me dice adolorida. El celular cae en mi regazo y la miro mal.- Lo siento..

No entendía que sucedía, pero algo dentro de mi se llenó. Algo que había estado hueco dentro de mi tanto tiempo que siento que me ahogo.

-Y..Yo también....- digo complicada. Ella se ríe y toma mi mano joven y sana con la suya pálida y envuelts de tubos de plástico..


Camino por el pasillo del hospital con una bolsa de plástico en la mano, llevaba unas galletas que la madre de Cameron había hecho y me había regalado unas cuantas.Abro la puerta y me encontré con la enfermera doblando unas sábanas en la cama de ella.

-Hola Alice- me dice la enfermera triste.

-Hola- dejo las cosas en una mesa- Elena tiene revisión?

-Lo que- empieza a decir la enfermera.

-Gracias Domina, yo me encargo- oímos detrás mío, el doctor con su bata blanca y lentes estaba parado perfectamente formal.

-Si con permiso- dice ella y se va apresurada.

-¿Sucede algo doctor?- le miro- ¿Acaso.. La condición de mamá empeoró?

El respira profundamente- Si, empeoró... Intentamos contactarla pero no contestaba, lo siento pero los glóbulos blancos se reprodujeron demasiado rápido que no pudimos hacer nada al respecto - puso una mano en mi hombro- Lo siento..


Escuchaba las condolencias de los parientes y amigos de ella. Pero no me importaba sus viles mentiras, al día siguiente se olvidarían de ella y seguirían con lo suyo. La odio tanto.. Caí de nuevo en su red de mentiras, me acechó, en engatusó y me dejó de nuevo.
Maldita seas Elena..

Cambio de RolesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora