Cambio de Roles

Encantada de conocerla querida novia de mi hijo

Era la última hora de la jornada, a Alice le tocaba clase de artes en esos momentos y su maestra los había puesto a pintar en lienzo. En cuanto tocó la campana la maestra dejó de mirar su revista de chismes de las estrellas.

- Ok chicos, eso fue todo por hoy, limpien sus utensilios y podrán irse a casa- Se levanta y saca su morral de colores vivos. Empieza a guardar sus cosas.

Todo mundo se levanta y se quitan sus delantales, Alice una vez que se lo quita se deshace de su coleta alta de caballo y toma el montón de pinceles de diferentes tamaños y los lleva a uno de los fregaderos que había en el aula.

Prendió el chorro y paso su dedo índice y pulgar ente los cabellos de los pinceles y el agua debajo de estos empezaron a tomar colores cambiantes.

Una ve que acabó el arco iris acuático se da vuelta y lo vio esperándola fuera del aula apoyando en el marco de la puerta con sus Beats colgando de su cuello y sus manos en los bolsillos de su chaqueta.

Suspira de alivio, sólo por estar ahí esperándola sin saber si le vería a la cara o no.

Metió todo en su bolsa rápidamente, se la colgó en el hombro y salió para encontrarse con el

- Vamos- se musitó a decir mientras emprendía de nuevo su caminata pero a paso lento para que ella estuviese a su ritmo.

Una vez que salieron se detuvieron en el umbral como aquella vez bajo la lluvia.

- Y tu chófer?- pregunta el apoyándose en una de las torres que sostenía el techo de la entrada.

- Está afuera- contesta empezando a caminar.

Una vez que están fuera del estacionamiento y ahora se encontraban en la acera.

- Donde dices que está?

-Acá- grita Alice desde una distancia de más de dos metros, jamás se dio cuenta que se había alejado de su lado sin decirle, no le gustó eso. Alice estaba medio metida en un taxi blanco y amarillo y su mano la agitaba para que se acercase. Una vez que entran y cierra Nickolas la puerta al lado suyo le da la dirección al anciano con boina gris que manejaba el móvil.

- Y porque ahora vamos en taxi? - Pregunta guardando sus beats en su mochila de lado de piel.

- En cuanto llamé para decirles me dijeron que comió algo malo entonces--- empieza a decir Alice.

- No llamaste- afirma

Alice agacha la cabeza y asiente.

-Es por como me comporte?- pregunta

Vuelve a asentir nuevamente.

-No te preocupes por eso, ya te lo había dicho, soy muy tosco en mi personalidad- acomoda un mechón rubio detrás de su oreja con tres piercings, dos de perlas y uno con un diamante.

-No te dolió?- pregunta Nickolas refiriéndose a las perforaciones?

-Esto? Nop- remarca la "p"- Creo que a Cameron le dolió mas, y eso que ella fue la de la idea.

-Ya.

Termina a la conversación con una sonrisa de ambos lados, después de unos minutos llegaron a su destino.

En cuanto bajaron ambos colaboraron para pagar el taxi, el otro era muy insistente en pagar y viceversa.

Alice miró la casa con sorpresa, era una pequeña casa, y cuando es pequeña es pequeña, en las ventanas de la entrada había unas cuantas macetas con flores básicas como margaritas y lilas. La pintura estaba algo vieja y descuidada pero fuera de eso, la casa daba un aire acogedor.