Andrómeda: y la era de los jóvenes Vengadores. #1 [¡Completa!]

22. ERF02 = Anti-Vengador.

Capítulo 22: ERF02 = Anti-Vengador.

Cae la noche y yo estoy en mi habitación leyendo un libro, en eso escucho la puerta abrirse, levanto la mirada, es Rocket.

—Hola. —me dice y yo sonrío.

—Pasa Rocky. —le digo y él se acerca a mi, yo le acaricio su cabeza.

—¿Cómo sigues? —dice sentándose a mi lado en la cama.

—Ya estoy mil veces mejor. —le sonrío.

—Que bueno, de verdad, quise esperar a que estuvieras calmada para hablar contigo. —me dice y yo asiento. —¿En serio él te hizo todo eso? 

—Cooper me hizo mucho daño, claro, pero, el principal de Roderick. —le digo y empiezo a contarle cosas que él no sabía, Rocket no sabía sobre mis cicatrices en mi abdomen.

—Mira, yo sé que antes te peleaste con James, pero, no tuviste que haberle dicho eso.

—Wow, que rápido corren los chismes. —comento rodando mis ojos y él se levanta.

—Andrómeda, es cierto, no tuviste que haberlo dicho, él está muy enojado por eso. —me dice y yo me sorprendo.

—¿Será que puedo...?

—No, no puedes ir a hablar con él. —me dice y yo bufo.

—¿Entonces por qué me dices esto Rocket? —lo miro y él bufa.

—Para que reflexiones, ya no eres una niña, no puedes decir las cosas que se te ocurran sin pensar en los demás. —habla Rocket de manera grotesca, como siempre, pero, tiene razón.

—Gracias Rocket, por hablarme con tanta sinceridad. —le digo mirándolo y él asiente.

—No hay de qué. —me dice y se me acerca, yo le acaricio su cabecita y le sonrío. —Buenas noches, Galaxia. —me sonríe y se va.

Pasan las horas y yo me voy para la terraza que tiene el último piso y me pongo a ver toda la ciudad, analizando todo, pero, pensando en los ojos de Loki, bueno, en su color, era un color precioso, nunca en mi vida lo había visto, ni cuando podía ver colores.

—¡Auxilio! ¡Ayúdenme! —estos gritos de desesperación hacen que salga de mis pensamientos.

Veo a un chico sin camisa, sin zapatos, solo con un pantalón, corriendo por media calle.

—¿Qué demonios? —murmuro, no voy a saltar porque me mato, obvio, pero tengo que llegar rápido, ¿Y si lo están persiguiendo?

Corro hasta la habitación de Morgan y toco la puerta.

—¡Pase! —escucho y abro de golpe, Morgan me mira impresionada. 

—¿Qué pasa? —me mira y se levanta de su cama.

—Llama a Friday, pero ven. —digo y la llevo corriendo hasta la terraza.

—Por favor, alguien ayúdeme. —grita el chico, se ve totalmente desorientado y asustado.

—Vamos. —me dice y se toca las muñecas, tiene unos brazaletes que tienen un botón, estos le activan la armadura a Morgan, ella me toma de la cintura mientras que yo la abrazo  y empieza a volar, llegamos cerca donde está él.

—Ve tú, yo vigilo. —me dice y yo asiento, corro hasta él.

—Hey, ¿Qué pasa? ¿Estás bien? —le digo y él se voltea, lo primero que le veo es lo que trae en el pecho.

ERF02, por Dios...

—Ayúdame, por favor. —me dice llorando mientras se me acerca. —Me está persiguiendo ese tipo loco. —solloza.