Ser mejor amiga de Scorpius Malfoy fue de las mejores cosas que le pasó en la vida.
Conocer a su padre fue su perdición.
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Fecha de publicación: 17/09/2021
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𝓔 | ESME STANFORD
—¿Por qué tenemos que ocupar esta túnica? Podríamos perfectamente usar las de clases, esta está demasiado-
—¿Calurosa? Sí —interrumpí a Jade, la cuál se miraba frente al espejo, intentando acomodar la prenda de ropa que nos habían dado el día anterior.
—¿No hay hechizos para arreglarla o algo?
—Creo que están hechizadas, pero como sea —suspiró, dándose la vuelta nuevamente hacia mí.
Me estaba atando los cordones de mis zapatos, y arreglando las calcetas escolares, aunque sabía muy bien que apenas se iban a ver debajo de la gran túnica que tenía encima.
Era viernes, día de nuestra graduación. Teníamos que estar todos listos para las tres de la tarde, para bajar y saludar a nuestras familias que llegarían para la gran ceremonia.
Me encontraba muy nerviosa, eso estaba clarísimo. El sólo hecho de tener todas las miradas encima mío cuando recibiera mi diploma, era suficiente como para ponerme completamente abrumada.
—¿Scorpius te mencionó algo de Rumania? —preguntó de repente, mientras me arreglaba los últimos detalles de mi cabello.
Fruncí el ceño, girando inmediatamente hacia ella.
—¿Cómo?
La vi exhalar profundamente, antes de caminar hacia mí para sentarse a mi lado, justo en la orilla de mi cama. Jade había venido a arreglarse a mi habitación, para que nuestros últimos momentos en la escuela no fueran demasiado penosos. Sus maletas estaban en la puerta de mi habitación, al igual que la mía, y sonreí al ver a Agate dormido dentro de su jaula, listo para ser llevado conmigo a Londres.
—No sé, comenzó a decir cosas como que no le importaba irse conmigo, y no sé, Esme —negó con la cabeza—. No quiero que se vaya conmigo y sienta que está amarrado a mí, ¿no sé si me entiendes?
Yo asentí, entendiendo exactamente a qué se refería. Porque no iba a mentir, me sentía de la misma manera con Draco; ¿de verdad iba a dejar a Scorpius y a su mamá acá para irse conmigo a otro país?
—¿Pero lo dijo como una suposición, o-
—Sonaba bastante serio —afirmó—, ¿y sabes qué es lo que más me aterra, Esme?
Me acerqué a ella un poco, inclinando mi cabeza a un lado prestando toda mi atención a ella.
—¿Que cosa?
—Que sí quiero que vaya conmigo.
Sonreí, pasando mi brazo por sobre sus hombros y dándole un pequeño abrazo.
—Oh, Jade —suspiré— ¿Y le dijiste eso?
—No aún no, simplemente me quedé pensando y ya luego Albus llegó con Jacob y el tema se acabó —explicó—, y necesito hablar con él antes de mañana.
