No es una cita.
Esa, era una frase que Jimin se había estado repitiendo a sí mismo desde que recibió la llamada de su Hyung más temprano, hacía un par de horas exactamente.
Y desde ese momento, el omega no había hecho más que limpiar su habitación.
Sí, es verdad que le había prometido a Yoongi que se quedaría tranquilo y descansaría lo que el médico le había aconsejado hacer, pero era algo difícil de mantenerse quieto cuando su mente tomaba cualquier oportunidad para recordarle sobre su cita, que obviamente sabía que no era una.
Solo se trataba de Min Yoongi, aquel alfa que lo veía como un hermano menor al igual que Taehyung, solo que él era un poco más de cuidado, ya que era un omega y su amigo un beta, en teoría, Tae tenía más probabilidades de defenderse que él.
Y eso ya había sido crudamente comprobado un par de noches atrás, ¿no?
Un estremecimiento recorrió todo el cuerpo del omega de solo pensar en Taemin saliendo del auto, arrastrándolo al callejón, golpeándolo y destrozando su ropa.
Sus palabras, su toque, su aliento. Por más que Jimin intentaba no pensar en ello, los recuerdos lo abordaban cuando no esperaba y en sus sueños, jugaban una y otra vez, haciéndole vivir nuevamente esa pesadilla sin fin.
Lo peor de todo, es que su sueño parecía tan real, que más de una vez había despertado en medio de la noche con un grito silencioso, su rostro manchado con lágrimas y su empapado en sudor.
Lo único que había logrado calmarlo lo suficiente para seguir durmiendo, había sido la chaqueta de su Hyung, a la cual se había aferrado y enterrado su rostro en ella para capturar esa tomentosa esencia que le calmaba y le hacía sentirse protegido junto a su lobo, y en lo profundo de su mente, amado.
Tal vez el hablarlo con alguien ayudaría, pero no había querido contarle nada a Yoongi porque no quería molestarlo más de lo que probablemente ya estaba haciendo.
Desde salió del hospital, el alfa constantemente le había estado monitoreando aún en medio de su trabajo, con llamadas para saber cómo estaba y mensajes para recordarle tomar sus medicamentos a las horas indicadas.
Y con tanta atención, su lobo omega obviamente estaba en júbilo, aceptando felizmente la presencia del alfa y malinterpretándola con interés, cuando Jimin sabía la verdad.
Pero a pesar de saberla, a veces él mismo se dejaba engañar y se permitía pensar en un mundo donde alguien tan increíble como Min Yoongi realmente lo quería como un hombre, como su omega, y no simplemente como un hermano menor que es el mejor amigo de su hermano.
Era patético, y Jimin lo sabía.
Con tanto tiempo separados, uno pensaría que olvidaría fácilmente a su primer amor, pero obviamente, él no había tenido esa suerte, y lo peor de todo, su tonto enamoramiento no hacía más que empeorar con cada atención del alfa.
Si Taehyung lo viera, no dudaría en que este le estaría recordando que Yoongi no salía con omegas y que tal parecía, que podría estar viendo a otra persona.
Pero él había indagado sutilmente sobre eso cuando el alfa le había llamado, y Yoongi le prometió que no tenía nada que hacer, nadie a quien ver, y lo mejor de todo, que no le importaría cancelarlo para ir a verlo.
"Para comprobar que realmente estás siguiendo sus indicaciones, cuidado de ti como prometiste hacer" le recordó una molesta voz en su cabeza, bajándole de las nubes nuevamente.
No le tenía especialmente agrado a esa voz, pero... Sabía también que era bueno que estuviera ahí, porque le recordaba mantener sus pies en el suelo, en la realidad que le rodeaba.
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Lost on You
FanfictionTras una racha de mala suerte en el amor, ya sea con su familia o con los alfas, Park Jimin está por rendirse en encontrar el verdadero amor y tal vez solo conformarse con lo que le toque cuando su primer amor y crush de toda la vida, llega en escen...