Capítulo 16
Rhett Owens
Una respuesta.No quiero agobiarla, pero el momento perfecto me parece ahora. Es especial…
Entiendo que su mente trabaja sin descanso, y que seguramente se está llenando de preguntas que para mí tienen claras respuestas pero que para ella quizás no.
¿Por qué yo?
¿Por qué quiere estar conmigo?
¿Qué tengo de especial?
Y tal vez no sean ni la mitad de las preguntas que rondan por su cabeza pero puedo responderlas viéndola a los ojos, porque realmente quiero estar con Arielle.
──No tienes que responder ahora. ──susurro muy cerca de ella.
Las luces de los brazaletes se intensifican, y elevo mi mano hacia su rostro su belleza es inexplicable.
──¿estás seguro?
──Muy seguro… y estoy dispuesto a todo.
Se abraza a mi pecho mientras la música sigue y todos disfrutan del gran espectáculo que se está ofreciendo por parte de la banda. Ella eleva su mirada y sonríe con dulzura hacia mí.
──Si.
──¿Si?
──¡Si!
Sonrío al escucharla y la pego más a mi cuerpo, bajo mi rostro para buscar sus labios, y fundirme en ella.
Sus besos son delicados, dulces y algo tímidos. Me encanta. Me hace sentir miles de maravillas en el cuerpo.
Nos separamos ligeramente y ambos sonreímos llenos de emoción, me siento bien, me siento feliz, me siento en paz.
He tenido relaciones en mi vida pero ninguna me había hecho sentir lleno de emoción, lleno de vida. Es como una chispa que se enciende dentro de mi ser.
Cantamos abrazados y llenos de adrenalina, brincamos y disfrutamos de la noche. Los fuegos artificiales no se hacen esperar haciendo el cierre del espectáculo, tomo mi teléfono nos hago un par de fotografías para tener un hermoso recuerdo de este día.
Un día que para ella empezó mal por lo culpa, por haberme quedado dormido en su casa, y merecía terminar de la mejor manera. Entrelazo su mano con la mía y la guio hacia la salida donde los brazaletes deben ser entregados.
Arielle empieza a hablar emocionada de todo lo que vio en el concierto, el brillo de sus orbes me indica que está muy feliz.
Respira con fuerza y sonríe mirando el cielo.
──El mejor día de mi vida. ¡En serio! Y fue gracias a ti…
Corre a mis brazos y la cargo.
──Es primero de muchos, te lo aseguro. ──afirmo uniendo nuestras frentes.
──Espero ser lo que deseas.
──Lo eres, Arielle.
──Soy de alta demanda. ──advierte por su ansiedad.
Entiendo que necesitara más de mi, que yo de ella. También comprendo que quizás existirán días que se pondrá a prueba nuestra relación pero quiero intentarlo.
──Y yo puedo con lo que sea. ──musito.
La bajo al suelo y caminamos hacia la camioneta.
──¿Comemos algo? ──pregunto.
──Si, por favor. Tengo apetito. Algo extraño. ──susurra.
Aprovecho eso y acelero el motor de mi camioneta para llevarla a comer hot dog, que es lo que le provoca en este momento.
ESTÁS LEYENDO
Respira
RomanceA veces olvidamos que la vida consiste en tomar un largo respiro y continuar con el camino. Si algo he aprendido es eso... ha apreciar hasta esa pequeña bocanada de aire fresco que inhalas y expande tus pulmones haciéndote sentir vivo y pleno. Vol...