El capítulo había terminado, y Shin subió volumen al televisor, para escuchar mejor la canción del final, que era su favorita.
–Si pudiera comenzar a ser la mitad de lo que crees de mí, cualquier cosa podría hacer, y podría aprender a amar...
Tarareaba junto a la suave melodía, mientras deslizaba con cuidado el color marrón por encima de su dibujo.
–Cuando veo que actúas así, me pregunto cuándo volverás. Cualquier cosa podría hacer y podría aprender a amar como tú...
Sacó su lengua, concentrado.
Todos los juguetes desparramados a su alrededor eran irrelevantes.
Solo eran él, su dibujo, y la música.
–Siempre creí que sería malo, y ahora sé que es verdad. Porque tú eres tan bueno, y no soy como tú. Te has ido hoy, y yo te adoro. Quisiera saber qué te hace pensar que especial soy...
Ahora tomó el color rosa, pintando las flores con cuidado de no salirse de las líneas.
Era el mejor dibujo que había hecho hasta ahora.
–Si pudiera comenzar a ser algo que esté bien para ti, cualquier cosa podría hacer y podría aprender a amar como tú...
La música acabó, y el pequeño también, el cual sonrió satisfecho al ver el resultado.
-Listo. –Chilló emocionado, dando un corto beso al papel. –Ahora está bonito.
Había capturado bien la esencia de su papi Hobi.
Jungshin suspiró, guardando el dibujo en su carpeta azul.
Miró a su alrededor, con su habitación vuelta un desastre; juguetes por doquier, la cama deshecha, la televisión encendida con un volumen aturdidor, pero no era suficiente.
Ese cuarto seguía siendo frío y solitario para él.
Apagó la TV, y recogió sus juguetes.
Su padre Taejin había comprado tantos juguetes que ya no tenía donde ponerlos, pero no jugaba mucho con ellos.
Hizo su cama como su papi le enseñó, y terminó por salir de la enorme habitación siendo acompañado de Mang.
Sabía que Taejin lo regañaría, pero él ya se había aburrido de estar solito.
Bajó las escaleras en pequeños saltos, mientras se aferraba a la barandilla. Sus pies sintieron frío, ya que solo iban cubiertos por unas adorables medias de Iron Man.
Se detuvo al pie de la escalera y asomó su cabeza, notando a su padre sentado en el sillón, mientras veía las noticias.
A Jungshin le desagradó un poco verlo tomar whisky.
Él odiaba el whisky.
-Papá Taejin. –Llamó con voz sutil, sin querer hacerlo enojar. –Estoy aburrido. –Mencionó con un mohín en sus labios.
-Te dije que te quedaras jugando en tu habitación. –Proclamó Kim, sin darle demasiada importancia al niño.
-Pero ya me cansé. –Se quejó, lloriqueando un poco.
Por fin el hombre se dignó a mirar a su hijo, y su mirada no fue la más amigable u cariñosa.
-No me interesa. Quédate en tu habitación y no molestes, Jungshin.
Al escuchar la ligera molestia de su padre, el pequeño prefirió desistir a la idea de que jugara con él.
Después de todo, nunca jugaban.
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Jungkookie Hyung
FanfictionUn divorcio es un nuevo comienzo, ¿cierto? Al menos, Hoseok quería convencerse de eso. Pero, él quería un nuevo comienzo donde solo estuvieran él y su hijo. Nadie más. Sin embargo, Jungkook no parecía ser alguien que se rindiera fácilmente. Él podrí...