🌑Así no era...☀️

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Jungshin bostezó, abriendo la puerta de su habitación para ir directo al baño que se encontraba al otro lado del corredor.

Cuando estaba a punto de entrar, la enorme figura de su tío Yugyeom apareció frente a sus ojitos, a lo que sonrió enormemente.

—¡Tío Yugy! –Saludó con emoción, consiguiendo que el hombre lo mirara.

Yugyeom se inclinó frente al niño, acariciando su cabello.

—Eh, bicho. –Saludó cálidamente. —¿Quieres ganarte 20$? –Ofreció de pronto, a lo que Jungshin asintió sin pensarlo dos veces.

—¡Claro! ¿Qué necesitas? –Inquirió interesado.

Yugyeom sonrió.

—Bien, te daré 20$ si consigues que tu papi baje al sótano, ¿De acuerdo, bicho?

El rostro del niño se volvió una mueca inquisitiva, mirando con desconfianza al mayor.

—¿Para qué quieres eso? –Enfrentó dubitativo, cruzando sus brazos sobre su pecho.

Sin embargo, la sonrisa de Kim no desapareció de su rostro.

—Ven, acércate.

Jungshin obedeció, a lo que Yugyeom le susurró su plan al oído.

De la nada, el pequeño saltó feliz, absolutamente de acuerdo con su tío.

—¡Oh, claro que sí! –Chilló sonriente.

Yugyeom asintió, y sacó 20$ del bolsillo de su chamarra, antes de entregárselo a Shin.

—Toma, 20 para que hagas lo que te pedí. Y recuerda, morir callado. ¿Hecho?

El niño asintió, apretando sus labios en señal de silencio.

Pronto se giró, y corrió por el pasillo hacia el living, yendo en busca de su padre.

Yugyeom se sintió satisfecho, y rápidamente se dirigió a completar su plan.

Caminó despreocupado hacia la cocina, donde había visto a Jungkook entrar hace un segundo.

—¡Jungkook! ¡¿Dónde estás, mi amor?! –Llamó en voz alta, viendo con diversión como el aludido se ocultaba junto al refrigerador. —¡Ya te vi, te estás escondiendo detrás del refrigerador!

Jeon lo enfrentó con su ceño fruncido, mostrándose irritado.

—¿Qué quieres, Yugyeom? ¿Por qué no puedes estar en silencio como los demás?

—Te tengo una propuesta. –Kim se acercó a su amigo, sujetándolo de las mejillas para dejar un rápido beso sobre los labios de este. Jungkook hizo un gesto de sorpresa, y Yugyeom murmuró cerca de él: —¿Qué te parece si bajas al sótano conmigo?

Jeon lo empujó con fuerza, consiguiendo distancia antes de limpiar su boca con su antebrazo.

Lo peor es que se había sonrojado como un idiota.

Yugyeom quiso reír.

—¡Oh, no! ¡Por supuesto que no! ¡Ni lo pienses, degenerado! –Bramó indignado el más bajo.

—¡No es para eso! –Aclaró rápidamente Kim, sonriendo con diversión.

—¡¿Entonces qué carajos voy a hacer contigo en el sótano?! –Reclamó Jungkook, cruzándose de brazos.

—Perdí mi celular. Fui a buscar una botella que Jimin me pidió, pero dejé caer mi celular, y necesito que me ayudes a buscarlo. –Excusó, volviendo a acercarse a su amigo, y besando su mejilla. Este le miró con asco, a lo que él sonrió inocente. —¿Porfis? –Soltó con una voz ridículamente tierna.

Jungkookie HyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora