Yoongi lo había reprendido con su mirada más severa.
Y de pronto, él entró en razón.
No podía dejar que la familia de Jeon se separara, era injusto.
Y como oficial a cargo de ese caso, daría su mayor esfuerzo para que todo terminara bien.
Habían pasado dos días, y Kim Jungshin, estaba bajo la custodia del gobierno, resguardado en una casa hogar, donde le habían prohibido cualquier contacto con sus padres.
No quería ni imaginar cómo se sentía Hoseok ahora mismo.
De tan solo recordar todo lo que lloró y gritó cuando se llevaron a su niño, le partía el corazón pensar que aún estaba devastado.
Hoy llegarían los resultados de los análisis psicológicos, y esa sería su única oportunidad para devolver a Jungshin con su familia.
Si no salía como esperaba, estaría jodido.
Sin embargo, aún sin resultados, se llenó de valor para confrontar a su compañera de trabajo.
Lee Hyejin, quien sin tener una respuesta concluyente, ya estaba pensando en las posibles familias para Jungshin, arreglando los papeles de adopción.
Eso le había indignado.
Es decir, la mujer ni siquiera sabía si el pequeño estaba bien de la cabeza, y ya quería mandarlo con unos completos desconocidos.
Cuando la puerta se batió sonoramente, por reflejo Hyejin alzó la mirada de su extenso papeleo, notando que la única persona que se atrevía a entrar a su oficina sin tocar, era el oficial Kim Seokjin, quien ahora se posaba ante ella de brazos cruzados.
—¿Puedo ayudarte en algo? —Inquirió innecesariamente, pues sabía muy bien a qué se debía la repentina visita del oficial.
—Estás siendo muy injusta.
Aquella acusación solo consiguió que la mujer rodara sus ojos con desdén, antes de bufar:
—Solo hago mi trabajo.
—¿Tu trabajo es arruinarle la vida a las personas?
Seokjin la confrontó, ahora siendo severo y lo único que logró fue que la mujer le mirara con fiereza.
—Mi trabajo es salvar a un pobre niño inocente de una familia negligente. —Declaró ella, dejando su pluma a un lado, para cruzar sus manos por encima del escritorio.
Estaba indignada, después de todo, Seokjin normalmente nunca cuestionaba sus decisiones laborales.
Aunque ahora, él parecía muy convencido de retarla en esta ocasión.
—¿Lo que vimos hace dos días parecía una familia negligente para ti? —Replicó el moreno, con su ceño fruncido. —Al principio también lo creí después de interrogar a Jungshin, sin embargo es imposible continuar creyendo algo como eso después de ver la forma en la que ese pequeño reaccionó cuando vio a su familia. Un niño que es maltratado, no tendría esa reacción, es evidente que los adora.
Hyejin resopló, sin confiar un poco en el romanticismo de su colega.
—¿Cómo puedes tener la certeza de eso? Podría estar siendo manipulado o maltratado mentalmente.
La mirada del oficial se volvió feroz, y pronto extendió su mano a la mujer con premura.
—Muéstrame el análisis psicológico que pruebe eso. —Dijo, a lo que ella se alzó de hombros, dándole a entender que no lo tenía. —Cuando llegue, lo veremos.
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Jungkookie Hyung
FanfictionUn divorcio es un nuevo comienzo, ¿cierto? Al menos, Hoseok quería convencerse de eso. Pero, él quería un nuevo comienzo donde solo estuvieran él y su hijo. Nadie más. Sin embargo, Jungkook no parecía ser alguien que se rindiera fácilmente. Él podrí...