🌑Última Oportunidad☀️

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Jungshin miraba por la ventanilla del vehículo en movimiento con hastío.

Ya estaban por llegar a la casa de su padre, y en todo el camino, este ni siquiera había puesto algo de música.

Shin honestamente, no disfrutaba la compañía de su papá Taejin.

En parte, guardaba cierto rencor por lo que le había hecho a su papi Hobi. Y la otra razón, era que simplemente Kim no lo hacía sentir lo suficientemente amado.

Hoseok y Taejin eran muy diferentes, y eso no era un secreto.

Con Hoseok; siempre habían abrazos, palabras cariñosas, besitos en la frente o sus mejillas, y comida deliciosa.

Con Taejin, por el contrario, no habían palabras que no fueran cruciales, como: “Deja eso”, “Quédate quieto”. No habría contacto, si Jungshin no tenía el valor de buscar un abrazo de su padre, y jamás habrían besos u comida deliciosa.

Shin fue acostumbrado por su papi Hobi a demostrar mucho amor a las personas queridas, a siempre decir cuánto las aprecias, ser alegre y ruidoso para Hoseok no era un problema. Pero con Taejin, Jungshin se sentía privado de todo esto.

“No hagas ruido, cállate ya.”

“Ve a tu habitación. No eres un perro para estar todo el día en el patio.”

“No hables a menos que te lo diga.”

“Jungshin, quítate de encima.”

A su padre Taejin le molestaba todo lo que Jungshin era por naturaleza, por lo que el pequeño se reprimía demasiado cuando estaba en presencia de su padre, solo para no hacerlo enojar.

Era normal que no se sintiera feliz y cómodo con su compañía.

Y aunque el infante tuviera algunos buenos recuerdos con su padre Taejin, la balanza no estaba equilibrada, ya que la mayoría, eran más que todo pesadillas que el niño deseaba olvidar.

Taejin era el papá aterrador, ese que tenías miedo de saludar cuando llegaba a casa.

Y Hoseok era el papá feliz, el que tenía como único lenguaje ser amoroso siempre.

Claro que había desarrollado una enorme brecha preferencial.

Y ahora con Jungkookie Hyung en su vida, Jungshin no sentía el mínimo interés por su padre Taejin.

No lo necesita.

Sin embargo, Taejin no es conocedor de esto, él piensa que su hijo lo adora, y que siempre será una llave segura para llegar a Hoseok.

Muy ilusamente lo tiene asegurado en su cabeza.

-¿Cómo te sientes? –Preguntó repentinamente hacia su hijo, quien al escuchar la voz de su padre, se irguió en su asiento, y se apresuró a responder.

-Bien.

Kim dobla por una de las calles de su residencia, deteniéndose en el semáforo.

-¿No es nada grave, verdad?

El pequeño negó con su cabeza.

-No.

-¿Cómo vas en la escuela?

La luz cambió a verde, y el auto avanzó de nuevo.

-Bien.

-¿Algo que estés haciendo últimamente?

La casa ya estaba cerca, y Shin se removió en su asiento.

-Bueno... –El pequeño dudó. ¿A su padre le interesaría? Nunca lo había hecho antes. –Me uní al equipo de natación en la escuela, el entrenador dice que soy muy bueno. Y...

Jungkookie HyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora